Pese a que distintos funcionarios del gobierno de Dina Boluarte anunciaron que se habían realizado los trabajos necesarios a nivel nacional para hacerle frente a un eventual Fenómeno El Niño, varias regiones han sufrido severos estragos solo por culpa de las lluvias propias de la temporada de verano, las cuales han causado deslizamientos, huaicos, desborde de ríos y derrumbes.
“El año pasado, en los tres niveles de gobierno se realizaron gran cantidad de obras de prevención en lo que respecta a la limpieza, descolmatación de cauces, quebradas y ríos. Esperábamos un Niño fuerte y moderado, pero no fue así”, indicó el coordinador del Centro de Operaciones de Emergencia Nacional (Coen), del Instituto Nacional de Defensa Civil (Indeci), Ricardo Pajares del Carpio, a RPP.
“Tenemos lluvias estacionales que son normales en esta época y, debido al cambio climático, hay que tener en cuenta que el planeta se encuentra caliente. Este y otros factores más están generando que se presenten lluvias puntuales, de manera focalizada, de condición intensa o extrema, lo cual genera en un par de horas que se incremente el caudal de los ríos y se desborde en las partes más bajas afectando campos de cultivo y viviendas”, señaló.
Las regiones más afectadas
En total, desde el 6 de enero hasta la fecha, se han registrado 1,054 emergencias en el país producto de las intensas y extremas precipitaciones pluviales. Estas han dejado 35,300 afectados y 4,819 damnificados.
Según explicó el experto, se considera damnificado a aquel poblador que ha perdido tanto sus medios de vida como su vivienda. “Puede ser que su vivienda esté en la condición de destruída o en la condición de inhabitable”, detalló.
“Prácticamente ellos requieren una intervención inmediata con respecto a vivienda, techo, abrigo y alimentos. Hay que entregarle carpas, calaminas, triplay, entre otras cosas para que pueda tener un lugar momentáneo donde vivir. Es por eso que se declaran los estados de emergencia, para que así el sector Vivienda pueda entregar rápidamente los bonos de arrendamiento para la entrega de módulos prefabricados”, dijo Pajares del Carpio.
En esa línea, el funcionario explicó que las regiones que peor la pasaron por la presencia de lluvias fueron Ayacucho, con 247 emergencias; y Huancavelica, con 163. Le siguen Huánuco, Apurímac, Cajamarca, Cusco, Arequipa, Áncash y Junín.
Además de dejar inhabitables un sinnúmero de viviendas y provocar que diversas vías de comunicación del país queden interrumpidas, los desastres naturales asociados a las lluvias también han dejado afectados miles de cultivos permanentes y no permanentes.
“Tenemos ya más de 19 mil hectáreas de cultivos afectados, 8.624 hectáreas de cultivo perdido. Esto se viene dando en diferentes regiones del país. Por ejemplo, ahora en la provincia de Purús en Ucayali e Iñapari en Madre de Dios tenemos afectaciones a cultivos que afectan los medios de vida de la población”, manifestó el coordinador del Coen.
Iñapari sumergida bajo el agua
Producto del desbordes de los ríos Acre y Yaverija, a causa de las intensas lluvias, Iñapari quedó sumergida el último fin de semana. Esta ciudad conecta a Perú con Brasil a través del Puente de la Integración, en Madre de Dios.
Gracias a un despacho de Inforegión se logró conocer que el nivel del agua cubrió varias dependencias estatales hasta en casi un metro y medio de altura. Esto produjo el colapso de las oficinas del municipio local, el Juzgado Mixto de la Corte Superior de Justicia, el Puesto de Control y Vigilancia Fronteriza de la Policía Nacional (PNP) y el único establecimiento médico del lugar.
“Son 36 manzanas afectadas, un total de 560 viviendas y un número de afectados de 2800 personas, entre los que han sido evacuados a los albergues y los que se han trasladado a las zonas altas a viviendas de sus familiares o amigos”, detalló a RPP el gerente general del gobierno regional de Madre de Dios, Enrique Muñoz.