Los integrantes de la Policía Nacional del Perú (PNP) de la comisaría de Catacaos en Piura, en una conmovedora muestra de solidaridad y comprensión, adoptaron oficialmente a un perro callejero que deambulaba por las inmediaciones de su dependencia. Este can, que llegó hace dos semanas sin hogar ni familia, encontró en este lugar un refugio y un propósito.
La historia de este animalito rápidamente captó la atención y el corazón de los vecinos de la zona, quienes participaron activamente en el proceso para elegir su identificación. El nombre escogido fue Sultán que representa la valentía, lealtad y el compromiso, los cuales son valores que esta mascota muestra cada día, mientras acompaña a los guardias en su labor diaria.
No es un perro común, ya que tras su llegada a la estación de Policía de Catacaos, se otorgó un papel muy especial. Ahora, se ha convertido en una figura familiar para los habitantes del distrito, puesto que patrulla las calles con sus nuevos dueños.
El suboficial PNP Luis Velázquez, quien se encarga del cuidado y adiestramiento del nuevo miembro de la fuerza policial, se mostró feliz la llegada de este can que transmite alegría a todos los miembros de la comisaría.
“Este perrito llegó por el puesto policial, y decidimos adoptarlo. Le damos su agua, su comida, lo aseamos, y duerme en los alrededores del local. Está muy contento con nosotros”, señaló, según se lee en Agencia Andina.
Con una alegría que contagia, Sultán, el perrito, se muestra radiante en cada fotografía junto a los integrantes de la comisaría y captura los corazones de quienes observan estas imágenes. Además, es un can muy obediente y atento, pues de forma rápida se adaptó a las rutinas de los policías.
La importancia de la adopción de animales
La adopción de animales representa una medida fundamental para enfrentar el problema de sobrepoblación de mascotas sin hogar. A través de esta acción, se brinda un nuevo hogar a perros y gatos que, de otra forma, pasarían su vida en refugios o en las calles, expuestos a enfermedades, hambre y peligros.
Este gesto no solo mejora la calidad de vida de estos seres vivos, sino que también contribuye a la salud pública, ya que reduce la cantidad de mascotas vagando en espacios urbanos y minimiza el riesgo de transmisión de enfermedades zoonóticas a los seres humanos.
Aparte, elegir la adopción en lugar de la compra fomenta la responsabilidad social y combate el comercio en condiciones inadecuadas, donde el bienestar del animal a menudo se ve comprometido. Las entidades que promueven la adopción usualmente aseguran que los animales estén vacunados, desparasitados y, en muchos casos, esterilizados, medidas que promueven una tenencia responsable.
Otro aspecto importante es el impacto positivo en la salud emocional de las personas. Los animales de compañía ofrecen compañía, reducen el estrés y estimulan la actividad física, por lo que generan beneficios tangibles en la vida de sus adoptantes.
Cabe mencionar que la Municipalidad de La Molina lanzó ‘Paseo Entrepatas’, una campaña destinada a fomentar el voluntariado entre la comunidad y visitantes para el paseo de canes que, tras ser dejados por sus propietarios, encontraron refugio en las instalaciones municipales.
Esta iniciativa tiene como objetivo generar lazos de cariño entre voluntarios y animales, pues implementa las bases para que caninos como Chatín, Bambi, Pluto y otros catorce alojados en el refugio, tengan la posibilidad de ser acogidos por un hogar permanente.
Quienes deseen sumarse a ‘Paseo Entrepatas’ pueden comunicarse al número 981 202 653 para coordinar su participación. Estas acciones se desarrollan bajo la atenta guía del equipo de la clínica veterinaria municipal en La Molina.