En esta época no es muy fácil ver a futbolistas peruanos en Europa. Es más, a lo largo de la historia, han sido pocos los que lo han logrado, por esa razón, siempre es bueno recordar a dichos deportistas. Uno de ellos fue Pier Larrauri, quien se convirtió en el tercer jugador nacional en formar parte de las filas del gigante de Alemania, Bayern Munich, siguiéndole los pasos a sus compatriotas Paolo Guerrero y Claudio Pizarro.
Como si fuera poco, el volante lo consiguió antes de cumplir la mayoría de edad. Así como también, fichó por un club histórico de la Premier League, Leicester City. Desafortunadamente, por cosas de la vida, no logró mantenerse en el máximo nivel, regresando al Perú donde vistió las camisetas de grandes equipos como Sporting Cristal, Alianza Lima y Cienciano.
En el camino de su carrera, tuvo que sortear varios obstáculos como los malos diagnósticos de los doctores que provocaron que no juegue en El Salvador. Y es que no pudieron detectar el tumor que tenía en su pierna, aduciendo que se trataba de un desgarro. No obstante, el fútbol le dio una revancha y lo llevó a emigrar una vez más al ‘Viejo Continente’.
Infobae Perú se contactó con Pier Larrauri desde Rumania, país en el que vive y juega por CSM Ceahlaul Piatra Neamt de la Segunda División. El exDeportivo Municipal contó detalles de los momentos difíciles que le tocó pasar a raíz de la negligencia médica y revivió pasajes de su carrera por las principales ligas europeas.
El tercer peruano en Bayern Munich, su paso por la Premier League y su autocrítica por irse de Europa
- Hola Pier, un gusto, revisando un poco tu información personal, me topé que naciste en Italia, cuéntanos más detalles de ese dato...
Nací en Italia. Mi abuela, la mamá de mi papá, vino a vivir muy joven a Italia y se casó con un peruano. Ahí nació mi papá. Mi papá se fue a estudiar medicina a Italia por cinco años con mi mamá y en ese transcurso nazco. Vivo dos años en Italia, mientras que mi papá termina su especialización y luego nos regresamos a Perú para que comience a trabajar.
- Entiendo, ahora enfocándonos más en tu carrera como futbolista, ¿quién te sumerge en este mundo del ‘deporte rey’?
Mi papá siempre le gustaba jugar fútbol, lo hacía de hobby y siempre me lo inculcó de pequeño. Comencé en el club Regatas a partir de los cinco años, después me pasé a la ‘U’ y ahí se vuelve un poquito más serio.
- ¿Luego pasaste a EGB?
De la ‘U’ paso a Cristal entre los 10 o 11 años, después ocurrió el problema de la señora ‘Catita’ Bentín que se separa de la cervecería y crea EGB. Muchos de los jugadores que pertenecíamos a Cristal nos fuimos a ese club con ella. Ahí comenzó una etapa bonita, guardo muy buenos recuerdos.
- De EGB, diste el salto a Europa, ¿cómo se gestó tu llegada a Bayern Munich de Alemania?
Eso fue por intermedio de un empresario. Me consigue una prueba a los 11 años, fui durante una semana, después volví a los 12 años, una semana nuevamente. Terminando esa segunda vez, me dijeron que querían que vuelva por toda una temporada, que era más o menos entre los 13 y 14 años, ahí me quedé una temporada. Después, por muchas razones, no me pude quedar y volví a EGB.
- ¿Por qué no te mantuviste en Bayern Munich? Tiempo atrás, se habló de que incumplieron con el acuerdo que tenían...
Se acordó que si el segundo año las cosas salían bien y ambas partes estábamos contentos, iba a venir toda la familia completa porque en ese tiempo solo viajábamos mi papá y yo, y tanto mi mamá como mi hermano se quedaron en Lima. Siempre hubo la posibilidad de que pueda pasar eso. Después las cosas no funcionaron, no se llegó a un acuerdo y tuve que regresar.
