El gobernador regional de La Libertad, César Acuña, pidió de manera oficial al Consejo Regional que le permita ausentarse de su cargo como gobernador Regional por más de un mes “por motivos personales y sin goce de haber” en medio de un periodo complejo para su jurisdicción, que actualmente se encuentra en su tercer mes de estado de emergencia a raíz de la alta criminalidad que azota la región.
Según lo indicado en el Oficio N° 001321-2024-GRLL-GOB, enviado por parte de Acuña a Ever Cadenillas Coronel, presidente del Consejo Regional de La Libertad, su ausencia del cargo de Gobernador Regional se repartiría en cuatro periodos entre mayo y diciembre de este año:
- Del 24 de mayo al 1 de junio
- Del 28 de julio al 8 de agosto
- Del 4 al 13 de octubre
- Del 11 al 19 de diciembre
En total, César Acuña se ausentaría de su despacho como gobernador por un periodo de 40 días. “De ser otorgadas las licencias en las fechas mencionadas, asumirá el despacho la señora vicegobernadora doctora Joana del Rosario Cabrera Pimentel (...)”, sostiene el documento enviado a Cadenillas Coronel el día 13 de mayo.
Como parte de su solicitud de licencia, Acuña también indicó que “obviamente, en caso de emergencia y en lo que fuese necesario acudir a mi concurso, estaré disponible de manera virtual”, afirma en el oficio.
La Libertad: Tres meses en estado de emergencia
El pedido de César Acuña se produce en medio del segundo estado de emergencia decretado por el gobierno de Dina Boluarte y que estará vigente hasta mediados de junio de este año, por lo que actualmente la región atraviesa por su tercer mes en emergencia.
El periodo inició en febrero de este año y tenía previsto que finalice en abril, sin embargo, la alta actividad criminal en la ciudad de Trujillo y también en Patáz hicieron que el Gobierno decida una prorrogarlo. En las calles se han movilizado una mayor cantidad de agentes de la Policía Nacional del Perú, además del Ejército.
Pese al incremento de las fuerzas del orden en las calles, continuos operativos policiales, intervenciones y la presencia del líder del área de Inteligencia de la Policía Nacional del Perú (PNP), Víctor Revoredo, tanto en la ciudad de Trujillo como en Patáz se continuaron registrando actividades criminales como extorsión, asaltos e incluso atentados contra la infraestructura de empresas mineras.
La realidad por la que atraviesan en ambas zonas del norte del Perú provocó que los ciudadanos se posicionen en contra de la medida adoptada por el Gobierno. De hecho, Hasta abril, la Cámara de Comercio de La Libertad había detectado pérdidas por aproximadamente 7 millones de soles. Su representante, Alfonso Medrano, también se mostró en contra de la medida, pues no consideraba que esta tuviese algún efecto real en la lucha contra la criminalidad.
Extorsionadores utilizan explosivos en contra de colegios en Trujillo
Hasta la primera semana de mayo de este año, durante el estado de emergencia decretado por el gobierno de Dina Boluarte, se reveló que al menos 150 colegios de la región La Libertad eran blanco de delincuentes que exigen el pago de extorsiones.
El general José Zavala, al frente de la III Macroregión Policial de La Libertad, detalló, en conversación con RPP Noticias, que ya se han registrado 35 ataques directos contra instituciones educativas, incluyendo detonaciones de dinamita en algunos casos.
El representante de la PNP mencionó que “la presidenta de las instituciones educativas privadas manifiesta que no quieren denunciar, pero que a ellos les ha llegado las denuncias de 150 colegios privados que han sido extorsionados, de los cuales han sido afectados 27 con bombas”.
La Libertad conquistada por el crimen
Si bien la actualidad de la región norteña es lamentable, esta no surgió durante el año en curso. De hecho, los especialistas en la materia advirtieron en el 2023 que, en caso no se cambiara la estructura de lucha contra el crimen, el 2024 presentaría cifras incluso peores. Dicho y hecho, en el mes de enero se registró prácticamente una muerte por día, producto de la desmedida presencia del sicariato en Trujillo, capital del departamento.
El coronel PNP Roger Torres, ex jefe policial de la región, indicó que las principales causas del descontrol departamental que hoy sufre La Libertad son la minería ilegal y la falta de control migratorio, lo que ha permitido que más de 150 mil extranjeros, principalmente de Venezuela y Colombia, hayan estructurado una red de bandas criminales en contacto con las ya existentes organizaciones ilícitas peruanas.