Una madre ha sido sometida a siete meses de prisión preventiva tras ser acusada de intento de homicidio contra su hijo de dos meses, al que lanzó desde el tercer piso de su hogar en Villa María del Triunfo, según informaciones judiciales.
De acuerdo a la Agencia Andina, el Primer Juzgado de Investigación Preparatoria de Chorrillos, adscrito a la Corte Superior de Justicia de Lima Sur, fue el encargado de dictar la medida contra la implicada, quien admitió su acción alegando incapacidad económica para cuidar al menor y su constante llanto como motivaciones detrás de su acción.
El hecho tuvo lugar el jueves 2 de mayo, cuando la acusada, en un acto de desesperación, llevó al bebé al tercer piso de su vivienda y lo arrojó al exterior, cayendo en una zona de tierra ubicada fuera de la casa.
Tras el acto, el hermano de la acusada alertó a la familia, quienes trasladaron de inmediato al niño al hospital María Auxiliadora, donde fue diagnosticado con un severo traumatismo encéfalo craneano y colocado bajo cuidados intensivos.
Vulnerabilidad económica y emocional habrían influido en la madre
La declaración de la madre ante la Policía reveló su agobio ante la imposibilidad de proveer para el niño y su frustración por el constante llanto de este, justificando así su decisión de lanzarlo desde una notable altura.
Según el parte policial, “al consultarle a la imputada sobre los motivos de su accionar, esta señaló que lo tiró porque no aguantaba que su bebé llore mucho y que sus padres no contaban con dinero para solventar sus gastos; aceptando, asimismo, que fue la responsable de arrojar a su bebé de dos meses desde la ventana del tercer piso”.
Hasta el momento, el estado de salud del bebé se mantiene en pronóstico reservado mientras continúa recibiendo atención médica necesaria para su recuperación.
Redes de apoyo y recursos para padres
De acuerdo a los agentes policiales, este caso en particular resalta la necesidad de proveer redes de apoyo y recursos a padres en situaciones de vulnerabilidad económica y emocional, para prevenir este tipo de casos de violencia y asegurar el bienestar de las infancias.
En ese sentido, la institución recuerda a la población que el Ministerio de la Mujer y Poblaciones Vulnerables ofrece un mecanismo de denuncia a través de las Unidades de Protección Especial (UPE), destinado a prestar asistencia a menores en situaciones de desprotección o riesgo.
La ciudadanía puede reportar casos de abuso llamando gratuitamente a la línea 1810. También, este sistema se complementa con otros canales de reporte como comisarías, la Defensoría Municipal del Niño y del Adolescente (DEMUNA) y la Línea 100, además de las oficinas de la Dirección de Protección Especial ubicadas en el centro de Lima.
¿Cómo funcionan estos canales de ayuda?
Estos canales de ayuda buscan intervenir en situaciones críticas y proporcionar un seguimiento adecuado a los menores afectados, evaluando sus entornos familiares y asegurando su integridad en casos de violencia sexual, psicológica y física.
En esa línea, tras la recepción del reporte, las autoridades procederán a verificar la situación del menor involucrado, coordinando acciones con la Fiscalía de la Nación y la Policía Nacional del Perú si se confirma el estado de desprotección.
Posteriormente, se realizará una evaluación integral del niño o niña, involucrando análisis legales, psicológicos y sociales, buscando siempre el entorno más seguro para su desarrollo.