Contrario a lo que se cree, según Abraham Levy, el también conocido ‘hombre del tiempo’, el fenómeno de La Niña tendría más impactos positivos que negativos para el país, sobre todo en materia económica. De acuerdo a sus estimaciones, basadas en las anomalías de la temperatura del mar, la transición de El Niño a esta se daría a finales del otoño de este año. Es muy probable que sea de magnitud débil a moderada.
Levy, quien se apoya en los datos de la Oficina Nacional de Administración Oceánica y Atmosférica (NOAA, por sus siglas en inglés), remarca este cambio como potencialmente beneficioso para el Perú. En un análisis visual compartido, se observa el desarrollo de aguas más frías de lo habitual en dicha región del Pacífico, lo que tradicionalmente se ha asociado con patrones de precipitación y temperatura.
La información detallada sobre este pronóstico se apoya en el registro de animaciones que ilustran las variaciones de la temperatura marina durante los últimos 30 días, una herramienta crucial para entender la dinámica que antecede al fenómeno de La Niña. La interpretación de estos datos destaca la relevancia de la observación continua de estas anomalías para la preparación y adaptación de estrategias económicas en el país.
Aunque el diálogo sobre los impactos climáticos suele estar marcado por la preocupación ante posibles negativas, Levy sostiene que ‘La Niña’ puede representar oportunidades en lugar de meros desafíos. Esta aproximación sugiere la importancia de basar las respuestas y políticas públicas en un entendimiento integral de las dinámicas climáticas y sus múltiples facetas.
“Ya los pronósticos nos indican que vamos a eventualmente a transitar hacia condiciones de La Niña que son, por el contrario, buenas para la economía peruana, son buenas para la pesca, son buenas para la agricultura y son buenas para el llenado de nuestro reservorios para la próxima temporada”, dijo Levy a Infobae Perú.
¿Cuál es la diferencia entre el fenómeno de El Niño y La Niña?
Explicó que, a diferencia de El Niño, el fenómeno de La Niña se encarga “de llover bien donde tiene que llover, en la Cordillera, y no en la costa que es donde produce huaicos, inundaciones y la activación de quebradas”.
“Creo que el evento de El Niño va a terminar en poco tiempo, hablamos de semanas, y se va a dar paso a La Niña”, comentó a este medio.
De acuerdo al ‘hombre del tiempo’, la presencia de La Niña también tiene cosas positivas para la industria textil, pues se tendrá un invierno frío y no cálido como en el pasado que generó, por ejemplo, grandes pérdidas económicas a los empresarios de Gamarra. En 2023, varios se quedaron sin vender sus prendas abrigadoras como poleras, buzos, chompas y más. La sensación de calor, pese a estar en temporada de invierno, obligó a la ciudadanía a optar por ropa más ligera.
A través de su cuenta oficial de Twitter (ahora llamada X), Levy escribió: “El nacimiento de La Niña (que es buena para la economía peruana. Que no vengan los alarmistas a decir otra cosa); se estaría gestando ya (aparición de aguas sobre-enfriadas en el Pacífico ecuatorial oriental)”.
En la quincena del mes pasado, Adrián Armas, gerente central de Estudios Económicos del Banco Central de Reserva del Perú (BCRP), se refirió a la posible llegada de La Niña en nuestro país y su impacto en materia económica.
“La Niña es el segundo escenario más probable que ocurra el segundo trimestre... Una débil tiene inclusive efectos, en neto, favorables a la economía”, dijo.
Punto más alto de la temperatura ya pasó
Levy, en otro momento, afirmó que el punto más alto de la temperatura en nuestro país ya pasó y que ahora estamos camino al otoño con grados Celsius que irán descendiendo de forma gradual.
“El día más cálido del año en toda la costa peruana ya pasó. La temperatura más alta que hemos observado en Lima fue el 6 de febrero con 32.3° y vamos a ir viendo, conforme lleguemos al otoño dentro una semana, que vamos a tener menor radiación solar y todo el sistema se va a empezar a enfriar, que es lo que pasa todos los años”, mencionó.
Agregó que La Niña “va a producir un invierno marcado, agosto y setiembre fríos, húmedos, lluviosos en Lima”.
“El pronóstico oficial del Enfen indica que en abril las condiciones se normalizan y prevalece el escenario de condiciones neutrales que van a subsistir hasta agosto, pero en ese tránsito del otoño al invierno, las probabilidades de generarse una Niña son crecientes”, indicó.
¿Qué dice el Enfen sobre La Niña?
Semanas atrás, la ingeniera Rina Gabriel, vocera de la Comisión Multisectorial del Enfen, se mostró cauteloso al referirse a la posible llegada del fenómeno de La Niña, pero precisó que sí era real el ingreso de una gran masa de agua fría en el Pacífico ecuatorial occidental.
“En Estados Unidos, a través de su agencia la NOAA, y nosotros también en el Enfen, hemos visto de que hay una gran masa de agua fría en el Pacífico ecuatorial occidental. Esto significa que podría arribar (La Niña), si se dieran las condiciones, en los próximos meses”, dijo.
De acuerdo a la experta, esa masa de agua fría podría ir viajando y, “con un porcentaje de probabilidad todavía para el momento muy corta, se podría generar La Niña”.
¿Qué significa el fenómeno de La Niña?
La Niña es una condición climática natural que se caracteriza por el enfriamiento anormal de las aguas del océano Pacífico ecuatorial, contrario al fenómeno de El Niño, que implica un calentamiento de estas aguas. Este enfriamiento afecta la circulación atmosférica, alterando los patrones climáticos a nivel mundial.
En el caso del Perú, La Niña tiene importantes implicancias. Dado que el país se sitúa en la costa del Pacífico sudamericano, el enfriamiento de las aguas afecta directamente su clima. Las principales consequencias incluyen el aumento de lluvias en los Cordillera, una reducción en las precipitaciones en la costa y cambios en los patrones climáticos de la sierra.