En un operativo efectuado en el distrito de Nuevo Chimbote, provincia del Santa, la Policía Nacional del Perú (PNP) logró la detención de varios miembros de la organización delictiva conocida como los TNT del Norte. Esta acción policial, concretada en el asentamiento humano San Luis, permitió la incautación de un considerable arsenal de materiales explosivos, golpe significativo contra actividades ilícitas en la región.
La intervención fue posible gracias a una investigación previa que permitió identificar un inmueble utilizado por estos sujetos como almacén de su arsenal. Entre los siete detenidos se encuentran Junior Marcial Aranda Pérez, Cristian José Diestra Rosado, Luis Edgar Seminario Díaz, Jonathan José Diestra Rosado, Edmundo Luis Sánchez, y Maguiña Maldonado Edgar Alexander.
El allanamiento de esta propiedad resultó en la confiscación de 311 cajas de materiales explosivos, incluyendo cartuchos de hidrogel, detonadores no eléctricos y cordón detonante. Los implicados fueron trasladados a las instalaciones de la Dirincri en Chimbote para las correspondientes diligencias de ley.
La operación no solo destaca por el volumen de material incautado, sino también por la importancia de desarticular una banda que, según las autoridades, representaba una amenaza para la seguridad pública en la región.
La Policía Nacional se encuentra en proceso de investigación para determinar el alcance de las operaciones de los TNT del Norte y su estructura organizacional. La comunidad de Nuevo Chimbote ha expresado su apoyo a las acciones policiales, reafirmando la importancia de la colaboración ciudadana en la lucha contra el crimen organizado.
Este evento es parte de un esfuerzo continuo por parte de las autoridades peruanas para combatir el crimen organizado y garantizar la seguridad de sus ciudadanos. La incautación de este arsenal de explosivos no solo previene posibles actos de violencia, sino que también manda un mensaje claro a las organizaciones criminales sobre la determinación de las autoridades en perseguir y desmantelar redes delictivas en el país.
Emergencia en el norte de Perú por aumento de criminalidad
El Gobierno de Perú ha instaurado un estado de emergencia en Trujillo y Pataz, provincias ubicadas en el norte del país, como respuesta al incremento de actos delictivos en estas áreas. La medida, vigente por un periodo de dos meses, fue anunciada por el premier Alberto Otárola, y se caracteriza por un enfoque de control que involucra la colaboración estrecha entre Fuerzas Armadas, la Policía y autoridades locales y regionales.
Este régimen excepcional implica restricciones en horarios de funcionamiento nocturno para comercios, eventos sociales y espectáculos, limitándolos desde la medianoche hasta las 4:00 a.m.
La decisión se fundamenta en el preocupante ascenso de la minería ilegal en Pataz y los altos índices de criminalidad en Trujillo. Detalló Otárola, indicando el enfrentamiento a veinte organizaciones criminales estructuradas que operan en la región.
En particular, se destacó la gravedad de la situación en Trujillo, donde el año 2023 registró más de 30,000 delitos, incluyendo un promedio cercano a un homicidio diario. Esta estrategia de emergencia busca, según el gobierno, restaurar la seguridad y la tranquilidad de los habitantes de ambas provincias, siempre bajo un marco de respeto a los derechos fundamentales.
La explotación irregular de recursos en la provincia de Pataz ha sido señalada como un factor crítico detrás de la delincuencia galopante, ejemplificada en acciones como la extracción ilegal de minerales. Este escenario ha llevado a la conformación de redes criminales que no solo fomentan actividades ilícitas, sino que ponen en riesgo la seguridad y el bienestar de la población local. La medida de emergencia busca por tanto intervenir de forma decisiva para desmantelar estos grupos y atacar las raíces del problema.