- ¿Qué fue lo que más te impresionó de tu estadía en Bayern Munich?
Todo, es el primer orden del fútbol mundial. Por más que EGB hacía bien las cosas, el Bayern era mucho más profesional. Por más que tenías 13 años, el cuidado y todo lo demás era súper profesional. Los buses cuando tocaba ir a jugar a otras ciudades. Aparte el nivel también era mucho mayor.
- Bayern Munich no fue tu única experiencia en Europa, pues volviste a emigrar luego de tu regreso a Perú, esta vez a Inglaterra. ¿Cómo sucedió ello?
Tenía 17 años, un representante mexicano se contacta conmigo y me dice que me quiere buscar una prueba en Inglaterra en distintos clubes para que vaya a probarme porque había oído de mí, había visto muchos videos míos y quería llevarme para allá. Fui al Tottenham y luego a Leicester, ambos a prueba. Al final de la propuesta, el proyecto del Leicester fue más serio y creíamos que iba a tener más proyección ahí, y optamos por ese lugar.
- ¿Por cuántos años firmaste por Leicester de la Premier League?
Estuve un par de semanas a prueba por Leicester y firmé contrato a final de temporada. Un contrato profesional por tres años.
- ¿Jugaste en la reserva?
En la primera tempora jugué en la Sub 18 que nos va muy bien y el siguiente año en la reserva. Estuve en la reserva los primeros meses y luego me voy a préstamo. No estuve mucho tiempo en la reserva.
- El préstamo del que me hablas es a Pachuca de México, ¿por qué tomaste esa decisión?
Siempre es fácil hablar después de que las cosas suceden, pero no fue la mejor decisión. Todavía estaba en un proceso, tenía contrato por tres años, en ese momento mi representante me llenó la cabeza de cosas, me decía que era momento de buscar oportunidades donde pueda jugar en el primer equipo porque estaba en la reserva y no había viajado a hacer la pretemporada, pero tenía 18 años, no había apuro. Se optó que lo mejor para mi carrera era ir a México y estar más cerca del primer equipo.
- ¿Qué tal la experiencia en México?
Muy bonita. Ahí es cuando debuto profesionalmente en la Copa con Pachuca, jugué un partido. Lo recuerdo toda la vida porque es el debut. El fútbol mexicano y los mexicanos como cultura son muy parecidos a la peruana, estuve una temporada y la pasé bien.
De ganar un título con Sporting Cristal a vivir un tenso momento en Alianza Lima
- Sporting Cristal fue el club que te abrió las puertas en Perú luego de tu travesía por el extranjero, ¿cómo resumirías tu paso por La Florida?
Digamos que era muy joven, aprendí bastante porque había jugadores con mucha categoría, nivel y experiencia como es el caso de ‘Loba’ (Carlos Lobatón), ‘Piqui’ (Jorge Cazulo) y Sheput (Renzo), terminé formándome como jugador y persona porque me enseñaron a cómo superar las diferentes situaciones que se presentaban a lo largo de la temporada. Muy contento porque salimos campeones en el 2014, es el único título que tengo y le guardo mucho cariño.
- Años después jugaste en uno de sus clásicos rivales, Alianza Lima, y te encontraste con una realidad distinta. Tú mismo declaraste que el grupo no era tan unido, ¿qué pasó?
Hay equipos, grupos, que he sentido que éramos más unidos. Ese grupo del 2015 tenía muchos egos, jugadores que venían con un nombre fuerte y las cosas al final no se dieron porque no estuvimos unidos como había sentido en Cristal. Hay equipos donde los jugadores arman distintos grupos y no van por el mismo camino. Eso sentí en Alianza. Al siguiente año se fueron muchos de los jugadores y lograron ser campeones.
- Has pasado por varios clubes: Cristal, Alianza, Municipal, Cienciano, entre otros. ¿Con cuál consideras que tuviste tu mejor temporada en el Perú?
