Cecilia Túpac Amaru: la desconocida pieza clave en la rebelión de Túpac Amaru que fue nombrada precursora de la independencia

Su historia estuvo por muchos años en las sombras y todavía queda un largo camino para darle el reconocimiento que merece

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Cecilia Túpac Amaru: una luchadora
Cecilia Túpac Amaru: una luchadora por la independencia olvidada en la historia. (Prensa Regional / guidoancori.blogspot.com / Británico)

La llegada de los españoles al Perú representó para los indígenas de la época un proceso de cambios importantes en su forma de vivir, costumbres, tradiciones y todo aquello que los relacionaba con el imperio inca o sus culturas de origen.

El virreinato fue para ellos un constante recordatorio de su fracaso, pero también un régimen que impuso maltratos y vejámenes en contra de quienes alguna vez fueron herederos de las tierras conquistadas.

Esta realidad dio como resultado que más de un patriota se levantara en contra de los extranjeros. Así, han llegado a nuestros días historias de lucha como la rebelión de Túpac Amaru, uno de los mártires más conocidos y que luchó por la libertad y la justicia social.

Sin embargo, es bien sabido que no actuó solo y hoy en día se ha reivindicado la memoria de varios de sus acompañantes, como es el caso de la pocas veces mencionada Cecilia Túpac Amaru, quien ya ha sido reconocida como una precursora de la independencia, y con justa razón.

Una vida de lucha

Creciendo en el corazón de
Creciendo en el corazón de la resistencia indígena, su papel como administradora y estratega demuestra una faceta menos conocida de la lucha por la independencia peruana. (Cecilia Túpac Amaru / Óleo sobre tela Bruno Portuguez, 2021 / Libro Mujeres del Bicentenario)

Según la información disponible en la actualidad, Cecilia habría nacido en Sicuani, Cusco, hacia el año 1742, pero bajo el nombre original de Cecilia Escalera. Posteriormente fue trasladada hacia Surimana, donde fue adoptada por Marco Túpac Amaru y Marcela Castro. De ese modo pasó a convertirse en prima hermana de Túpac Amaru y hermana de Diego Cristóbal Túpac Amaru, segundo jefe máximo de la rebelión, conforme señala el texto Mujeres del Bicentenario, peruanas que forjaron la historia del Perú.

Se casó bastante joven con Pedro Mendiguri, quien también participó en la gran rebelión.

La principal labor de Cecilia fue encargarse de la logística codo a codo con Micaela Bastidas. A la par era una suerte de administradora dentro de las filas rebeldes gracias a la gran habilidad que tenía para diligenciar a grupos de personas y designar tareas públicas. Ella también organizaba el fondo económico que era el sustento de la campaña revolucionaria que se llevaba a cabo en esa época.

Por otro lado, algo que no pasa desapercibido en la historia de Cecilia es su personalidad, la cual es descrita como entusiasta y valiente, características que inspiraban firmeza y ánimo entre las huestes indígenas.

Lo cierto es que jugó un rol importante en medio de un contexto complicado. Pese a ello, ha permanecido en las sombras y sin menciones en los libros de historia por un largo tiempo.

Su muerte

Muchos patriotas sufrieron las consecuencias de su ferviente deseo de justicia y libertad. El mismo Túpac Amaru fue ajusticiado de una una cruel forma, al igual que su esposa, Micaela; por ello es evidente que Cecilia no correría una mejor suerte que sus compañeros de armas.

Túpac Amaru II.
Túpac Amaru II.

Una vez que los realistas lograron recuperar el control y sofocar la rebelión, la valiente heroína fue sometida a 200 azotes públicos. Se dice que incluso se le llegó a exhibir desnuda, una humillación que era bastante común en tiempos de antaño.

Asimismo, fue desterrada por un plazo de diez años hacia México, lejos de la tierra que la vio nacer. Pese a esto, la mujer no pisaría suelo mexicano, ya que según el texto Perfiles Femeninos de la Rebelión de Túpac Amaru, de Claudia Luna, que cita al autor Juan José Vega, Cecilia “murió víctima del suplicio y del frío en la cárcel del Cuzco”.

Su fallecimiento se dio un día como hoy, 18 de abril. Este hecho está registrado en el Archivo General de Indias de Sevilla, donde fue certificado por Don Buenaventura Loayza, el cual aseguró allí que la precursora de la independencia estuvo presa en el cuartel de la Compañía de Jesús, en Cusco, y falleció de accidente natural.

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