El Tribunal Constitucional emitió una resolución en la que ordena al Instituto Nacional Penitenciario (INPE) que, en un plazo máximo de cinco días, resuelva la solicitud del expresidente Alejandro Toledo para recibir atención médica en la clínica privada San Pablo. Como se sabe, el expresidente denunció que se vulneraron sus derechos de acceso a la salud y a la integridad personal.
La sentencia del Tribunal Constitucional declara parcialmente fundada la demanda de habeas corpus presentada por Toledo. Además, anula las notificaciones anteriores que establecían que su atención médica se realizaría en EsSalud, conforme a su seguro de salud vigente, y la que rechazaba su solicitud de ser atendido externamente en la clínica San Pablo, ubicada en Surco.
El fallo del Tribunal Constitucional señala que la negativa de la administración penitenciaria no cuenta con argumentos fácticos y jurídicos sólidos para justificar su decisión de no permitir que Toledo reciba atención multidisciplinaria en una clínica privada, especialmente para exámenes auxiliares que no están disponibles en EsSalud, según los diagnósticos de un médico legista y un médico particular.
“En la actualidad, los establecimientos públicos de salud lamentablemente no se convierten en opciones alternativas en situaciones de urgencia, que brinden, además, sus servicios con el mismo grado de eficacia y rapidez que un establecimiento privado (...)”, se lee en la sentencia.
Sin embargo, el Tribunal Constitucional también declara improcedente la demanda para ser trasladado directamente a la clínica San Pablo, ya que considera que dicha decisión debe ser tomada por el INPE, dentro de sus competencias y tras un análisis detallado de la situación específica de Toledo Manrique.
En su sentencia, el los magistrados recuerdan que en ocasiones anteriores el INPE ha permitido el traslado y tratamiento de reclusos en centros de salud privados cuando las circunstancias lo han justificado.
“Cabe precisar que existen otras situaciones en las que el INPE ha aceptado no solo el traslado, sino también el tratamiento de reclusos en centros de salud privados. Esto ocurrió en el caso del señor Alberto Fujimori, que tuvo atención en la Clínica Centenario Peruano Japonesa. En el referido nosocomio se le realizaron evaluaciones por especialistas en Geriatría y Cardiología, quienes, en mérito a su situación de salud, dispusieron su internamiento en la unidad de cuidados intermedios, así como la toma de muestras y análisis médicos”, precisaron.
El expresidente además presentó dos solicitudes el pasado 15 de junio de 2023 para que el director del establecimiento penitenciario “Barbadillo” le entregue los resultados de los exámenes clínicos y de laboratorio que se realizó en el hospital de EsSalud de Ate Vitarte.
Toledo también exigió que le envíen la receta médica que el prescribió el médico Jhon Lozano. Su objetivo es conocer las nueva medicinas que se encuentra ingiriendo, así como las dosis y para qué sirven.
La respuesta del Tribunal Constitucional fue negativa, ya que explicaron que cada médico que lo evaluó le informó sobre las enfermedades que padece y el tratamiento que tendrá que seguir.
“Asimismo, precisa que cada especialista tratante que evaluó al favorecido le informó sobre las patologías que presenta y el tratamiento, información que en dicho acto también fue brindada al médico tratante del INPE y al familiar del interno que estuvo presente en la diligencia hospitalaria. Añade que, según registros de enfermería, se evidencia mejoría clínica respecto del manejo de la presión arterial del interno, y cuenta con hipertensión arterial controlada”, indicaron.
El caso Interoceánica
A la fecha, el expresidente Alejandro Toledo enfrenta un juicio oral por presunto lavado de activos en el denominado caso Interoceánica. El Equipo Especial Lava Jato ha solicitado en su contra una pena de 35 años de prisión.
Según el presidente de la Corte Superior Nacional, César Sahuanay, dicho juicio acabará este año: “Hay variables que no podemos controlar porque pueden ser más o menos meses, pero lo concreto que esos dos juicios acaban este año. […] Que no se diga que el presidente dijo que se va a condenar. No he dicho que se va a condenar, simplemente que los juicios van a terminar”.