Mientras la presidenta Dina Boluarte ha decidido optar por el silencio, tanto ante la ciudadanía como ante la Fiscalía de la Nación evadiendo las citaciones a declarar y la exposición de sus Rolex, las indagaciones del fiscal interino Juan Carlos Villena Campana han seguido su curso con el resto de las personas implicadas en el caso. Así, en el desarrollo de las pesquisas, el despacho adscrito a Villena ha procedido con el interrogatorio a un personaje importante en el escándalo: Héctor Banchero, dueño de la Casa Banchero y único distribuidor de los relojes de lujo Rolex en el Perú; y sus revelaciones han sido sorprendentes.
En el marco de lo declarado ante la fiscalía, Banchero no solo se ha desmarcado de toda injerencia en un hecho delictivo, sino que también contravino lo único declarado por la presidenta Dina Boluarte ante la ciudadanía respecto a la procedencia y la forma en la que adquirió el suntuoso accesorio; el mismo que lucía con tanta facilidad en actividades oficiales y que ahora busca ocultar de las indagaciones.
Como se sabe, apenas se reveló el hecho de que la mandataria contaba con un Rolex, la presidenta explicó que la procedencia de este correspondía a una adquisición que se había hecho con los ahorros producto de su trabajo “desde los 18 años” y que se trataba de una joya “de antaño”. De ser este el caso, la lógica llevaba a pensar que esta adquisición se habría dado por las vías regulares, que implican un contacto con la Casa Banquero, de tratarse de una compra.
Banchero niega que Dina Boluarte haya comprado Rolex en su empresa
Nada más alejado de la verdad, pues las declaraciones de Héctor Banchero ante la Fiscalía de la Nación han revelado un hecho totalmente opuesto del ofrecido por Boluarte. Según el interrogatorio realizado al empresario por el Ministerio Público y al que Willax señala haber tenido acceso, la presidenta Dina Boluarte nunca había sido clienta.
“No, la señora Dina Boluarte Zegarra no ha comprado nada y nunca ha sido cliente y no tiene registro de mi base de datos”, se lee en el documento publicado el pasado miércoles en dicho canal, en el que se detallan dos preguntas específicas en las que se les consulta a Banchero si conocía sobre las intenciones de la presidenta en adquirir relojes como estos.
De esta manera, Banchero no solo deja de lado la posibilidad de que la presidenta haya comprado un reloj de tal magnitud con sus ahorros y por la vía legal. En cambio, abre la opción de que este Rolex haya sido o una reliquia familiar, o un regalo, y que no haya regularizado los papeles de posesión. O, en su defecto, una réplica exacta, o un reloj de segunda, para cuyo caso, el costo habría sido mucho mayor al momento de la compra. Un costo, que no se condice con los ingresos de la mandataria.
El rastro de Wilfredo Oscorima y el Rolex exactamente igual al de Dina Boluarte
Los hechos incluso llevan a revisar la lista y el rastreo de quiénes serían las personas que sí adquirieron un reloj de este tipo. Entre ellos se encuentra el Gobernador de Ayacucho, Wilfredo Oscorima, quien incluso ha mostrado tener un reloj exactamente igual al de la presidenta en su poder. Sea como fuere, la información no tardaría en llegar a manos de la fiscalía, ante la que el mismo Banchero ha precisado que su empresa “está obliga a reportar a la UIF”. “Por lo tanto, estamos obligados a tener una base de datos completa”, señaló.
Cabe destacar que en estas diligencias preliminares, el fiscal supremo Hernán Mendoza ha precisado que sí se ha concebido la presencia de Wilfredo Oscorima ante el Ministerio Público, aunque no en calidad de investigado, sino como un testigo. Curiosamente, uno que compartiría los mismos gustos de la presidenta.