Entre 2021 y 2024, la minería de oro ha desforestado 30 mil 846 hectáreas en la Amazonía sur del Perú, equivalente a alrededor de 43 mil campos de fútbol, según una estimación de Ojo Público.
De acuerdo con un informe del Proyecto de Monitoreo de la Amazonía Andina (MAAP), que utiliza tecnologías de monitoreo por satélite para rastrear y documentar los cambios en la cobertura forestal, este daño ambiental se concentró mayoritariamente en el denominado Corredor Minero, zona establecida por el Gobierno donde se permite la minería artesanal y de pequeña escala, donde se ubica el 74% de la deforestación registrada.
El 26% de la pérdida de bosque restante se atribuye a actividades mineras ilegales fuera de este corredor, impactando áreas naturales protegidas y comunidades indígenas, con alto valor en términos de biodiversidad y cultura.
Estrategia del Gobierno para combatir actividad ilícita no funciona
El informe MAAP #208 destaca especialmente un aumento preocupante en la deforestación provocada por la minería ilegal de oro en la región de Madre de Dios, durante los últimos tres años.
En este periodo, se han visto afectadas al menos 10 comunidades indígenas, evidenciando los desafíos que enfrenta el Gobierno para erradicar la economía ilegal, a pesar de la implementación del Plan Restauración.
Dicha estrategia busca extender las medidas de combate contra esta práctica depredadora a áreas no contempladas antes, incluyendo lugares fuera de La Pampa, área notoriamente reconocida por su alta concentración de actividades mineras ilícitas.
Sin embargo, el estudio demuestra que comunidades como San José de Karene, Barranco Chico, Tres Islas, Puerto Luz, Boca Inambari, Kotsimba, San Jacinto, Shiringayoc, Arazaire y El Pilar han sido impactadas de manera severa, junto con las zonas de amortiguamiento de áreas protegidas como la Reserva Nacional de Tambopata, una de las más importantes del país.
Detectan más de US$ 800 millones vinculadas a la minería ilegal
A inicios del año, la Superintendencia de Banca y Seguros y AFP (SBS) reveló una preocupante cifra vinculada a la minería ilegal entre enero y noviembre de 2023: operaciones sospechosas por valor de aproximadamente 805 millones de dólares. Este ilícito, que ha afectado severamente al entorno ambiental, demuestra una alarmante capacidad de retorno a la actividad post-pandemia.
Por otro lado, la Unidad de Inteligencia Financiera (UIF), adscrita a la SBS, identificó, en el periodo de enero de 2020 a noviembre de 2023, un acumulado de 2 millones 392,5 dólares en operaciones sospechosas relacionadas con la explotación ilícita de minerales.
Bajo ese contexto, Madre de Dios, especialmente en el sector conocido como ‘La Pampa’, destaca como uno de los puntos críticos en la lucha contra la minería ilegal dentro del país. Pues, a pesar de las diversas medidas implementadas por el Estado, incluyendo múltiples decretos de emergencia, el impacto de la extracción ilegal de minerales y la consiguiente deforestación no ha mermado.
Además, el financiamiento destinado a la lucha contra la minería ilegal para el año en curso ha sido asignado en 79 millones de soles (alrededor de 21 millones de dólares), lo que representa una disminución significativa en comparación con años anteriores.
De acuerdo a especialistas en economías ilegales, este recorte presupuestario, considerado crítico para las operaciones de control, refleja la urgente necesidad de reevaluar las estrategias y compromisos para abordar este problema de manera efectiva.