Un buen ambiente de trabajo es esencial para fomentar la productividad, el bienestar y la satisfacción de los empleados. Esto genera mayor facilidad para la colaboración entre colaboradores, reduce el estrés y aumenta la motivación, creando así un entorno adecuado en el que los trabajadores pueden desarrollar su máximo potencial y contribuir al éxito de la organización. El estudio Work in progress 2024, elaborado por Buk, concluye en que las personas que sufren de altos niveles de estrés en el trabajo son 4,5 veces más propensas a tener la intención de renunciar, generando así un importante reto a las empresas por desarrollar un clima laboral sano y que, además, conserve a los grandes talentos.
El informe realizado destaca que el estrés tiene diferentes niveles de intensidad con base en las responsabilidades y los roles de los trabajadores. Por ejemplo, así como se identificó que todos los trabajadores revelan niveles de estrés, se registró mayor estrés en el promedio de colaboradoras por sobre los colaboradores. Según la marca encargada del estudio, esto puede ser asociado a las condiciones que enfrentan fuera del ámbito laboral, en la que muchas de ellas mantienen una “segunda jornada de trabajo” para las labores domésticas.
“El estrés es particularmente más severo entre las mujeres, quienes a menudo enfrentan presiones adicionales derivadas de responsabilidades extralaborales”, precisa Buk.
Importancia de preocuparse por el estrés laboral
Según la empresa, las compañías deben prestar particular atención al clima laboral, ya que este puede ocasionar significativos costos adicionales en el futuro. Como antes mencionado, el estrés afecta la salud y el bienestar de los empleados, impactando de forma negativa en su desempeño y, en consecuencia, obstaculizando el crecimiento de la marca. Datos de Buk señalan que altos niveles de estrés agotan a los grandes talentos, por lo cual el empleador debe concentrarse en fidelizar y vigilar tanto el compromiso de sus empleados como su estado de ánimo, bienestar y niveles de estrés.
“Un entorno laboral que no maneja adecuadamente el estrés puede resultar en una alta rotación de personal, lo que a su vez genera costos adicionales y afecta la productividad. Es crucial implementar estrategias que promuevan un ambiente de trabajo saludable”, indica el informe.
Buenas prácticas y programas de apoyo
En la investigación se resalta la integración de prácticas laborales inclusivas y los programas de apoyo como herramientas para mejorar la salud mental y física de los equipos de trabajo, fomentando a su vez un entorno laboral más equitativo y saludable.
“Conocer estos datos nos da la oportunidad de implementar y promover políticas que apoyen la salud mental, la flexibilidad laboral y el equilibrio entre vida personal y laboral”, precisó Sebastián Ausin, quien es gerente nacional de Buk en el Perú. “Además de ser beneficioso para los trabajadores, también conlleva una mayor productividad y satisfacción en el trabajo”.
La relevancia de las áreas de recursos humanos
La preocupación por fomentar buenas prácticas de bienestar en los profesionales de recursos humanos es crucial, ya que estos se convierten en los principales embajadores de la cultura empresarial y desempeñan un papel fundamental en el apoyo a otros equipos y colaboradores. Según datos de Buk, el compromiso y la satisfacción entre los profesionales de recursos humanos son altos, con un 84 % comprometidos y un 78 % satisfechos con su trabajo. Sin embargo, la prevalencia del estrés laboral indica que hay áreas significativas de mejora. Los indicadores son clave para gestionar proactivamente acciones de mejora y garantizar que los trabajadores permanezcan y prosperen en sus puestos.