El caos desatado en el aeropuerto Jorge Chávez, por un cortocircuito que afectó el sistema de luces de borde la pista de aterrizaje y provocó la cancelación o retraso de decenas de vuelos nacionales e internacionales, se convirtió no solo en un dolor de cabeza para llegar a destino, sino también en un duro golpe a los bolsillos de miles de usuarios.
La desesperación por viajar en la fecha programada originó que numerosos pasajeros afectados —varios con la premura de llegar a su destino para darle el último adiós a un familiar muy querido o estar presente en el entierro de su padre o madre— buscaran en el transporte terrestre una salida a la emergencia, aunque bastante cara.
En un despacho de un corresponsal de Latina Noticias, se informó que las empresas de transporte trerreste elevaron sus precios de manera exorbitante. El costo del pasaje de Trujillo a Lima, entre el domingo y lunes, llegó a costar hasta 1200 soles (10 veces más de lo normal). Un pasaje por esa ruta tiene un valor no mayor a 100 soles.
“Se dio la misma noche de la emergencia, ayer también había vehículos que ofrecían a la ciudad de Lima, que es un viaje en carretera, que puede ir desde las 7 horas y, de día puede prolongarse hasta 10 horas, cobraban entre 1200 a 1500 soles. Hoy (martes 4 de junio) ya no vemos ese tipo de vehículos, la cosa está volviendo a la normalidad, al menos aquí en Trujillo”, detalló el hombre de prensa.
En el despacho, se precisó que ya la situación se estaba normalizando en el Aeropuerto Internacional Capitán FAP Carlos Martínez de Pinillos para tranquilidad de decenas de pasajeros que quedaron varados por los problemas en el Jorge Chávez del Callao. Las personas ya podía viajar con normalidad vía aérea.
“Este es el panorama: todos los vuelos, tanto los que llegan de Lima como los que parten a Lima, están programados. Lo que sí hay que señalar es que los vuelos programados son los que no salieron ayer. Hay pasajeros que llevan más de un día en nuestra ciudad y están esperando abordar”, informó el periodista.
Esta penosa situación no solo registró en el norte del país, al otro lado, en la zona sur, en la localidad de Pisco (Ica). Infobae Perú conoció, por testimonios de pasajeros afectados, que tuvieron que gastar hasta 500 soles por el servicio de taxi particular para llegar al centro de la ciudad capital.
Cusco, una de las principales regiones turísticas del Perú, también reportó un panorama similar al de Trujillo y Pisco. Usuarios informaron a este medio que gastaron más de 350 soles por un pasaje en bus. El valor de un viaje terrestre de esa ciudad hacia Lima, en una de las empresas con mejor nombre del país, no sobrepasa los 180 soles.
Podría repertirse la emergencia
José Luis Barrios, presidente de la Corporación Peruana de Aeropuertos y Aviación Comercial (Corpac), advirtió que el aeropuerto Jorge Chávez podría enfrentarse a una nueva suspensión de vuelos por la falta de un plan de contingencia para solucionar problemas de cortocircuitos en el cableado subterráneo.
Ante la Comisión de Defensa del Consumidor del Congreso de la República, Barrios señaló: “No puedo garantizar que en esos cuantos metros (no ocurra otro cortocircuito). Sería mentir. Aquí tenemos que ser francos, honestos y transparentes. Pero tampoco podemos hacer un cambio total de cableado, porque eso implicaría romper la pista, esperar tres o cuatro meses, sin que esté habilitada la otra. Vendría un caos mayor”.
Según el directivo,la forma de evitar futuras paralizaciones sería renovar completamente el sistema de alumbrado, pero la responsabilidad de esta renovación recae en Lima Airport Partners, empresa a cargo de la administración del aeropuerto.