Gregorio Pérez dijo basta. Después de cuatro décadas ininterrumpidas entre vestuarios, charlas y pizarras, decidió ponerle punto final a su aventura como responsable técnico en todos los niveles. Desea priorizar su bienestar alejándose de las tensiones y el nerviosismo del día a día. No obstante, se le hace inevitable rememorar los mejores momentos de su profesión. El recuerdo más próximo que le asalta es su aventura con Universitario de Deportes, pues fue su última estación antes de marcharse a sus cuarteles de invierno. “Fui un técnico más que pasó por la historia de un club muy grande como es la ‘U’”, dijo con mucha humildad ‘Goyo’ a Infobae Perú antes de repasar toda su experiencia volcada en Ate.
- ¿Cómo está después de 24 horas de haber dado a conocer su retiro como entrenador?
Bueno, con la misma tranquilidad con la que manifesté que se había culminado una etapa de mi vida relacionada con mi trabajo, que es el fútbol, como director técnico. Después de 42 años decido decir basta. Eso no quiere decir de que nosotros no tengamos deseos de seguir vinculados al fútbol, pero no como director técnico, sino en otro lugar. Estoy tranquilo, porque tuve una gran carrera que me posibilitó conocer el fútbol fuera de fronteras. A parte de trabajar en mi país lo hice fuera del continente, en Europa. Para mí ha sido una carrera que he tenido, lógicamente con un poco de suerte, basada en el esfuerzo y sacrificio respaldada por la familia.
- Cuando menciona que desea seguir ligado al fútbol, ¿a qué faceta se refiere? ¿Apunta a la Gerencia Deportiva o Asesoría Externa?
En un lugar que uno sea útil, no para estar parado y decir estoy acá. Quiero aportar dentro de mi experiencia durante muchos años que he trabajado, recorrido y he vivido distintas circunstancias que dio una vasta experiencia para obtener un conocimiento profundo del fútbol. Si puedo ser útil en algún lugar mencionado, bueno lo pensaríamos.
- Ahora que ingresa al plano de los retirados, ¿qué es lo que le depara la vida?
Hoy vivo el día a día, en realidad. Hoy estoy con mi familia. Sé que corté mi actividad que me dio muchísimas alegrías. También sé de la posibilidad de tener una cierta tranquilidad, diríamos, en la edad que estamos. Tengo 76 años, no me siento ningún viejo, pero soy realista. Me he recuperado de algún problemita físico que he tenido de salud y me encuentro muy bien. La verdad que tengo la tranquilidad de haber cumplido una etapa y estar pronto, quizás, para otra, pero no con tantas exigencias y nerviosismo.
- ¿Su gran amigo Pablo Bengoechea o el maestro Óscar Washington Tabárez se comunicaron con usted tras hacer pública su decisión?
No, todavía no. Esto fue ayer. He recibido muchos mensajes no sólo de Uruguay y llamadas de muchas partes donde uno tuvo la suerte de trabajar y en otros lugares donde a uno lo conocen. Lógicamente que la relación sigue intacta más allá de que te puedan o no llamar.
- Imaginamos que uno de esos países vinculados a las despedidas ha sido el Perú.
Sí. Fue el último país donde trabajé. Lamentablemente tuve una fatalidad de salud y no pude continuar. Bueno, por algo fueron las cosas, pero tengo el mejor recuerdo como de otros países donde trabajé también. Tuve la suerte de salir en 13 oportunidades al exterior, que no es poca cosa. La última fue Perú que estuve en Universitario en dos oportunidades. El mejor de los recuerdos, sinceramente, y mi gratitud a toda la gente que me brindó lo mejor estando allí en el club.
- ¿Qué lugar ocupa Universitario de Deportes en sus casi seis décadas de trayectoria en el fútbol?
Y bueno, con todos los equipos donde estuve como jugador o técnico estoy agradecido por la oportunidad que tuve incursionando en el club. El agradecimiento a todos en general en estas seis décadas en las que uno estuvo vinculado al fútbol. Un agradecimiento a los clubes, las personas, los jugadores, los dirigentes y al periodismo por la oportunidad de compartir e intercambiar y crear amistades.
- ¿Qué reflexión le deja que Universitario haya sido su última parada como entrenador?
Y bueno, se dio, son las circunstancias de la vida. Uno tenía la intención de seguir, pero lamentablemente no se dio. Pero fue el último equipo, sí que dirigí y en el que realmente siempre tuve las puertas abiertas de par en par como de otros equipos y países también. Pero por ser el último que dirigí, quedó una sensación especial. La pasé muy bien en Perú hasta que tuve, lamentablemente, el suceso con mi salud. Pero tengo el mejor recuerdo del fútbol peruano, del pueblo peruano y especialmente de la ‘U’ con toda su gente.
- “Todos juntos somos Universitario”, fue una frase que caló mucho en el mundo ‘U’. Más de dos años después de su salida y en el centenario del club, ¿cuánto cree que avanzó el club y si su mensaje se viene cumpliendo?
