La ciudad de Chiclayo, capital del departamento Lambayeque, en el norte de Perú, celebra hoy su 189 aniversario de creación provincial, una oportunidad perfecta para rememorar su rica historia que la ha hecho testigo y protagonista de muchos episodios en la memoria del país.
Hoy en día destaca por sus atractivos, como la gran variedad de restos arqueológicos que allí se pueden encontrar, catedrales y lugares con una arquitectura histórica, muchos negocios de artesanías y una gastronomía que deja satisfecho al paladar más exigente.
Esto ha consolidado a la ciudad como un lugar imperdible cuando de turismo se trata, pero también como un espacio donde las personas pueden vivir tranquilamente y disfrutar de lo mejor del norte del Perú.
¿Por qué se le conoce como la ‘capital de la amistad’?
Al hablar de Chiclayo es imposible no preguntarse por qué se le ha dado ese título tan particular. La respuesta es bastante sencilla, ya que esto se debe al carácter de la gente que habita en la zona, quienes son hospitalarios y gentiles con los visitantes, haciendo de la ciudad un lugar que vale la pena visitar y donde te encontrarás como en casa.
Origen de su nombre
Según menciona el medio Andina, el nombre de la ciudad es un topónimo de la gramática mochica, que fue preparada por un párroco de nombre Fernando de la Carrera Daza a mediados del siglo XVII. Este fue escrito en la ortografía desarrollada por dicho autor como Chiclayaep.
Sin embargo, hay otra teoría que menciona que el nombre se debe a un indígena mochica llamado ‘Chiclayop’ o ‘Chiclayep’, quien se dedicaba a transportar yeso entre las ciudades de Zaña, Lambayeque y Mórrope.
Historia y fundación
Durante el tiempo de la colonia, Chiclayo fue una reducción de indígenas conformada por los villorrios de Cinto, Collique y San Miguel de Farcap. Asimismo, fue un lugar donde muchos comerciantes, desde españoles hasta indígenas, se detenían a descansar para luego seguir su viaje.
Según Andina Noticias, Ricardo Miranda y Carlos Bachmann mencionan que Chiclayo fue fundada por el cacique Juan Chiclayo, en tanto, Luis Arroyo precisa que su existencia responde a la fundación del convento e Iglesia Franciscana Santa María de los Valles de Chiclayo.
Lo cierto es que la ciudad logró su independencia hacia el 31 de diciembre de 1820. Unos años después, en 1827, fue elevada a la categoría de Villa y luego a ciudad en 1835.
Sin embargo, fue un 18 de abril de 1835 cuando este espacio fue declarado como una provincia, decisión que estuvo a cargo del presidente Felipe Salaverry. Este hecho no solo reconfiguró el mapa administrativo del país, sino que también reconoció la importancia de Chiclayo y favoreció su desarrollo y crecimiento.
Conforme menciona Perú Travel, la decisión de proclamar a Chiclayo como provincia fue motivada por una promesa de Salaverry a José Leonardo Ortiz, un destacado comerciante local y prócer de la independencia, quien además fue gran amigo del otrora presidente.
Atractivos turísticos
Por supuesto, la ‘capital de la amistad’ no se queda atrás cuando de turismo se trata, ya que cuenta con espacios maravillosos que hoy en día son muy visitados por propios y extraños.
Huaca Rajada
Este complejo arqueológico, conocido también como Sipán, data del año 250 y fue habitado en su momento por los Mochica y la cultura Lambayeque. Es famoso gracias al descubrimiento de la tumba del Señor de Sipán, además, es un ejemplo perfecto del complejo sistema funerario que tenían los moches y su particular cosmovisión.
Paseo Yortuque
Fue construido en 2015 y tiene 1.6 kilómetros de extensión. Destaca por las más de 60 esculturas que representan a personajes míticos de las culturas Lambayeque y Moche como Naylamp, Rinchin, el Strombus, entre otros. En cada una de ellas se puede encontrar un letrero que explica la leyenda de las figuras y a cuál hace referencia.
Asimismo, los visitantes podrán disfrutar de los jardines que conforman un paseo ecológico y cuentan con 2000 ejemplares de flora de la región.
Hermosas playas
Chiclayo se encuentra en la costa del Perú, por lo que una visita a la playa es obligatoria para todo aquel que pase por allí. Algunos balnearios imperdibles son Pimentel, que cuenta con un antiguo muelle, olas perfectas para los tablistas y un clima preciso para deportes acuáticos. En las costas también se puede apreciar a los caballitos de totora que cuentan su propia historia de la zona.
Otras playas importantes son Etén, caleta Santa Rosa, San José, playa Hondo, Monsefú, Media Luna, etc.