Uno de los efectos más evidentes del cambio climático se puede notar en la pérdida de glaciares y nevados a nivel mundial. El Perú no es ajeno a esta realidad y un artículo de la Administración Nacional de Aeronáutica y el Espacio (NASA) advierte precisamente de la pérdida del casquete de hielo de Quelccaya, reconocido por especialistas como el glaciar tropical más grande del mundo.
A lo largo de los años, este glaciar, ubicado en los Andes del Perú, entre las regiones de Cusco y Puno, fue objeto de diferentes estudios, pues sus características -como un espesor de 200 metros- permitía entender el clima y los cambios ambientales en las regiones tropicales. De hecho, los científicos recurren a este glaciar para reconstruir condiciones climáticas pasadas.
Sin embargo, pese a su gran valor científico, una comparación entre fotografías satelitales tomadas entre septiembre del año 1988 y octubre del 2023 permite ver claramente un retroceso en la extensión del glaciar peruano.
Una publicación realizada por la NASA, titulada ‘El casquete de hielo de Quelccaya, antes y ahora’, estima que, mientras que en 1988 la extensión del glaciar era de unos 58 kilómetros cuadrados, en el año 2023 su área se llegó a reducir hasta alcanzar poco más de 40 kilómetros cuadrados.
El artículo, que está acompañado de imágenes adquiridas por instrumentos abordo del satélite ‘Landsat 5′, indica que “al igual que otros glaciares tropicales en todo el planeta, las temperaturas comparativamente frías que se encuentran a grandes altitudes no son suficientes para protegerlo de las garras del cambio climático”.
“Se observa la acumulación de lagos de agua de deshielo en la segunda imagen, particularmente a lo largo del lado occidental del casquete de hielo. Muchas de estas cuencas lacustres, talladas por el hielo en movimiento, han perdido contacto con el hielo que las formó”, indica la publicación.
Si bien la pérdida del glaciar ha provocado la formación de lagos en la zona, en los 35 años de diferencia entre ambas fotografías publicadas, el artículo de la NASA indica que “algunos de los lagos ya han ido apareciendo y desapareciendo durante el período de tiempo que abarcan estas imágenes, incluido uno que en noviembre de 2022 produjo una inundación por el desbordamiento violento de un lago glaciar”.
Aunque pasaron varios meses desde la inundación, las imágenes satelitales del año 2023 captadas por la NASA muestran que se creó una ‘cicatriz de inundación’ donde el agua de la inundación arrastró la vegetación presente en la zona afectada.
Según Lonnie Thompson, paleoclimatólogo estadounidense y profesor universitario en la Facultad de Ciencias de la Tierra de la Universidad Estatal de Ohio, indicó que “tanto las imágenes terrestres como las satelitales permiten documentar las tasas de retroceso de los glaciares, que ahora promedian unos 14 metros por año”.
“Los glaciares tropicales podrían representar nuestra única oportunidad de captar los cambios de la temperatura media global a lo largo del tiempo, así como la forma en que el clima y el medioambiente han cambiado en un área que representa el 50 por ciento de la superficie de nuestro planeta y donde vive más del 50 por ciento de nuestros 8.000 millones de habitantes”, sostuvo Thompson.
Desaparición definitiva del glaciar Quelccaya
En caso de mantener el ritmo de retroceso actual y de tener las condiciones climáticas actuales por más tiempo, el glaciar Quelccaya podría desaparecer definitivamente a finales del siglo XXI. Según la NASA, ese sería el plazo previsto para su extinción.
“La única prueba de su existencia serán las imágenes terrestres y satelitales de lo que alguna vez fue un magnífico casquete de hielo ubicado directamente sobre la cuenca del Amazonas”, indica la institución estadounidense.