Lima ya ha dejado atrás el calor y las bajas temperaturas irrumpieron un clima frío esta última semana. Y seguirán, avisó el Servicio Nacional de Meteorología e Hidrología del Perú (Senamhi). De igual manera, el meteorólogo Piero Rivas estimó en Canal N que el nivel de humedad podría llegar al 100%, junto con las lloviznas y la neblina en este inicio del invierno.
En este contexto, se espera que el consumo de emoliente en las calles de Lima aumente. A pesar de que este producto popular y consumido en todas las estaciones del año, en este invierno, con temperaturas frías que se bajarán incluso más, la demanda por esta bebida nacional se verá incrementada por la necesidad de los peruanos de poder combatir la sensación térmica.
Sin embargo, como sucede en el mercado, la demanda de productos podría favorecer la subida de sus precios. En este caso, ¿qué se espera que suceda con el emoliente, dada la termporada de frío que ya se siente en Perú?
¿En cuánto crece la demanda de emoliente en el frío?
Según Edgar Sáenz, el presidente de la Federación Nacional de Emolienteros y Afines del Perú (Fentep), reveló al diario Ojo, que en otoño e invierno la demanda de esta bebida sube en 15% y hasta 30%, respectivamente. Asimismo, en un día frio un emolientero puede vender entre 100 y 120 vasos en la capital.
Sin embargo, esto no significa que las ganancias aumenten, sobre todo en un contexto en que el precio de los insumos para hacer esta bebida han subido. El presidente Saenz detalló a RPP que el impacto más significativo ha sido el aumento del precio del azúcar. “El saco de azúcar que antes oscilaba entre S/80 y S/90, hoy lo compramos a S/180, esta tendencia se mantiene desde mayo del año pasado,” explicó.
Así, cada saco de azúcar, que ahora se compran a S/180, dura entre 3 y 5 días, dependiendo del volumen de ventas. Esto presenta un desafío continuo para los emolienteros, que deben ajustar sus estrategias para absorber el incremento en costos sin trasladarlo completamente al precio final del producto.
El alza del precio del azúcar no es un fenómeno aislado. A inicios del año pasado, la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) advirtió que el azúcar alcanzó su nivel más elevado en los últimos seis años, con un incremento del 6,9%. Este contexto global ha afectado directamente a los productores de emoliente en Perú.
¿Cuánto cuesta un vaso de emoliente?
Saenz también destacó la versatilidad del emoliente, una bebida que se vende ‘’sin importar la estación’'. En las regiones del Perú, su aceptación y consumo son constantes, lo que genera un flujo continuo de demanda que debe ser abastecida, a pesar de los costos crecientes de los insumos.
Asimismo, el presidente de la Fentep precisó que el emoliente se vende actualmente a S/2 en gran parte del país, lo que ya supuso un aumento con respecto a su precio anterior de S/1,50 por vaso; precio que regía antes de mayo del 2023.
Pero, a pesar del incremento en los costos de producción y la mayor demanda, la Fentep informó que este precio no subirá más, una decisión que se debe a una estrategia para mantener su accesibilidad entre los consumidores. Esto es especialmente importante en un país donde esta bebida tradicional tiene un alto valor cultural y es consumida habitualmente por personas de diferentes edades y clases sociales.
Así, a diferencia del 2023, el precio del emoliente se mantendrá constante este año pese a la subida significativa del precio del azúcar, un ingrediente principal. Esta decisión busca no solo preservar el acceso a la bebida sino también apoyar a los consumidores en medio de un escenario económico desafiante.