Crisis educativa en Piura: Escolares iniciaron clases en colegios sin agua, luz y con problemas de infraestructura

La región de Piura enfrenta una crisis educativa que va más allá de las aulas. Con apenas el 34 % de los colegios públicos con acceso a agua potable y solo el 26 % conectado a la red de desagüe, la infraestructura escolar se tambalea en medio de las altas temperaturas que pueden llegar a picos de 40 °C, poniendo en riesgo la salud y el bienestar de los estudiantes.

Las declaraciones de la ministra de Vivienda, Construcción y Saneamiento, Hania Pérez de Cuellar, durante la ceremonia regional del inicio del ‘Año Escolar’, pintan un panorama preocupante, destacando una problemática arraigada en años de desatención y negligencia por parte de las autoridades.

Durante una entrevista concedida a RPP, la ministra de Vivienda enfatizó la notable disparidad en el acceso al agua en los centros educativos de Piura, en comparación con el sector privado. “La diferencia es grande con respecto al sector privado. El 93.5 % de colegios del sector privado tienen acceso al agua y al desagüe. Entonces el desafío es mucho mayor en los colegios públicos y en el ámbito rural”, indicó la ministra de Estado.

En respuesta a esta disparidad, la ministra destacó los esfuerzos coordinados del Gobierno Central, el Gobierno Regional y la Dirección Regional de Educación para abordar este problema y reducir la brecha existente.

Según Hania Pérez de Cuellar, el desafío radica en la distribución equitativa del agua en toda la región de Piura. “Se deben abordar varios aspectos, entre ellos, la necesidad de garantizar el suministro de agua potable, mejorar el servicio de desagüe, fortalecer la EPS Grau y asegurar los recursos necesarios para que las instituciones educativas puedan acceder a las redes principales de abastecimiento”, señaló a RPP.

Ante este escenario, la Dirección Regional de Educación (DRE) de Piura, está elaborando planes para abordar la brecha en infraestructura educativa y saneamiento, así lo indicó María Madrid Mendoza, en diálogo con RPP. “Este problema es el resultado de la negligencia de distintos niveles de gobierno a lo largo de los años. Urge una acción colectiva para revertirlo. La falta de agua no es un tema de hoy”, indicó

De acuerdo a lo precisado por la titular de la DRE Piura, en la región hay cerca del 5 % de los 3.268 colegios que ya se encuentran bajo medidas de contingencia por no contar con la infraestructura adecuada.

Frente a este panorama, Madrid Mendoza recalcó la importancia de obtener recursos adicionales del Gobierno Central para poder concretar proyectos de inversión en 1.324 colegios; y el saneamiento legal de 778 centros educativos.

Además, la directora regional de Educación en Piura ha comunicado que, aunque los pagos por los servicios de agua y luz están asegurados hasta julio, se necesitarán 8 millones de soles adicionales para cubrir los gastos durante la segunda mitad del año. “Para evitar cortes en los servicios básicos, se están llevando a cabo gestiones ante los ministerios correspondientes en busca de fondos adicionales”, indicó.

Durante este inicio del año escolar, se han registrado diversos problemas que afectan el funcionamiento de las instituciones educativas. Frente al colegio Paul Harris, ubicado en la urbanización Los Bancarios, se reportó un colapso en los desagües, lo que representa un riesgo para la comunidad escolar.

Por otro lado, en la Institución Educativa Ignacio Merino, se han identificado problemas de mobiliario, lo que ha llevado a un acuerdo con los padres de familia para que estos proporcionen sillas y mesas adicionales. Específicamente, en el nivel primario, se requieren urgentemente 60 sillas y mesas para garantizar un entorno adecuado para el aprendizaje de los estudiantes.

En cuanto al Colegio Emblemático San Miguel, su director, Max Grillo, ha señalado la escasez de personal de limpieza para mantener en buen estado las instalaciones escolares y los servicios sanitarios. A pesar de haber solicitado la asignación de dos trabajadores adicionales durante años, la situación no ha sido resuelta. Con aproximadamente 7 hectáreas de terreno, 105 aulas y una población estudiantil de 3.700 alumnos, el colegio enfrenta un gran problema para mantener la limpieza y el orden.