Este 9 de febrero, la Cámara Cervecera del Perú (CCP) sugirió que el aumento del impuesto selectivo al consumo (ISC) sobre las cervezas debe ser aplicado recién a partir de abril y que la mayor carga del mismo debe efectuarse desde octubre. Esto por dos razones: primero, porque la temporada de verano no debería ser condicionada por el impuesto; y segundo, porque el último trimestre del año estima mejores condiciones para las cervecerías, por lo cual las empresas no tendrían inconvenientes en asumir una mayor carga de impuestos.
“Tomando en cuenta estas consideraciones se evitará que se afecten los resultados de la campaña de verano y le permitirá a las empresas de la categoría asumir la mayor carga del impuesto selectivo al consumo, pues se prevé que el país estará atravesando un mejor momento económico que el actual”, señaló Carla Sifuentes, que se desempeña como gerenta general de la Cámara Cervecera del Perú.
CCP acusa incoherencia en los criterios del impuesto
Según la plataforma oficial del Gobierno, el impuesto selectivo al consumo es el impuesto que uno paga a la Superintendencia Nacional de Aduanas y de Administración Tributaria (Sunat) por la compra de bienes como bebidas alcohólicas, cigarrillos o algunos combustibles. Este impuesto tiene la finalidad de desalentar el consumo de estos productos, ya que tienen efectos negativos en el medioambiente, y en el orden personal y social de los individuos.
Esto, sin embargo, no parece seguir un criterio fundamentado en la lógica, según Sifuentes. La gerenta general de la CCP avisó que los fundamentos para determinar el ISC deben ser revisados, pues productos con peores efectos no son limitados de la misma manera.
“El objetivo del ISC es el de limitar el consumo de ciertos productos que se asumen como potencialmente dañinos para la salud de la población. Bajo este planteamiento llama la atención que la cerveza pague tres veces más de impuesto selectivo al consumo que otras bebidas alcohólicas, cuando el contenido de alcohol que tiene es 7 veces menor que el promedio, de acuerdo a un reciente informe de Apoyo Consultoría. Por ello, creemos que el criterio de indexación debe pasar por un proceso de reevaluación”, indicó Sifuentes.
Suben los precios, ¿crece la informalidad?
Asimismo, se mostró preocupada por los posibles efectos de un ISC mal ejecutado, lo que generaría que el mercado se concentre, más de lo que ya está, en el campo informal. Así lo fundamenta Apoyo Consultoría, que indicó que el 10 % de los hogares (consumidores) migraría hacia el alcohol informal en un eventual incremento en los precios de diferentes bebidas alcohólicas. “Esto es peligroso porque también se expone la salud de la población”, comentó Sifuentes.
Para la vocera, el ISC apurado condicionaría el desarrollo del sector dando indicios en la presente temporada, pero sería en el 2025 cuando realmente se sentiría. “Es muy probable que esta situación obligue a las empresas a incrementar el precio de la cerveza, lo cual motivará un nuevo ajuste del ISC en el 2025″, precisó la gerenta general.
“Muchas cervezas artesanales se verán obligadas a cerrar. Ya en el 2023 han cerrado 50 cerveceras artesanales. Se verán afectadas más de 300 mil bodegas, para las que la cerveza representa el 30% de sus ingresos, además de restaurantes, bares, hoteles, entre otros. Y tendrá impacto directo en los consumidores”, finalizó.