El panorama no es alentador para una madre soltera. Según el Instituto Nacional de Estadística e Informática (INEI), ellas representan el 11.3% del total de peruanos. Pero esas cifras no son siniestras al lado de las que vienen: 4 de cada 10 madres solteras no tienen ingresos; es decir, no cuentan con un trabajo remunerado debido a que se encargan de las labores del hogar.
¿Cómo sobreviven? ¿Dónde crían a estos niños? ¿Dónde se superan? ¿Y en quién confían a sus hijos para salir adelante? Esas y otras interrogantes que, al igual que yo, lo pensaron estas mujeres al saber de su embarazo, y de lo que les espera luego del parto.
Con la situación a cuestas y con la definición de familia monoparental, la búsqueda laboral o reinserción será una odisea si es que no se cambian los mitos sobre el contratar a una mujer con hijo(s). El 24.4% de las madres solteras no tienen instrucción educativa y el 12.2% no logró una educación superior, según el INEI. Ante este escenario, es probable que emprendan un negocio desde casa porque se ven obligadas a compartir sus labores de madre y emprendedora.
Si es que se tuvo un hijo luego de terminar estudios superiores, el panorama sigue siendo asimétrico, ahora convertida en madre soltera ganarás un 23% menos que las mujeres sin hijos. ¡Increíblemente escandaloso! ¿Esto es acaso un premio con multa por darte un puesto laboral?
La disparidad económica para estas madres solteras es degradante, inaceptable y hasta podría decirse deprimente. Pero las mujeres que son madre tienen una especie de fuerza natural muy romana. Los datos del INEI del 2023 indican que el 32% de los hogares peruanos son liderados por mujeres, un ligero aumento respecto al año anterior, con una alta proporción de ellas siendo madres solteras.
Las razones por las cuales una madre opta por ser soltera son vastas. Las variables siempre han sido infinitas y las soluciones son cortas en un país en el cual la maternidad libre es muy discutida. El padre ausente en sentido económico hace que un niño o niña y una mujer tengan menos posibilidad de una vida sensata y mínimamente buena. La desigualdad se marca al ser mujer y se agrava al ser madre, y es abrumador cuando se es madre soltera. No muchos saben que faltan 131 años para alcanzar la utópica palabra de igualdad de género, según el Foro Económico Mundial (WEF).
Por mayor igualdad laboral y salarial para las madres solteras, feliz día a aquellas que desechan ideales por la precariedad del sistema económico. La culpa no la tienen por llevar una maternidad (no) libre dependiendo de la situación. La culpa es de la sociedad juzgadora y que, sin saber tu historia, te pone como el cuco en la pirámide.