Han pasado 486 años desde que Francisco Pizarro firmó el Protocolo Ambulante de los Conquistadores, también conocido como ‘libro becerro’, considerado como el documento más antiguo del Perú y de Sudamérica. Por tanto, con motivo de la celebración del Día Internacional del Libro, examinamos tal invaluable registro de la historia de nuestro país.
Constituido por 804 escrituras en 551 folios y fechado desde el año 1533 al 1538, fue hallado a finales del siglo XIX en una notaría de Lima. Su apodo se debe al característico empaste de cuero que recubre sus casi mil páginas.
De acuerdo con el Archivo General de la Nación (AGN), el documento fue redactado por los primeros escribanos del país, quienes detallaron los pormenores de la conquista del imperio incaico y los primeros años de dominación española.
El ‘libro becerro’ ingresó al registro Memoria del Mundo de la Unesco en el 2013. En tanto, fue reconocido como Patrimonio Cultural de la Nación en el 2017 y presentado en la Feria Internacional del Libro (FIL) de Lima en el 2023.
Firmado a ciegas
Uno de los datos más curiosos sobre el Protocolo Ambulante de los Conquistadores es que fue firmado por Francisco Pizarro sin que este conozca su contenido.
Los historiadores dedujeron eso por una sencilla razón: Pizarro, conquistador del imperio inca y fundador de Lima, era analfabeto. Apenas había aprendido a hacer una rúbrica junto a su nombre.
“Seguramente confiaba en las personas que eran parte de su equipo. Para nosotros, firmar un documento sin leerlo es un pecado mortal”, explicó a la agencia EFE Ricardo Arturo Moreau Heredia, jefe institucional del AGN.
Asimismo, quedaron estampadas otras firmas, como las de los hermanos Gonzalo y Hernando Pizarro, Nicolás de Ribera (primer alcalde de Lima), Gaspar de Espinosa (exgobernador de Santo Domingo) o Cristóbal de Burgos (conquistador y encomendero), entre otros.
‘Traducido’ al castellano moderno
Uno de los principales desafíos para entender las líneas de esta reliquia es que está escrito en el castellano del siglo XVI, el mismo en el que fue escrito El Quijote.
Es por ello que en 2018, el AGN publicó una nueva versión del ‘libro becerro’ en el castellano actual.
“Acá tenemos especialistas que han hecho un arduo trabajo y hemos podido traducir y actualizar algunos términos para que esta publicación que brindamos se pueda entender”, explicó el archivero.
Luego, en 2022, en colaboración con el Colegio de Notarios de Lima, el AGN imprimió 600 ejemplares de dicho documento con la finalidad de difundirlo a la ciudadanía en general.
Contratos de la conquista y el rescate de Atahualpa
En estas páginas se pueden encontrar el inventario de los equipos comprados para el combate y la exploración concernientes a la conquista. En ese sentido, se destaca el uso de caballos y mulas de carga, así como los pagos a soldados y préstamos de dinero.
“Hay contratos de compraventa de caballos, de esclavos, hay inventarios de con qué se trasladan los soldados, como por ejemplo los ajuares de ropa (...) y también promesas de pago que se hacían para fijar prestamos”, explicó Moreau.
Una de esas promesas de pago es la que propusieron los altos cargos del Tahuantinsuyo para pagar el rescate del inca Atahualpa —Atabalipa, en el texto—, capturado el 16 de noviembre de 1532 tras la incursión de Pizarro y sus hombres en Cajamarca.
Asimismo, se destaca la participación de miles de indígenas de diversos pueblos que se aliaron a los españoles para derrotar a los incas y así liberarse de su yugo.
Leyes españolas
Además de la religión y la cultura, el elemento de impacto social más relevante introducido por los españoles fueron sus leyes. Este proceso también fue relatado en el ‘libro becerro’.
Los que redactaban las leyes españolas que se aplicarían en la colonia fueron precisamente los escribanos, el equivalente del siglo XVI a los notarios públicos.
“Vamos a ver cómo la religión, la cultura, los soldados y las leyes van a ser el primer choque cultural con este [nuevo] imperio que se ha establecido”, señaló Moreau.
Sin duda, se trata de un documento que nos acerca un poco más a la comprensión de un proceso histórico clave que precedió al Virreinato y la actual República del Perú.