Para nadie es un secreto que para la mayoría de los peruanos, la Semana Santa es uno de los eventos más importantes del año. Y es que durante las celebraciones en todos los rincones del país, la población saca a relucir lo mejor de sí, destacando la fusión de tradiciones católicas y andinas.
Precisamente estas expresiones religiosas, arraigadas en la población, fortalecen la identidad local y con el paso del tiempo han ganado en importancia y algunas se han convertido en Patrimonio Cultural de la Nación.
Y es que la diversidad de rituales y costumbres en cada localidad enriquece esta festividad, reflejando la riqueza cultural del Perú. Estas son las celebraciones que han sido catalogadas como tal.
Ayacucho
La Semana Santa de Ayacucho, declarada Patrimonio Cultural de la Nación el 17 de octubre del 2022, es una celebración arraigada que reúne fe e identidad cultural.
Comienza con el Domingo de Ramos y destaca por sus procesiones, culminando en el Trono Watay, una estructura monumental que lleva la imagen de Cristo resucitado. Los ornamentos de cera, una tradición colonial, adornan el andar procesional.
En el Domingo de Resurrección, una emotiva procesión marca el anuncio de la Resurrección de Cristo. Sin embargo, la normativa excluye ciertas prácticas para preservar su integridad como patrimonio cultural.
Pampacolca
La Semana Santa de Pampacolca, declarada Patrimonio Cultural de la Nación en julio de 2021, destaca por su original sincretismo y complejo sistema ritual.
La festividad, que va desde el Domingo de Ramos hasta el Domingo de Pascua, involucra la participación de autoridades tradicionales, la división del espacio en cuarteles y la construcción de monte altares.
Las actividades incluyen la bendición de palmas, la elaboración de chicha y amargo, y la procesión del Señor del Santo Sepulcro. Se llevan a cabo actos litúrgicos, rituales de sahumado y visitas entre comunidades, concluyendo con la entrega de cargos y el retorno a sus comunidades.
Chancay
La Semana Santa de Chancay, declarada Patrimonio Cultural de la Nación en 2018, es una festividad arraigada en la memoria histórica de la comunidad.
Inicia con la procesión de la Virgen de los Dolores el Viernes de Dolores, seguida de la celebración del Domingo de Ramos con la procesión del Señor del Triunfo. Durante la semana, se realizan diversas ceremonias en honor al Señor de la Agonía, Jesús Nazareno y otros pasos, destacando el realismo de las representaciones.
El Viernes Santo se conmemora la muerte de Jesús, seguido por la Vigilia Pascual y la celebración del Domingo de Resurrección con procesiones festivas y quema de castillos.
Catacaos
La Semana Santa de Catacaos, declarada Patrimonio Cultural de la Nación el 12 de febrero del 2018, combina fervor religioso, historia y herencia étnica.
Inicia con la procesión de la Virgen Dolorosa el Viernes de Dolores, seguida por el Vía Crucis y la obtención de palmeras para el Domingo de Ramos. Este día se celebra con liturgias matutinas y vespertinas, seguidas por la procesión del Señor de Ramos.
El Jueves y Viernes Santo se dedican al Santísimo Sacramento y al Santo Cristo, respectivamente. El Sábado de Gloria se vive con recogimiento, culminando con la Vigilia Pascual. El Domingo de Resurrección concluye con la procesión de Cristo Resucitado.
Bolívar (La Libertad)
La Semana Santa de Bolívar, Patrimonio Cultural de la Nación desde el 2 de 2012, destaca por la recolección de hojas de palma por los Palmeros, evocando a los 12 apóstoles. Estos peregrinan hacia la selva alta en un viaje de penitencia.
El Domingo de Ramos, las palmas son bendecidas en el cementerio y usadas en las procesiones. Cada día de la semana tiene una procesión dedicada a una imagen sagrada, culminando con la del Viernes Santo, el Santo Descenso.
El Sábado de Gloria se lleva el cuerpo de Cristo en procesión, seguido de la misa de Resurrección. El Domingo de Resurrección finaliza la celebración.
Huambo (Arequipa)
La Semana Santa de Huambo, declarada Patrimonio Cultural de la Nación el 6 de diciembre en 2012, destaca por sus procesiones de imágenes religiosas que rememoran la pasión, muerte y resurrección de Cristo, acompañadas de la Virgen Dolorosa y San Juan Bautista.
Las procesiones recorren rutas específicas por los barrios Hanansaya y Urinsaya, deteniéndose en cada esquina para orar por la salud y prosperidad del pueblo.
Las festividades incluyen rituales como el Viernes de Dolores, el Domingo de Ramos, el Miércoles Santo, el Jueves Santo con el Vía Crucis, el Viernes Santo de penitencia, el Sábado de Gloria con la Resurrección y el Domingo de Resurrección con el “Chaprinakuy”.
Huancavelica
La Semana Santa de Huancavelica, Patrimonio Cultural de la Nación desde el 25 de octubre del 2013, fusiona elementos andinos y católicos en una celebración de diez días. La festividad inicia con procesiones en el barrio de San Cristóbal y culmina con la quema de un muñeco de Judas el Domingo de Pascua.
Las actividades incluyen la elaboración de alfombras florales en las calles, representaciones de la entrada triunfal de Jesús y encuentros simbólicos como el de Cristo con San Juan Evangelista. El Jueves Santo destaca por la visita a siete iglesias y la entrega del “llavero”.
El Viernes Santo se conmemora con el recojo de espinas y el Sábado de Gloria da inicio a una gran feria. El Domingo de Resurrección culmina con la procesión del Cristo de Resurrección y la quema del muñeco de Judas.
Moche (Trujillo)
La Semana Santa de Moche, declarada Patrimonio Cultural de la Nación el 20 de marzo del 2015, se extiende por 10 días, comenzando con el Viernes de Dolores y terminando en el Domingo de Pascua. Esta duración excepcional refleja la importancia de la tradición ritual en esta localidad norteña.
Destaca la emblemática Sopa Teóloga, un plato típico que incluye caldo de pava con pan, azafrán y otros ingredientes locales.
Durante la festividad, es común ver colgados buches de pavo y otros elementos frente a las casas, indicando que se ha preparado la sopa teóloga. Esta tradición gastronómica refleja la rica historia culinaria colonial del pueblo.
Omate
La Semana Santa de Omate, Patrimonio Cultural de la Nación desde el 30 de junio del 2010, destaca por sus “posas”, similares a capillas mortuorias, adornadas con imágenes religiosas. El Domingo de Ramos inicia con agradecimientos y la procesión del Señor de las Piedades.
El Miércoles Santo, Jesús Nazareno carga la cruz en procesión. El Jueves Santo se erigen las posas, alcanzando hasta 20 metros de altura. El Viernes Santo se realiza el Vía Crucis y la procesión del Santo Sepulcro.
El Sábado de Gloria la imagen de la Virgen Dolorosa recorre las calles en sentido contrario. La Vigilia Pascual se celebra y el Domingo de Pascua concluye la festividad.
Lima
La Semana Santa del Centro Histórico de Lima fue declarada Patrimonio Cultural de la Nación el 20 de marzo de 2018. Esta festividad, de ocho días de duración, reúne a la población del centro y otros barrios de la ciudad en una conmemoración católica.
Destaca por sus procesiones de imágenes religiosas y rituales en iglesias y templos. Todo comienza el Domingo de Ramos y termina siete después con el Domingo de Resurrección.
La preparación comienza en Miércoles de Ceniza, marcando el inicio de la Cuaresma. La historia destaca el origen en Lima del Sermón de las Tres Horas, una práctica religiosa adoptada a nivel mundial.