Más de 50 familias se encuentran de luto tras la pérdida de sus seres queridos en accidentes de tránsito que se registraron en los últimos 10 días. Los siniestros ocurridos en la variante de Pasamayo, la Vía Los Libertadores, y en la región de Pasco, evidencian la poca intervención de las autoridades.
Las principales causas identificadas de estos accidentes son el exceso de velocidad y la imprudencia del conductor, según el Ministerio de Transportes y Comunicaciones (MTC). Sin embargo, también se ha visualizado que las carreteras se encuentran en mal estado; factores que han contribuido a la alta tasa de mortalidad en estas vías.
De acuerdo con el Observatorio Nacional de Seguridad Vial del MTC, con información de la Policía Nacional del Perú (PNP), se han reportado 55 accidentes de tránsito solo en carreteras entre enero y mayo. En 2023, la cifra de siniestros alcanzó los 87 mil 172, de los cuales dejó 3.138 personas fallecidas y 58 mil 082 heridos.
No obstante, desde el sector se reconoció que aún las cifras no están actualizadas, debido a que se cuenta con informe preliminar.
Luis Quispe Candia, presidente de Luz Ámbar y abogado especializado en Tránsito y Seguridad vial, indicó a Infobae Perú que el principal causante de los siniestros en el país es el factor humano, debido a la imprudencia de los conductores, pero también existen otras variantes que deben ser analizadas.
“Lo que pasa en las carreteras es muy recurrente la conducta de los conductores, debido a la imprudencia cuando se aproximan a una curva. Generalmente, hay una señal para disminuir la velocidad del reglamento que permite circular hasta 90 kilómetros de velocidad. [...] Si no disminuyen la velocidad en una curva, se ven obligados a invadir el carril contrario”, explica el especialista a este medio.
Tres accidentes en 10 días
El pasado 14 de mayo se produjo un accidente en la Vía Los Libertadores en Ayacucho, donde fallecieron 17 personas; entre ellos, el excongresista Edgar Alarcón. El conductor del bus de la empresa Civa perdió el control y se volcó.
La compañía aseveró que tenía los permisos para transitar en carretera. Para Quispe Candia, el origen se habría producido por el cansancio del conductor, pero afirma que esta causa nunca es reconocida e incluso no se evidencia en las cifras. Además, precisó que los choferes deben laborar máximo 10 horas en 24 horas.
“En general, en este tipo de accidentes es el cansancio o somnolencia de parte del conductor y esta causa que es oculta, porque no figuran en las estadísticas. Cuando sobreviven frente a un accidente de tránsito, jamás reconocen que se quedaron dormidos o laboran más horas de lo debido porque temen perder el trabajo”, mencionó.
En tanto, en el accidente de Cerro de Pasco fallecieron 11 personas, entre escolares y una exalcaldesa. Ante ello, el especialista sostiene que en Perú existen carreteras con una sola línea que separa los carriles, pero existen conductores que no respetan y cruzan a otra vía solo para adelantarse.
La variante de Pasamayo también se convirtió en el escenario de otro siniestro; un múltiple choque dejó tres fallecidos. El accidente tuvo lugar en una zona de alta densidad de neblina que limitó severamente la visibilidad de los conductores.
Según el reglamento de seguridad vial, los conductores deben encender los faros neblineros al transitar por estas áreas, ya que los faros convencionales no son eficaces en tales condiciones, precisa el experto.
Las aristas de los siniestros
El especialista en Tránsito y Seguridad vial asegura que detrás de los siniestros existen diversas aristas que deben ser evaluadas. Desde la corrupción hasta una falta de fiscalización por parte de las autoridades. Para ello, se deben tomar medidas concretas para reducir esta tasa en comparación con el año pasado.
Entre los requisitos para obtener una licencia de conducir se encuentran exámenes médicos, como también la de reglas de tránsito y el de manejo aprobado. No obstante, Quispe Candia indica que existen reportes sobre los actos ilícitos que ocurren para obtener este documento de manera inmediata.
Estas malas prácticas representan un riesgo significativo, ya que la falta de evaluaciones previas podría resultar en conductores no aptos en las vías públicas, poniendo en peligro la seguridad de todos.
Por otro lado, precisa que es importante que las autoridades opten por tomar medidas inmediatas para enfrentar esta situación. Esto debido a que de enero a septiembre de 2023, las empresas formales movilizaron a 57 millones 813 mil 600 usuarios a nivel nacional vía terrestre, así lo informó la Superintendencia de Transporte Terrestre de Personas, Carga y Mercancías (Sutran). De esta manera, existe una alta tasa de personas que viajan por carretera.
“Se debe apelar a la tecnología. Por el momento, se obliga a tener GPS a los buses interprovinciales, pero en la ciudad no pasa eso. [...] cuando ocurre un accidente de tránsito, la Policía manifiesta en su investigación que el vehículo iba a una velocidad no apropiada para el lugar, pero sin haber algo que lo demuestre. La única forma es que se tenga ese dato será un reporte de GPS”, precisó.
En otro momento, indica que no existe una rigurosidad en las normas y leyes peruanas, debido a que muchas veces las sanciones no son pagadas. Si bien algunas carreteras son administradas por concesionarios, existen otras que dependen de Provias Nacional, encargada de administrar y gestionar la infraestructura.
Los desafíos
Los desafíos que también se enfrenta es la falta de fiscalización y control de vehículos en los terminales de transporte del país. La ausencia de una vigilancia adecuada no solo compromete la seguridad, sino también afecta la libre competencia en el sector.
Quispe Candia pide mayor presencia de efectivos y personal de la Fiscalía de la Nación para realizar las diligencias correspondientes. Asimismo, recalca que esto ocasiona que los conductores de los buses se detengan en paraderos no autorizados, pero no son evidenciados por las autoridades.
Para ello, es necesario el trabajo articulado entre el gobierno nacional, regional y local para que de acuerdo a sus competencias actúen.