Una preocupante situación enfrentan los pasajeros que abordan un taxi en el Aeropuerto Internacional Jorge Chávez, tras conocer que más de 200 conductores presentan denuncias por diversos delitos: robo, violación, manejar en estado de ebriedad y secuestro. Una investigación del diario El Comercio visualiza que no solo es la manera de como ofrecen el servicio, sino también quiénes son los que están al volante.
De esta manera, se pudo conocer que son 14 asociaciones que cuentan con conductores inscritos con denuncias ante la PNP, investigaciones en el Ministerio Público y, lo más grave, registran ingresos en un centro penitenciario. Los choferes se ubican en la playa de estacionamiento para ofrecer sus servicios, cada uno perteneciente a una empresa, a los pasajeros que aterrizan en Lima.
La información proporcionada se basa en la data de la Fiscalía de la Nación, el Instituto Nacional Penitenciario (INPE), el Registro Nacional de Detenidos y la Sucamec. Es así como se pone en evidencia la problemática que debe generar alerta de las autoridades ante las denuncias registradas por varios usuarios de ser víctimas de robo al tomar una de estas unidades en el mismo terminal.
Denuncias policiales y fiscales
Al menos 800 taxistas pertenecen a las empresas que brindan este tipo de servicio en los embarques; de los cuales 201 tienen antecedentes. La compañía International Airport Taxi SAC cuenta con 33 conductores con denuncias policiales y 29 en el Ministerio Público, posicionándose con más casos.
Le sigue Airport Taxi Perú SAC con 9 en la comisaría y 6 personas procesadas en la Fiscalía. Entre los que se encuentran dentro de esta lista es Manuel Bones Luna: esta persona cuenta con un registro en un centro penitenciario. Además, tiene procesos por falsedad y tráfico de influencias.
De la misma manera, Javier Juan Asencios Romero, quien tiene procesos por robo, homicidio, secuestro y tráfico de drogas. Mientras tanto, José Luis Zegarra Martínez figura con procesos de lesiones, peligro común, actos contra el pudor de menor de 14 años.
Los casos más recurrentes es la volcadura o choque con perjuicios materiales o personales (79), denuncia por lesiones (21), conducir en estado de ebriedad (21), hurto (12), atropello (12), violencia física y psicológica (12), y violencia familiar (5).
Respuesta de LAP
Lima Airport Partners (LAP) emitió un comunicado antes estos actos e indicó que la parte donde se encuentran los taxistas es una vía de uso público. Asimismo, hacen mención que existen empresas que ofrecen el servicio sin permisos en los alrededores del terminal.
“Si bien la administración y la operación recae en LAP, es competencia exclusiva de las autoridades (como la PP y la ATU) realizar las acciones de fiscalización, control, intervención o sanción de los taxistas no autorizados que realizan sus actividades en la playa de estacionamiento”, se lee en la misiva.
Además, precisaron que Ositran había coordinado con las empresas de taxis que no cuentan con los permisos de estas empresas para llevarse mesas de diálogo con la finalidad de sea uno de los filtros al momento de su inscripción.
A su vez, afirmaron que ha implementado medidas de colaboración con la Policía Nacional del Perú (PNP) y ATU, proporcionando espacios y tecnología avanzada para optimizar sus funciones de supervisión y control. Esto incluye sistemas de videovigilancia de última generación y un centro de control, ambos destinados al uso exclusivo del personal de dichas entidades.
“Para LAP era inadmisible incorporar en la operación del AlJC a empresas de taxis integradas por conductores con antecedentes penales y policiales, por lo que LAP decidió no continuar con las Mesas de Trabajo dándolas por concluidas”, concluyeron tras el informe presentado en el citado medio.