Huancavelica, una región conocida por sus tradiciones culturales y festividades religiosas, fue escenario de un evento desafortunado el pasado domingo 19 de mayo. La Fiesta de Toro Chutay, celebrada en el barrio Yananaco, dejó como saldo una persona fallecida y al menos nueve heridas. Este evento, que forma parte de la celebración en honor al Señor de Cruz, siempre despierta polémicos debates entre los ciudadanos debido a los riesgos que conlleva.
Durante la festividad, miles de personas se congregaron para participar en las tradicionales corridas de toros. Entre la multitud se observó a muchos adultos y niños corriendo de un lado a otro, intentando demostrar su coraje y bravura frente a los imponentes animales. A pesar de los intentos de las autoridades por asegurar el evento, la falta de precauciones se hizo evidente.
En este evento se contó con más de 20 toros de diferentes razas, incluyendo criollos, mejorados, media casta y de casta pura, participaron en las corridas. Estas actividades atrajeron a numerosos aficionados que esperaban ansiosos la salida de los toros al ruedo.
Es un hecho recurrente
Según información proporcionada por la Policía Nacional del Perú (PNP) y recogida por Correo, Marcelino Ccanto Arias, de 60 años, fue embestido por un toro y cayó a un abismo de aproximadamente 20 metros en el lugar conocido como Yuraccquerga. Esto ocurrió mientras los toros eran llevados a la festividad. Personal de la Comisaría y de la Unidad de Emergencia se movilizaron para recuperar el cuerpo de sexagenario.
Otros nueve participantes sufrieron heridas durante las corridas. Varias de estas personas, en estado de ebriedad, saltaron al coso, donde esperaban los toros. Entre los heridos, dos presentaron lesiones en el escroto, dos en las piernas, y uno se encontraba en estado grave debido a una herida abierta en el abdomen. Todos fueron trasladados al Hospital Departamental de Huancavelica.
El centro de salud, acostumbrado a recibir numerosos heridos durante la semana de la festividad, activó todos sus protocolos de emergencia. El año pasado, durante estas mismas fechas, atendieron a más de 100 personas con diversas lesiones, lo que muestra la recurrencia de incidentes graves en este tipo de celebraciones.
La Fiesta de Toro Chutay, a pesar de ser una tradición importante en la cultura de la provincia, siempre ha generado controversias. Los defensores de la festividad taurina argumentan que es una parte integral de la identidad cultural y religiosa de la comunidad. Sin embargo, los críticos señalan los peligros y los sufrimientos asociados con las corridas de toros, tanto para los animales como para las personas.
La historia de las corridas de toros en el Perú
A pesar de la creciente oposición a las corridas de toros, esta práctica sigue siendo una tradición en la cultura peruana. Su origen no proviene del antiguo Imperio Inca, sino de la colonización española. Los conquistadores trajeron consigo esta costumbre, que pronto se instaló en la sociedad peruana.
Durante el gobierno de los primeros virreyes, las corridas comenzaron a ganar popularidad, celebrándose en ocasiones especiales para conmemorar eventos importantes o simplemente para el entretenimiento de la población. Uno de los primeros registros de corridas de toros en Lima data de 1538, aunque algunos historiadores debaten la precisión de esta fecha.
Algunos sostienen que la primera corrida oficial se realizó el 29 de marzo de 1540, con motivo de la consagración de un nuevo obispo en Lima. Desde entonces, las corridas se convirtieron en una parte integral de la vida colonial en el Perú, atrayendo a personas de todas las clases sociales.
Con el tiempo, la actividad evolucionó desde humildes comienzos hasta convertirse en un evento sofisticado. A lo largo de los siglos, las corridas de toros son motivo de celebración y controversia, reflejando la complejidad de una tradición que sigue viva en la cultura peruana.