Bueno, yo no sé si el mensaje se viene cumpliendo. Lo que dije fue “uno no es más importante que todos juntos y que todos juntos son la ‘U’”. Ese fue mi mensaje, no sé si habrá sido importante o no. Fui un técnico más que pasó por la historia de un club muy grande como es la ‘U’. A mí me pone muy contento que le vaya bien, que haya salido campeón y que ahora esté muy bien también. Fui en su momento, realmente, tratado con mucho afecto y cariño por toda la gente. Tuve un gran apoyo. Por todas esas cosas le doy un gran valor y reconocimiento por lo que me brindaron. Y en los momentos difíciles que me tocó pasar, tuve el apoyo de todo el Perú siempre.
- Dirigió 18 partidos a Universitario, pero dejó un recuerdo difícil de borrar entre sus aficionados. ¿A qué lo atribuye y cómo se siente con ello?
Yo me siento muy bien. Ese reconocimiento, bueno no sé por qué será, sinceramente. Pero tuvimos una relación ida y vuelta, realmente, que le hizo bien al club. Nosotros tuvimos la posibilidad de disfrutar esas estadías muy cortas: la primera que, lamentablemente, no pudimos seguir por la pandemia y después porque nos sacaron del club la administración que llegó; y después la segunda etapa fue de mucho trabajo y dedicación. Encontramos al club en un momento muy difícil, muy malo. No pudimos clasificar a la Copa Libertadores, pero pudimos dejar un pequeño legado en el sentido de que trabajamos relacionado con la historia. Hicimos revivir la garra de Universitario con el plantel y la gente. De una forma u otra nos ayudaron y apoyaron quienes trabajaban en el club.
- ¿Hubo algún futbolista con el que conectó particularmente?
Yo sigo en comunicación con muchos futbolistas. Principalmente con jugadores jóvenes, pero también con aquellos que no están en el club y que están jugando en otros clubes. Hicimos una muy buena relación con la gente que trabaja en el club en distintas áreas. Recibo mensajes constantemente, esa es la realidad.
- Hablando del plantel, ¿cómo es Aldo Corzo? ¿Cómo lo recuerda?
Bueno con el mismo afecto que a todos los jugadores. No hago puntualizaciones en especial. Reconozco las virtudes y resalto la parte humana de él con todo el plantel. Pero no trato de especificar individualmente, sino al conjunto es al que estoy agradecido.
- Alejándonos del aspecto emotivo, hace no mucho resaltó a los jóvenes y en Universitario hubo uno llamado Diego Romero, hoy llamado a la selección peruana en el inicio de la era Jorge Fossati. ¿Qué opinión tiene de él? ¿Qué piensa que los jóvenes tengan oportunidades con Fossati, un conocido suyo?
Me pone muy contento. La verdad que lo de Romero me pone contento, porque tiene gran futuro. Él ya estaba cuando nosotros llegamos e incluso jugó algún partido en Primera con nosotros. Le vemos un gran futuro y hoy vemos que está en la lista de la fecha FIFA que jugará Perú. No me cabe la menor duda de que Fossati va a entrar en una etapa de tratar de renovar con algunos jugadores que vienen demostrando la posibilidad de estar dentro de la selección como en el caso de Romero.
- ¿Ha hablado últimamente con Fossati? Mire que en unos días inicia oficialmente su aventura como seleccionador nacional.
No, no he hablado con él últimamente.
- ¿Qué opinión tiene de él? Ustedes son contemporáneos y de gran bagaje a nivel de direcciones técnicas.
La mejor. Tiene un gran bagaje y una gran experiencia. Conoce mucho del fútbol desde distintos países donde trabajo y ahora en el peruano. No me cabe la menor duda de que este va a ser un buen trabajo con la selección.
- Trabajó en 18 clubes, en Europa y hasta en las selecciones de su país. ¿Cree que quedó algo pendiente en este largo camino recorrido?
Siempre queda algo pendiente, siempre queremos algo más. Pero estamos muy contentos, porque dentro de esos 18 clubes repetí en algunos de ellos como el caso de Gimnasia, Olimpia y Peñarol. Estoy muy contento con la trayectoria que he podido llevar a cabo.
- ¿Alguna vez lo veremos de nuevo por Perú?
Y bueno, nunca se sabe las vueltas de la vida. Ojalá que así sea y que podamos reencontrarnos. Nunca se sabe, Dios dirá.
- ¿Quién es Gregorio Pérez?
Gregorio Pérez es un padre de familia que tuvo un trabajo público, donde con mucho esfuerzo tuvo éxito, tuvo momentos buenos y los otros. Pero trató de caminar con respeto, con humildad y sabiendo realmente ser solidario, reconociendo al que está al frente y respetarlo. Son un poco los atributos que a uno lo lleven a que lo reconozcan, porque si no respetas es difícil que te respeten. Ya tengo 76 años, muy feliz con la familia que tengo y con toda la gente que he conocido a través de todos estos años dentro del país y fuera. Soy un trabajador que ha dicho de que su tarea ha culminado a los 76 años.