Luego del escándalo que significó la renuncia del ex Primer Ministro Alberto Otárola —el cual presuntamente habría favorecido con contrataciones a una mujer llamada Yaziré Pinedo.—, el Dina Boluarte nombró como nuevo jefe del Consejo de Ministros a Eduardo Adrianzén, abogado y uno de los políticos de confianza de la presidenta, dado que se le nombró como representante de Perú ante la Organización de Estados Americanos (OEA) en febrero de 2023, donde perdió los papeles en la audiencia de la CIDH debido a las manifestaciones en el Perú.
Como se recuerda, Otárola señaló el 2023 que Tía María no estaba en agenda, luego de que el exministro Energía y Minas del Perú, Óscar Vera expresará “los deseos” de su sector de que el proyecto de la empresa Southern Perú Copper Corporation se ejecute. Sin embargo, ahora, el nuevo presidente del Consejo de Ministros se pronunció sobre este y más proyectos que promoverá desde la PCM.
¿Tía María va? Nuevo Primer Ministro contesta
En conversación con RPP, el Primer Ministro Gustavo Adrianzén respondió sobre los grandes proyectos mineros del país que promoverá desde el PCM. En especial sobre Tía María, la gran propuesta minera en Arequipa. “Hemos puesto la lupa sobre [este proyecto]. Tenemos grande expectativas ahí”, señaló. Sin embargo, no negó las controversias que existían con respecto a este.
“Somos absolutamente conscientes de que el diálogo va a permitir despejar las dudas que existen. Ya ha pasado mucho tiempo desde los lamentables sucesos del 2015. Yo creo que el trabajo que se ha venido haciendo ha venido sensibilizando a las dos partes, a empresa y comunidad. Ya hoy hay una mayor toma de conciencia sobre la necesidad de preserva adecuadamente las aguas del río Tambo, sobre la importancia que significaría para el desarrollo regional y local activar Tía María”, declaró.
Como se recuerda, el abogado fue ministro de Justicia y Derechos Humanos en el 2015, durante el gobierno de Ollanta Humala Tasso. Entonces, frente a las protestas contra Tía María, el ahora Primer Ministro intentó equiparar las manifestaciones con la violencia durante la época del conflicto armado interno. “Los remedios a veces son amargos, pero son necesarios. La declaratoria del estado de emergencia lo entendemos como el último ratio, la última razón, cuando uno se enfrenta con fundamentalistas, con violentistas. El día de ayer la violencia ha llegado a extremos que nos hacen recordar los años más oscuros de la violencia en el Perú. Ayer se ha atacado una comisaría con dinamita”, resaltó entonces.
Del mismo modo, deslizó su creencia de que las protestas de entonces estaban financiadas con dinero “ilegal”. “Estamos buscando cuál es la fuente de provisión de dinero, de dónde proviene el dinero que puede mantener a tanta gente, desayuno, almuerzo, comida, albergue y además jornales diarios. El origen solamente puede ser delictivo, aquí tiene que haber dinero negro proveniente de alguna acción delictiva como el narcotráfico o minería ilegal”, vaciló entonces. Sin embargo, ahora señala que con “el impulso de este diálogo que se va a promover naturalmente desde el sector correspondiente con respaldo del PCM“ se va a conseguir sacar adelante el proyecto.
¿Qué han dicho el MEF y Minem sobre Tía María?
También los nuevos ministros de Economía y de la cartera de Energía y Minas se han pronunciado sobre esta gran propuesta que lleva 14 años paralizada. Así, Rómulo Mucho, el nuevo titular del Minem s expresó de esta manera: “El Perú es minero. El Perú debe estar haciendo funcionar varios proyectos que ya tienen licencia para mover la aguja del crecimiento económico. La fórmula mágica es recuperar la confianza, ya que los inversionistas se han ido.[…] Tía María debería salir porque es una necesidad para Arequipa y el país. […] Hoy la minería moderna existe y cuida todos sus impactos, emisiones; en cualquier parte del mundo funciona”.
“Tiene toda la razón”, señaló en RPP José Arista, que ahora comanda el MEF. “Me alegro haber encontrando con un ministro con una lucidez en el sector minero y energético”, añadió el ministro y adelantó que lo que falta no es convencer a la población, más bien se trataría de “limar algunas aristas con la población o solucionar algunos impases con ellos”.