Aparentemente la luna de miel entre Mauricio Larriera y Newell’s Old Boys ha terminado. Después de un inicio sorprendente en la Liga Profesional Argentina, el entrenador uruguayo ha entrado en una racha irregular marcada por las actuaciones arbitrales, las cuales han condicionado los resultados de los suyos.
Contrariado por la situación, Larriera atacó la labor de los silbantes como nunca antes en una tensa conferencia de prensa: “Hoy siento que debo terminar con la caballerosidad mía. Están pasando cosas que son muy extrañas, que son peligrosas y hoy no las puedo callar y no las puedo dejar pasar”.
Fue tanta la indignación del exentrenador de Alianza Lima que cuestionó el trabajo de la Asociación de Fútbol Argentino al momento de supervisar los arbitrajes. “Yo me pregunto, qué están haciendo en Ezeiza. Qué está pasando acá. Hay cosas que no entiendo”, dijo.
“Soy caballero pero no soy estúpido. No me gustan las injusticias y tengo que proteger a mis muchachos”, exclamó Larriera luego de que el ‘leproso’ fuera incapaz de sacar adelante el partido contra San Lorenzo, que acabó igualado en empate a dos en el ‘Cementerio de los Elefantes’.
Clima tenso por Larriera
Mauricio Larriera, en esa misma sintonía, reconoció que “es realmente muy difícil dar un mensaje después de un partido como éste. Sé que esto es una industria y también es un juego, y los que están adentro son chicos que están jugando. Pero también tengo en claro que en esto no hay que agarrársela con los medios”.
Visiblemente afectado aún por el score conseguido, el técnico uruguayo dijo con vehemencia que “estoy muy fastidioso. No sé qué se puede hacer con estas cosas que están ocurriendo. En esta ocasión quiero salir en defensa de nuestros jugadores y a este club que me da el privilegio de estar en el fútbol argentino”.
“No estoy cuidando mi trabajo, esto va por otro lado. No me gustan las injusticias. Hoy vi las imágenes antes de venir en la rueda de prensa y esto me pone muy fastidioso”, reclamó Larriera añadiendo que “estas cosas no pueden seguir pasando. Lo que pasó hoy es muy grave. Ojalá que no pase más porque la sociedad argentina está sufriendo demasiado y no hay que agregar el fútbol”.
Cuestionado sobre su performance como responsable de Newell’s Old Boys, Mauricio indicó que “yo me siento muy bien y trato de ayudar al equipo para seguir arriba en la tabla de nuestro grupo”.