Donde mejor me fue, ocurrió en Cienciano en mi primera etapa. Después tuve buenos momentos en ‘Muni’, pero me quedo con Cienciano, donde metí ocho goles en los primeros seis meses y después me fui a Alianza. El entrenador Jorge Espejo me dio la confianza y me convenció que tenía que ser un jugador importante a lo largo de la temporada.
Los malos diagnósticos no detectaron un tumor en su pierna y causaron su salida de FAS de El Salvador
- En 2022, volviste a dar el salto al extranjero, pero no te fue muy bien. Fichaste por FAS de El Salvador y al siguiente mes anunciaron tu salida, ¿qué ocurrió?
Lo que pasó en El Salvador, no lo he contado antes, porque sentía que no era el momento. Cuando estoy en Binacional, me llega una propuesta para irme allá. Justo antes de viajar, jugamos contra Alianza y a la semana siguiente comienzo a sentir un pequeño fastidio en el posterior. Yo me quedé entrenando en el gimnasio dos o tres semanas en Perú esperando los pasajes. Viajo sintiéndome bien y en el segundo entrenamiento siento una sobrecarga en el posterior. Se me hace un estudio y sale que había un desgarro. Se esperó los 21 días, hice la recuperación, empecé a entrenar y volví a sentir un fastidio. Se volvió a sacar una imagen y salió que seguía igual de desgarrado, no había mejorado nada. Una situación atípica, sorprendente, porque nadie entendía qué pasaba, el club junto conmigo decidimos resolver el contrato, ellos decían que me tenía que operar y yo estaba en contra de eso. Regresé a Perú, comencé a tratar el desgarro, me demoré el doble (8 semanas), me saco la ecografía y salía que el desgarro seguía igual. Nadie comprendía qué estaba pasando. Me saco la resonancia, ahí encontramos el problema real, nunca me había desgarrado, tenía un tumor benigno en la pierna. Nunca había estado desgarrado, tenía este tumorcito que se tenía que extraer. En ese momento perdí contratos por malos diagnósticos. Tuve que operarme y a la semana ya podía hacer todo normal. Al día de hoy es algo que me incomoda bastante porque fue un error de las personas que no sabían ver bien las imágenes.
Busca reinventarse en una liga exótica de Europa
- Ahora, te encuentras en el CSM Ceahlaul Piatra Neamt de la Segunda División de Rumania, ¿con qué nuevo te topaste en dicho país?
Todo es un poco raro, por decirlo así, es atípico ver a un peruano por estos lugares, no he vivido cosas muy raras que te pueda contar. Estoy contento y feliz de estar acá, ya llevo varios meses, mi contrato es hasta julio, era algo que quería hacer, conocer una nueva cultura porque ya voy a cumplir 30 años y no sé cuántos años más de fútbol me queden.
- En cuanto al fútbol, ¿qué tal el nivel del fútbol de Rumania? ¿Sus instalaciones deportivas?
Venía de otra realidad que era Segunda de Perú, tú sabes que las herramientas no son las mejores, los buses, los campos de entrenamiento, todo la verdad que es muy bajo. Pasar de ahí a un país de Europa, hubo cosas que me hicieron decir ‘wao’. Tiene canchas de entrenamiento, los estadios A1, los vestuarios tienen jacuzzi y sauna, sentí que el trato era más profesional. El fútbol acá es más friccionado e intenso, creo que los campos ayudan que el fútbol sea mejor, la mayoría de las canchas son buenas, se juega a uno o dos toques. Un fútbol más dinámico.
- Me comentaste que tu contrato va hasta julio del presente año, ¿qué sigue después de ello?
Todavía no me senté a hablar de la renovación, ahorita estamos peleando por entrar a los play offs y ascender a Primera División. Siento que tenemos grandes chances. En mi caso no pienso mucho en el futuro, me enfoco en el presente. No sé si me toca regresar a Perú o ir a otro país.