El servicio brindado por los buses del Corredor Morado quedará cancelado sí o sí el próximo 4 de marzo. Gerardo Hermoza, presidente de la Junta de Operaciones del Corredor Morado, negó que las coordinaciones que viene haciendo el ministro de Transportes y Comunicaciones, Raúl Pérez Reyes, para evitar la salida del servicio de transporte, vaya llegar a buen puerto.
Como se sabe, el Estado peruano mantiene una deuda de más de S/300 millones con las empresas que administran los corredores complementarios, lo que ha causado que el servicio sea insostenible económicamente. El ministro Pérez Reyes declaró que viene coordinando con el ministro de Economía y Finanzas (MEF) el pago de la deuda mencionada, pero esto sería insuficiente porque de por medio hay un contrato que lo impediría.
En entrevista con Canal N, Hermoza aseguró que no es la primera vez que el Gobierno del Perú busca solucionar esta problemática; comentó que no cree que vaya a suceder en un corto plazo.
“Nosotros no vamos a mover la fecha del 4 de marzo. Estamos hablando de diez días. Exacto (vamos a cerrar). No hay más recursos económicos para poder seguir operando”, respondió.
En otro momento, explicó que el MEF no debe interpretar el contrato firmado entre las concesionarias y el Estado peruano, pues solo tendría que disponer que el Ministerio de Transportes y Comunicaciones (MTC) disponga los recursos a la Autoridad Nacional de Transporte Urbano para Lima y Callao (ATU) para que esta entidad a su vez pague la deuda.
“El contrato tiene un procedimiento que se llama trato directo. Hemos ido a trato directo, que ha demorado casi seis meses. Se firmó en noviembre. En ese contrato decía ‘le pagamos hasta el 31 de diciembre una parte, el 31 de diciembre de 2024 otra parte y otra parte se la pagamos en diciembre de 2025′. Ese dinero iba a ser utilizado para comprar unidades nuevas y para pagar deudas financieras. Nosotros firmamos y dijimos ‘ok, correcto, esta plata no se va a repartir, no se van a repartir utilidades, va a ser para reinversión y pago de deudas’”, indicó.
En ese sentido, por la firma de este documento, la empresa concesionaria adquirió modernos buses valorizados en medio millón de dólares, que contenía aire acondicionado y podía trasladar a 160 pasajeros en un solo viaje. Ahora, tendrán que devolverlos.
La razón por la que el servicio del Corredor Morado quebró es el incumplimiento de las autoridades de la Municipalidad de Lima y la Autoridad Nacional de Transporte Urbano para Lima y Callao (ATU). Según Hermoza, ambos debían encargarse de retirar a los vehículos informales de la ruta del medio de transporte.
También señaló que, por decisión de la gestión de Luis Castañeda Lossio, en 2015, se cancelaron todas las licitaciones, lo que causó deficiencias en la red de sistema integrado de transporte.
“Nuestra vía exclusiva está invadida por mototaxis, carretillas. Hemos estado abandonados con ATU y Protransporte por años, que no hacen su parte de obligación contractual”, señaló.
Ahora, Hermoza aseguró que el número de operadores se redujo de 4 a 2; mientras que la cantidad de buses disminuyó de 280 a 150.
“El dinero para meter en pérdida es finito. No tenemos dinero infinito para seguir metiéndolo en perdida. Estamos operando desde 2016 en pérdida. Trimestralmente nosotros mandamos nuestros estados financieros. O sea, ellos saben. La ATU veía cómo íbamos cayendo y no hacían nada”, afirmó.
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