Se inauguró el primer Centro Biomédico Especializado en Medicina Deportiva donde Paolo Guerrero y Jefferson Farfán se recuperaron

La moderna infraestructura es la única en el Perú, cuenta con certificación olímpica y atenderá a miles de atletas. Tanto el ‘Depredador’ como la ‘Foquita’ han hecho uso anteriormente de sus instalaciones.

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IPD y Legado inauguraron el primer Centro Biomédico Especializado en Medicina Deportiva.

Perú continúa apostando en tecnología deportiva. Recientemente, tras un esfuerzo conjunto, el Proyecto Especial Legado y el Instituto Peruano del Deporte (IPD) inauguraron el primer Centro Biomédico Especializado en Medicina Deportiva en Perú, una instalación avanzada diseñada para atender a cerca de 12 mil atletas federados y para atletas anualmente. Este centro, único en su tipo en el país, promete incrementar la competitividad del deporte peruano a nivel internacional, dotando a los atletas de alto nivel de herramientas científicas y tecnológicas para su preparación y recuperación.

Situado en la Villa Deportiva Nacional del distrito de San Luis, este Centro Biomédico ocupa un edificio de cuatro pisos con 6900m2 de superficie, según se describe en una nota de prensa oficial del IPD.La infraestructura incluye equipos para la realización de ergoespirometrías, máquinas isocinéticas, una cámara de altura para simulación de condiciones montañosas y un gimnasio de rehabilitación completamente equipado.

Adicionalmente, se ofrecen servicios en nutrición, psicología y áreas destinadas para el control antidopaje. Este proyecto fue inspirado en el Biomédico del Centro de Alto Rendimiento de Colorado Springs, en Estados Unidos, gracias a un acuerdo con el gobierno británico.

El evento de inauguración contó con la participación de importantes figuras como Carlos Zegarra, director ejecutivo de Legado; Guido Flores, presidente del IPD; Renzo Manyari, presidente del Comité Olímpico Peruano; y Cenaida Uribe, destacada voleibolista olímpica y jefe de equipo de Alianza Lima, campeón de la Liga Nacional de vóley 2024. Durante el acto, se destacó el impacto que este centro tendrá en la mejora de los protocolos de recuperación y prevención de lesiones, así como en el enfoque científico aplicado al entrenamiento de los deportistas.

El Centro Biomédico Especializado en Medicina Deportiva en la Videna. Crédito: IPD
El Centro Biomédico Especializado en Medicina Deportiva en la Videna. Crédito: IPD

“Los deportistas podrán trabajar en estas nuevas condiciones. Eso no quiere decir que las de antes eran malas, pero estas son mejores. Aquí se trabajará la recuperación, la prevención de lesiones y el trabajo científico. De esta manera, el Biomédico complementará al deporte peruano”, resaltó el director ejecutivo de Legado, Carlos Zegarra. Con esta declaración, se subraya el compromiso de las principales instituciones deportivas en proporcionar a los atletas peruanos el acceso a recursos de vanguardia para su desarrollo integral.

Cabe mencionar que este centro no solo representa un significativo avance en términos de infraestructura y tecnología aplicada al deporte en Perú, sino que también se espera que marque un antes y después en la gestión y seguimiento de la salud y rendimiento de los deportistas peruanos.

Paolo Guerrero y Jefferson Farfán se recuperaron en el Biomédico

Los deportistas están expuestos a las lesiones a lo largo de su carrera y eso lo saben muy bien Paolo Guerrero y Jefferson Farfán -dos figuras históricas de la selección peruana de fútbol-, quienes atravesaron fuertes momentos, al estar alejados de las canchas por diversos males. Sin embargo, ambos tuvieron el Biomédico a su disposición, en una área específica.

Los dos futbolistas adoptaron la crioterapia como parte de su régimen de recuperación y tratamiento. Incluso, en su momento, el ‘Depredador’ difundió imágenes en las cuales se le observa sometiéndose a temperaturas de hasta -83 grados centígrados. Esta particular práctica tiene como finalidad estimular la producción de endorfinas, mejorar la tonificación muscular, aliviar dolor en las articulaciones y tratar afecciones como el reuma, entre otros beneficios.

Guerrero aplicó esta novedosa terapia cuando se encontraba recuperándose de una dura lesión en la rodilla, que lo marginó de la actividad futbolística desde octubre del 2021 hasta julio del 2022. Su intención fue acelerar el proceso para volver a jugar. Por su parte, Farfán hizo lo propio tras una fatiga muscular de años antes.

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