‘Los camaleones del mal’: Se disfrazan de ancianos para asaltar en exclusivas zonas de Lima Metropolitana

En los distritos limeños de San Isidro, La Molina, Miraflores y Barranco hay una nueva modalidad de robo que aterroriza a los peatones de concurridas avenidas y a los comensales de diversos establecimientos de comida.

Se trata de dos expertos en el robo de celulares y otros objetos personales que se camuflan en la sociedad gracias a dominar el arte del disfraz, conocido en el mundo del hampa como la transformación o el ‘camaleón’.

De acuerdo a la Policía Nacional del Perú (PNP), estos especialistas en cambiar de apariencia fueron identificados por Dior Inocente Torres y Joceth Hurtado Vilca, quienes pasaban desapercibidos a la hora de delinquir, inclusive, para las propias autoridades.

Su modus operandi era el siguiente: Inocente ingresaba a un restaurante o paseaba por alguna calle adoptando la imagen de un adulto mayor o un hombre de negocios, tras ver a su víctima, daba la señal a su cómplice Hurtado, quien se mantenía cerca en una motocicleta.

Cuando el ‘camaleón’ lograba arrebatarle el celular, corría para subirse inmediatamente al vehículo de su compinche y emprender la huida, dejando atrás a sus perseguidores. De esta manera, lograron hacerse con decenas de celulares en los últimos meses.

Su habilidad, y la de su compañero, era tal que dejó sorprendidos a los miembros de la PNP que venían siguiendo su accionar delictivo. Cabe destacar que Inocente Torres es un individuo de 18 años que ya cuenta con antecedentes penales.

Lamentablemente, la sustracción de bienes ajenos no terminaba allí. Los ‘Camaleones del mal’ ingresaban a los celulares de sus víctimas para robar también el dinero de sus cuentas bancarias.

Fue la cantidad de denuncias que describían la misma modalidad de actuar que provocó en la PNP que el caso sea investigado minuciosamente. Gracias a un trabajo de seguimiento, primero lograron dar con la placa de la motocicleta en la que escapaban.

Luego, se percataron que era imposible identificar a los malhechores porque estos variaban su imagen continuamente, de tal manera que las descripciones de los testigos los detallaran como personas mayores de 30 años.

Tras lograr su captura, la Policía Nacional encontró en la guarida de los delincuentes los disfraces que utilizaban para lograr sus asaltos. “Con las denuncias policiales nosotros podemos investigar y capturar a estos delincuentes cobardes, porque muchas veces emplean un arma de fuego para intimidar a las víctimas”, indicó el general PNP Marco Conde, director de la Dirincri.

Las autoridades consideraron que este solo es el comienzo de una de las mentes criminales más peligrosas del país. “Es un delincuente muy avezado, temerario, peligroso porque él va a seguir creciendo en este mundo de la delincuencia”, precisó el jefe de la Brigada Antirrobos.

“El cabecilla desde adolescente ya tiene ingresos a un centro preventivo de menores, ya ha sido infractor de la ley penal, con continuas denuncias por hurto y robo agravado”, dijo por su parte Conde.