La ciudad de Trujillo se encuentra, actualmente, en estado de emergencia decretado por el Poder Ejecutivo debido a la alarmante ola delictiva que azota las provincias del norte del país. Además, siguen enfrentando desafíos en su lucha contra la violencia y la inseguridad.
A pesar de las medidas implementadas, la tranquilidad de los vecinos trujillanos continúa siendo perturbada por la persistente amenaza de la extorsión. En esta ocasión, los blancos de los delincuentes han cambiado, dirigiendo su accionar hacia los centros educativos del distrito de El Porvenir, en Trujillo. En un lapso de apenas 15 días, más de 10 colegios fueron víctimas de coacción, marcando un preocupante aumento en comparación con periodos anteriores.
“Primero estaban extorsionando a empresarios, bodegas, y otros comercios, y ahora han extendido su accionar a los colegios particulares”, declaró el alcalde de Juan Carranza en una entrevista para Exitosa.
El modus operandi de estos criminales ha puesto en alerta a padres, docentes y autoridades locales. En un solo día se registraron dos extorsiones, generando un clima de inquietud y temor entre la comunidad educativa. Colegios como “Crecer en el Porvenir” y “Nova Escolta” se encuentran entre las instituciones afectadas, siendo blanco de amenazas y extorsiones que ponen en riesgo la integridad de alumnos y personal desde hace meses.
“La estrategia está funcionando”, asegura el burgomaestre
Gracias a los esfuerzos por parte de las autoridades locales, el índice de denuncias por robo y hurto experimentó una disminución en la ciudad. Anteriormente, se reportaban entre 10 y 12 casos diarios, mientras que en la actualidad apenas se registra uno o dos, lo que indica un cambio en la dinámica delictiva.
Durante los meses de enero a marzo, El Porvenir tuvo un promedio de ocho denuncias diarias por extorsión, según reporta el medio local Sol TV.
Medidas que se vienen tomando
En respuesta a esta situación, las autoridades locales implementaron diversas acciones con el fin de contener el avance de la delincuencia. Se han destinado recursos humanos y logísticos para patrullar las zonas más vulnerables y se trabaja en estrecha coordinación con el servicio de inteligencia para desarticular a las bandas responsables. Sin embargo, los delincuentes demuestran una capacidad de adaptación sorprendente, utilizando estrategias que involucran a menores y terceros para evadir la acción de la justicia.
El trabajo conjunto entre las autoridades locales y nacionales son fundamental en la lucha contra la delincuencia. Reuniones periódicas con representantes del Ministerio de Justicia, el Ministerio de Defensa, el Ministerio del Interior y altos mandos policiales han permitido coordinar esfuerzos y compartir información para abordar el problema de manera integral.
Mientras tanto el Gobierno
En el ámbito nacional, el Gobierno peruano extendió oficialmente el estado de emergencia en las provincias de Pataz y Trujillo por un período adicional de 60 días. Esta medida, anunciada a través del Diario Oficial El Peruano, confirma la continuidad de las acciones excepcionales destinadas a mantener el orden interno en estas localidades.
La prórroga del estado de emergencia otorga a la Policía Nacional del Perú, con el apoyo de las Fuerzas Armadas, la responsabilidad de garantizar la seguridad y el orden en las zonas afectadas. Se establecieron restricciones en la realización de eventos sociales y espectáculos durante determinadas horas, como parte de las medidas para restablecer el control en la región.
La intervención de las fuerzas del orden se llevará a cabo bajo estrictos protocolos y disposiciones legales, respetando en todo momento los derechos fundamentales de la población. La aplicación de normativas como el Decreto Legislativo que regula el uso de la fuerza por parte de la PNP y el Decreto Legislativo sobre las reglas de empleo y uso de la fuerza por las Fuerzas Armadas garantiza una actuación transparente y conforme a la ley.