En la región de Puno, un hecho conmocionó a la comunidad local cuando un niño de cinco años murió debido a severas quemaduras en su cuerpo. Según reportes policiales, la figura detrás de este trágico evento sería la madrastra del menor, acusada de haberle vertido agua caliente, además de someterlo a constantes torturas durante un extenso periodo.
Erika Yenifer Condori Alarcón, de 27 años, fue detenida por el Área de Investigación Criminal de Puno, bajo la sospecha de cometer parricidio en detrimento del pequeño S.E.B.S.
El artículo 107 del Código Penal deja en claro que no es necesario que sea hijo biológico para calificarse como parricidio. “El que a sabiendas, mata a su ascendiente, descendiente, natural o adoptivo, o a quien es o ha sido su cónyuge, su conviviente, o con quien esté sosteniendo o haya sostenido una relación análoga, será reprimido con pena privativa de libertad no menor de quince años”, indica.
La alerta surgió tras una llamada al Hospital III del Seguro Social de Salud (EsSalud) de Puno, donde el personal médico reportó el ingreso de un niño en condiciones críticas, abandonado por una mujer. Los doctores detallaron las alarmantes condiciones físicas del menor: ausencia de seis dientes, uñas de los dedos, quemaduras extensas en las plantas de los pies, así como lesiones provocadas por instrumentos como correas, cables, alicates y artefactos calientes, añadiendo signos de posible maltrato físico continuo.
Las profundas heridas
El dramático ingreso del niño al hospital de Salcedo, en la noche del sábado 11 de mayo, indicó un rápido traslado al área de trauma debido a la severidad de sus heridas, que terminaron por causar su muerte después de unas horas.
La operación policial llevó a los agentes a una casa en el barrio Chejoña de Puno, donde Condori Alarcón fue localizada y detenida para las investigaciones pertinentes. Un análisis del domicilio reveló indicios de maltrato: una cama con colcha húmeda, sábanas y funda de almohada con manchas de sangre, además de ropa del menor con marcas de quemaduras.
En un intento por justificar sus acciones, la madrastra inicialmente alegó que había golpeado al niño porque se había orinado en la cama, pero luego cambió su versión tras recibir asesoramiento legal.
La gravedad del caso se acentúa al descubrir que la mujer tiene una requisitoria por receptación, solicitada por el 1.er juzgado penal unipersonal de Puno, lo que sugiere antecedentes de comportamiento delictivo previos.
Las autoridades harán las investigaciones necesarias
La recolección de evidencia, como una correa y otros objetos en la escena, apoyó las sospechas de abuso prolongado. La Policía Nacional del Perú, en colaboración con el fiscal de turno Neptali Mamani Masco, de la Primera Fiscalía Provincial Penal Corporativa, procedió con las diligencias necesarias, apuntando a la madrastra con cargos de parricidio por presuntamente infligir las heridas mortales y torturas al infante. El general PNP Pedro Ortiz Casaverde, máximo representante de la Décima macrorregión Policial de Puno, convocó a una rueda de prensa para presentar a la mujer señalada como responsable del fallecimiento de su hijastro.
Los restos del niño fueron sepultados en el cementerio de Cancharani, situado al sur de la ciudad de Puno. Antes de su inhumación, familiares, amigos y miembros de la Institución Educativa Inicial (IEI) del barrio Chejoña le brindaron un sentido tributo póstumo.
Una misa de despedida en el templo San Antonio se convirtió en un momento de profunda emotividad, donde la rabia y la tristeza por lo ocurrido estaban palpables. Luego, el ataúd del pequeño fue trasladado a su centro educativo, donde la directora, profesores y madres de sus compañeros expresaron su pesar y consternación ante este hecho abominable que ha sacudido a la comunidad.
Canales de ayuda
En caso conozcas un caso sobre maltrato infantil, no dudes en comunicarte con los canales de ayuda para proteger al niño, niña y adolescente en estado de vulnerabilidad.
- De esta manera, podrás presentar tu denuncia en una comisaría, en la Demuna y en la Unidad de Protección Especial (UPE) para que se inicie con las investigaciones correspondientes.
- Además, puedes comunicarte a la Línea 100 de manera gratuita para que brindes los datos de las personas involucradas.
- Es así como las autoridades verificarán en qué estado se encuentra el o la menor para que puedan intervenir la Fiscalía de la Nación y la PNP de inmediato.
Estos son los años de condena por parricidio
El delito de parricidio, que implica la muerte intencionada de un padre, madre, abuelo o abuela, hijo o hija, tiene consecuencias legales severas. Según lo establecido en la Ley 29819 del año 2011, que modificó el artículo 107 del código penal, se incluyó el concepto de feminicidio dentro de este marco legal.
Estipula que aquel que cometa el acto de manera consciente contra un ascendiente, descendiente, cónyuge, conviviente, o alguien con quien haya mantenido una relación similar, será penado con al menos quince años de privación de libertad. Sin embargo, si concurren circunstancias agravantes, como las enumeradas en el artículo 108, la pena mínima se eleva a 25 años.
Es importante destacar que si la víctima del crimen es o fue la cónyuge, conviviente, o ha mantenido una relación análoga con el autor del delito, este se clasificará como feminicidio. Esta inclusión refleja el reconocimiento de la violencia de género y busca proporcionar una respuesta legal adecuada a estos casos.