La aprobación de la presidenta Dina Boluarte se encuentra en su momento más crítico en medio los escándalos de corrupción que la salpican a ella y a su círculo más cercano. Según la encuesta del Instituto de Estudios Peruanos (IEP) difundida este domingo por La República, aproximadamente el 90% de los peruanos desaprueba su gestión, es decir, 9 de cada 10 ciudadanos.
El estudio, realizado del sábado 18 al jueves 23, tiene márgenes de error de 2,8 puntos. Solo un 5% respalda su gobierno. Entre los más pobres, clasificados en los niveles socioeconómicos D y E —que representan el 54,5% de la población—, apenas el 3% aprueba a la mandataria.
En abril pasado, la popularidad de Boluarte se hundió en un 7% a nivel nacional, la cifra más baja registrada durante su gestión y para un jefe de Estado en los últimos 20 años en Perú, de acuerdo con un sondeo de Datum Internacional para El Comercio. Después de mantenerse en un 10% durante el primer trimestre del 2024, su aprobación alcanzó un récord solo comparable con el 7% del expresidente Alejandro Toledo en junio de 2004.
El rechazo ciudadano coincidió con el destape del llamado ‘Rolexgate’, un caso que produjo la apertura de una investigación fiscal por presunto enriquecimiento ilícito y un allanamiento en la residencia presidencial en Surquillo. Posteriormente, su hermano Nicanor fue detenido bajo el cargo de presunto líder de la red criminal ‘Los Waykis en la Sombra’. Solo horas antes del arresto, Boluarte desactivó el grupo policial que apoyaba a los fiscales anticorrupción.
Sobre el Congreso y la crisis política
El Congreso, que ha rechazado las siete solicitudes de vacancia presidencial presentadas en menos de dos años, enfrenta una situación similar, con un 91% de desaprobación y apenas un 6% de aprobación, unos dígitos que se han mantenido constantes.
De todas las bancadas, Fuerza Popular fue la única que votó en bloque y en contra de las solicitudes de destitución. Además, Alianza Para el Progreso, Avanza País, Renovación Popular y Somos Perú también rechazaron mayoritariamente las mociones. En contraste, bancadas como Acción Popular, Podemos Perú, Perú Bicentenario y Bloque Magisterial mostraron votos fraccionados, con lo cual favorecieron la defensa de Boluarte.
En febrero pasado, el exdictador Alberto Fujimori afirmó que la gobernante continuaría hasta el final del mandato, tal como había decidido la agrupación que lidera su hija y heredera política. “El Gobierno de la presidenta va a continuar [hasta entonces], Fuerza Popular así lo ha acordado”, declaró entonces.
De acuerdo con el sondeo del IEP, el 72% de los peruanos indica que la crisis política afecta mucho o algo su economía. Para un 51%, esta situación merma significativamente su situación financiera y para un 21% tiene un impacto menor. Solo un 16% considera que afecta poco su economía y un 9% que no tiene ningún impacto.
El pesimismo prevalece sobre el futuro económico del país. Un 55% cree que en los próximos 12 meses la situación económica será peor, mientras que un 29% piensa que estará igual. Apenas un 10% cree que mejorará. Sobre la percepción del último año, un 72% considera que la situación económica es peor, un 24% dice que es igual y solo un 3% cree que ha mejorado.
A nivel personal, un 36% cree que su situación económica será peor en los próximos 12 meses, un 36% que estará igual y solo un 22% prevé una mejora. Un 56% considera que su situación económica actual es peor que hace un año, un 35% dice que es igual y solo un 7% que ha mejorado.
Finalmente, un 50% piensa que el gobierno de Boluarte será más corrupto que sus predecesores, un 42% que será igual y solo un 5% espera menos corrupción.