Semana Santa: Estas son las siete tradiciones peruanas en este periodo de reflexión

Durante el periodo de Semana Santa los creyentes de diferentes partes del Perú participan de diferentes actividades en conmemoración a esta conmemoración religiosa. Si bien la asistencia a misa es una costumbre ampliamente difundida como parte de la forma en la que los peruanos viven estos días importantes para la comunidad católica, también existen otras más locales.

Lima y el resto de ciudades al interior del país también presentan actividades únicas que se diferencian tanto en sus expresiones religiosas, como procesiones o peregrinajes, como en su cultura gastronómica. Estas son algunas de las formas que tienen los peruanos de participar de la Semana Santa 2024:

En Cusco una de las costumbres gastronómicas tiene que ver con los tradicionales ‘doce platos’. Las familias de toda la región realizan un ayuno hasta el mediodía del Jueves Santo —o Viernes Santo— y una vez pasado este periodo comen un banquete que consiste en 12 potajes típicos de la región. Esto se realiza en conmemoración a la última cena de Jesús con sus apóstoles.

Los platos que están incluidos como parte de esta tradición no son específicos, por lo que cada familia puede preparar el menú que más les apetezca para el día. La comida a preparar corresponde a entradas (particularmente sopas), segundos, guisos y postres. El único requisito es que se respeten los insumos típicos de la región. También suelen ser seis platos salados, seguidos por seis platos dulces.

El Cerro San Cristobal, ubicado en el distrito del Rímac, también es un destino tradicional que los fieles visitan durante la Semana Santa. El atractivo particular de esta tradición no es solo la gran cruz, que se alza en la cima y que se ilumina cada noche —esta se puede ver a lo lejos desde cualquier punto de la Costa Verde—, sino que además es acompañada de otras 14 cruces en el camino hacia su punto más alto.

Estos puntos son representativos de cada una de las estaciones del Via Crucis, por lo que cada año, durante una peregrinación organizada por vecinos y ciudadanos en general, estas son respetadas. Los motivos para realizar el trayecto son diversos, desde una promesa hasta la búsqueda de la redención de los pecados.

Aunque esta tradición es común en varias regiones del Perú, en Lima la dramatización del Vía Crucis es realizada cada año por el mismo actor: el llamado ‘Cristo Cholo’, cuyo verdadero nombre es Mario Valencia, quien da la vida a Jesús desde el año 1989, el mismo en el que empezaron las peregrinaciones a la cima del Cerro San Cristobal.

Para este año, Valencia obtuvo el permiso de la Municipalidad Metropolitana de Lima, que apoyará al actor. “Esperamos recuperar la cumbre del Cerro San Cristóbal en nombre de nuestro Padre celestial, para que, de alguna manera, los miles de fieles que nos acompañan lleguen a la cumbre y agradecerle lo mucho que nos están brindando”, agregó el ‘Cristo Cholo’.

Aunque el recorrido por siete iglesias es una tradición que se puede realizar en cualquier ciudad del Perú, la costumbre es visitar la ciudad de Ayacucho, cuya celebración de la Semana Santa es considerada como la festividad religiosa y cultural más importante del Perú y América y la segunda más importante del mundo, después de la de Sevilla (España), según indica la Agencia Andina.

El punto central de esta tradición es en la Basílica de la Catedral de Ayacucho, en donde actualmente está en construcción el anda del Señor de la Resurrección, que tendrá un peso de 15 toneladas y será levantada por 400 personas en la procesión del Señor de la Resurrección, último acto de la Semana Santa en Ayacucho, este domingo.

El consumo de carne roja durante el Viernes Santo está cargado de un simbolismo que se manifiesta con ideas como “Estás comiendo la carne de Jesús”, “No estamos en una fiesta”, entre otras ideas pronunciadas por algunos los cristianos. Si bien no es una costumbre netamente peruana, sí es practicada por muchos peruanos.

Comer pescado en el Viernes Santo también significa tener fe. Por ejemplo, Jesús multiplicó cinco panes y dos peces para alimentar a una multitud que se encontraba en un lugar desolado cerca del mar de Galilea; este hecho se puede leer en Marcos 6:41-43. Adicionalmente a ello, la pesca milagrosa, realizada por Jesús en la misma locación, constituye otro evento que retrata el significado de esta costumbre.

Las hojas de palma son esenciales durante esta celebración de fe. Su uso se da el Domingo de Ramos, puesto que conmemora la entrada de Jesús, el hijo prometido a Jerusalén.

Durante este proceso, los feligreses sostienen las palmas, agitándolas como muestra de regocijo y bienvenida al hijo de Dios. Estas plantas son bendecidas, para luego ser llevadas al hogar y mantener el fervor.

Durante la Semana Santa en Cusco, otra de las tradiciones consiste en realizar recorridos con la imagen del Señor de los Temblores. Esta ocurre los días Lunes Santo, cuando la imagen que representa a un Cristo moreno recorre el perímetro de la plaza mayor y luego se dirige a diferentes templos de la ciudad cusqueña.