El Aeropuerto Internacional Jorge Chávez, un hito en la infraestructura de Lima, Perú, está en proceso de transformación para dar paso a una nueva terminal de alta tecnología, programada para estar lista el miércoles 18 de diciembre de este 2024. Esta futura estructura, destacada por su capacidad de soportar sismos de más de 9 grados gracias a su avanzada tecnología antisísmica, promete ser la primera de su tipo en América del Sur. Con una extensión que rivaliza con el distrito de Miraflores, el nuevo aeropuerto tendrá la capacidad de atender a 40 millones de pasajeros, asegurando así un futuro prometedor en la conectividad aérea de la región.
Según declaraciones anteriores de voceros de Lima Airport Partners (LAP), organización a cargo del proyecto, el terminal actual del Aeropuerto Jorge Chávez dejará de recibir a miles de viajeros con la inauguración de la nueva infraestructura. “Todo será detallado en un documento que incluirá la visión para el actual Jorge Chávez”, señalaron en su momento.
Así, anteriormente se estaban explorando opciones para el uso del espacio clásico y al que los viajantes estaban acostumbrados a ingresar. Entre estas, estaban que este fuera destinado para carga, helicópteros o jets privados, aprovechando así las 900 hectáreas disponibles en un esfuerzo por expandir y diversificar los servicios aeroportuarios. Sin embargo, ahora se sabe que su finalidad no será ninguna de estas.
¿Qué pasará con el antiguo terminal?
El próximo 18 de diciembre será una fecha clave para la infraestructura aeroportuaria de Perú, ya que se tiene prevista la inauguración del nuevo Aeropuerto Jorge Chávez. Este acontecimiento no solo marcará el inicio de operaciones de un terminal completamente moderno, sino también el cese total de las actividades del actual aeropuerto, que dejará de enviar y recibir vuelos, según anunció Arturo Vera, Gerente de Estrategia Corporativa de Lima Airport Partners (LAP) a RPP.
El cierre del antiguo terminal no significa su desaparición, sino el inicio de una nueva etapa. “Observamos en la pista la oportunidad de desarrollar negocios complementarios como el mantenimiento de aeronaves y otras necesidades como carga,” manifestó Vera. La reconversión del espacio incluye planes ambiciosos como la transformación de áreas para el comercio y la implementación de servicios complementarios que beneficiarán a la economía local y mejorarán la infraestructura de la ciudad.
“Se consideran dos opciones principales para el antiguo aeropuerto: una zona comercial y un núcleo de negocios complementarios,” indicó Vera.
Según lo compartido por el representante de LAP, se contempla que la zona aledaña a la avenida Elmer Faucett se convierta en un área comercial de gran envergadura, lo cual estará estratégicamente vinculado con la estación de la Línea 2 del Metro. Este plan busca aprovechar el flujo de personas y la accesibilidad que ofrecerá el nuevo metro, potenciando el comercio y las actividades económicas en el área. Además, se tiene en vista transformar el actual hotel Costa del Sol en un espacio adicional para el comercio, ampliando así las opciones de servicios y compras para los visitantes y residentes de la zona.
Avance del nuevo Aeropuerto Jorge Chávez
La obra, que actualmente registra un avance de más del 80%, y se proyecta completar a fines de 2024, con diciembre marcado como el mes en que la infraestructura abriría sus puertas. Parte fundamental de la innovación que introduce esta nueva terminal es su sistema antisísmico, compuesto por 1.000 aisladores que garantizan su resistencia ante terremotos de considerable magnitud. Este aspecto no solo pone al Jorge Chávez en el mapa como precursor en términos de seguridad en América del Sur sino que también reafirma el compromiso con la salvaguarda de los viajeros y la infraestructura frente a los desafíos naturales de la región.
La planificación y construcción del nuevo terminal del Aeropuerto Internacional Jorge Chávez es un reflejo del creciente interés y la inversión en infraestructuras modernas y seguras que puedan soportar los desafíos climáticos y geológicos específicos de la región. A medida que Lima se prepara para decir adiós al antiguo terminal y dar la bienvenida a esta moderna instalación, el futuro del transporte aéreo en Sudamérica parece estar tomando un nuevo y emocionante curso, marcado por la innovación, la seguridad y la expansión.