La suspendida fiscal de la Nación, Patricia Benavides, reapareció este jueves en un clip enviado a los medios para calificar de “incipientes” las diligencias realizadas por el Equipo Especial Contra la Corrupción del Poder (Eficcop), que investiga una red criminal de tráfico de influencias en el Ministerio Público, presuntamente liderada por ella.
La magistrada replicó a la decisión del juez Juan Carlos Checkley, del Juzgado Supremo de Investigación Preparatoria, quien días atrás rechazó la tutela de derechos formulada por su defensa, con la que buscaba que la fiscal suprema Delia Espinoza no la siga investigando por presunta organización criminal y otros.
“Esta resolución contiene puntos fundamentales que son importantes precisar [...] Primero, se confirma [...] que las diligencias realizadas por el Eficcop son incipientes y no son elementos de convicción o prueba de cargo, pero con esos elementos incipientes me han suspendido en el cargo”, dijo.
Checkley concluyó que Espinoza es “la única habilitada y competente” para conocer esa pesquisa, ya que el actual fiscal de la Nación, Juan Carlos Villena, se excusó del caso, al igual que Pablo Sánchez, quien asumió la dirección del Ministerio Público de manera interina. Ambos figuran como testigos y ya han declarado ante la Fiscalía Suprema Especializada en Delitos Cometidos por Funcionarios Públicos.
En otro momento de su pronunciamiento, Benavides criticó a Sánchez por apartarse únicamente de esta carpeta y no de otra en la que también se encuentra incursa. “El fiscal de la Nación interino se excusa en la carpeta Fiscal N.º 1228-2023, pero no en la carpeta Fiscal N.º 33-2024. Nos preguntamos por qué. [...] Debió excusarse en todas las carpetas”, indicó.
“Mi gran exigencia es que se respete el debido proceso, ese siempre ha sido un pilar fundamental en mi trabajo fiscal”, remarcó. La tutela de derechos fue rechazada por Checkley en todos los extremos. Por ejemplo, la exfiscal había solicitado que se excluyan las pruebas obtenidas por el Eficcop, pese a que no fueron incluidas como elementos de convicción, sino consideradas en su conjunto como una noticia criminal para dar inicio a la investigación preliminar.
Por esa razón, su exasesor, Jaime Villanueva, ha declarado como testigo —y no como colaborador eficaz— en el expediente a cargo Espinoza. Solo tiene dicha condición especial ante el Eficcop, que inició el caso que afecta a Benavides junto con la División de Investigación de delitos de Alta Complejidad (Diviac) de la Policía al realizar detenciones y allanamientos de viviendas y oficinas de sus exasesores.
Esa organización presuntamente buscaba influir “ilícitamente en decisiones de congresistas” para la destitución de los titulares de la Junta Nacional de Justicia (JNJ), la designación del actual defensor del pueblo, Josué Gutiérrez, y la inhabilitación de la exfiscal de la Nación, Zoraida Ávalos.
Apenas conocida la investigación, Benavides destituyó a Marita Barreto, coordinadora del Eficcop, y luego aseguró que las pesquisas son “un acto torpe” para intentar bloquear los casos que tiene abiertos contra los máximos representantes del gobierno por las muertes durante las protestas que se desarrollaron de diciembre a marzo pasado.