La polémica envuelve al Complejo Arqueológico Monumental Kuélap, uno de los destinos más visitados durante la Semana Santa. Esta vez, la controversia se desata por la colocación de vallas metálicas con bases de concreto a lo largo del sitio arqueológico, una medida implementada por el Ministerio de Cultura que viene desatando críticas y preocupaciones.
Hace dos años, en 2022, Kuélap sufrió el colapso de una parte de su muralla perimétrica, resultado de su delicada situación, agravada por la humedad que penetra sus muros. Estudios en el lugar revelan la pérdida de los sistemas de drenaje natural, lo que provoca la acumulación de agua en los restos arqueológicos.
Este problema viene desde el 2019, y en su momento la Dirección Desconcentrada de Amazonas emitió más de 30 informes alertando sobre los riesgos asociados a las lluvias y movimientos telúricos en el monumento, que hasta ahora no son atendidos correctamente. Entre 2016 y 2020, existió un Plan de Conservación, conocido como ‘Plan COPESCO’, impulsado por el Ministerio de Comercio Exterior y Turismo, centrado solo en mejoras en la estructura y cobertura del Acceso 1 y en el sistema de drenaje, como indica la Agencia Andina. Sin embargo, tras su traspaso al Ministerio de Cultura (Mincul) en 2020, el proyecto no se ejecutó por limitaciones presupuestarias y problemas administrativos.
Han pasado más de cuatro años
Ante esta situación, el Mincul optó por realizar intervenciones arqueológicas puntuales, conforme al reglamento que busca la preservación y difusión del conocimiento científico de sociedades pasadas, sin involucrar una conversación integral de Kuélap.
Según el propio reglamento de Intervenciones Arqueológicas, se definen como “intervenciones puntuales y de corta duración en uno o más bienes inmuebles prehispánicos, o en una región específica. Su principal objetivo es la producción y difusión del conocimiento científico sobre las sociedades del pasado, a través de la investigación. Asimismo, se orienta hacia la observación, el acondicionamiento, la puesta en valor y la gestión de los bienes inmuebles prehispánicos”. Es importante destacar que no se trata de una investigación que abarque la conservación de Kuélap.
La obstrucción de la maravillosa Kuélap
La colocación de las vallas metálicas genera rechazo por parte de diversos sectores. Ante ello, Rocío Sánchez, directora de la Dirección Desconcentrada de Cultura Amazonas, respondió a La Encerrona, y justificó la medida como una sugerencia de entidades gubernamentales locales y nacionales, en un intento por equilibrar el turismo y la preservación del patrimonio. Según la autoridad, estas estructuras temporales serán retiradas progresivamente, una vez se estabilice y consolide la muralla perimétrica del monumento.
“La instalación en curso en el exterior de Kuélap se basa en las recomendaciones emitidas por las oficinas de gestión de riesgos del Gobierno Regional de Amazonas, la Municipalidad Provincial de Luya y el Instituto Nacional de Defensa Civil (Indeci), en el contexto de la reapertura del monumento arqueológico con el objetivo de equilibrar el turismo y la preservación del patrimonio. A pesar de que se ha empleado metal para la estructura y bases de concreto colocadas en el suelo, estas acciones no transgreden ninguna normativa del monumento. Más bien, representan la instalación de una barrera de protección temporal y reversible destinada a salvaguardar la seguridad de los visitantes”, se señala en la respuesta proporcionada por Sánchez.
El rechazo contra las construcciones hechas en el sitio arqueológico
Sin embargo, los comuneros, a través de Frente de Defensa del Anexo Kuélap, expresan su desacuerdo con la construcción de las vallas, argumentando que afectan la estética ecológica y cultural del sitio, sin consulta previa a la comunidad. Demandan la paralización de las obras y la adopción de alternativas más acordes con el contexto cultural y ecológico de Kuélap. Expertos legales respaldan estas preocupaciones, señalando que las construcciones violan la carta de Conservación de Venecia, que prohíbe el uso de metal y concreto en sitios del patrimonio cultural.
“Exigimos a los entes correspondientes que paralicen estas obras, ya que no podemos permitir dicho atropello con nuestra cultura; y que se elimine esas vallas de fierro y cemento que atentan contra nuestro patrimonio cultural, permitiendo otras alternativas más acordes al contexto cultural y ecológico que rodea a nuestro Kuelap”, se lee en el documento firmado por Compojo Hernandez.
El documento concluye con un llamado a la población de la ciudad, la Provincia de Luya y todo el departamento de Amazonas, instándolos a unirse al reclamo. Además, advierte que se tomarán medidas legales de ser necesario.