De vender cebollas a poseer la mayor cadena de cines en Perú: la historia detrás de Cineplanet

Arrancar con un emprendimiento nunca es tarea fácil; requiere de un ideal que perseguir, una dirección clara, resiliencia y, sobre todo, enfrentarse al miedo al fracaso. La historia de Alejandro Ponce es un claro reflejo de esta premisa. Oriundo de Arequipa, su humilde comienzo se convirtió en la base sobre la cual construyó un impresionante legado empresarial. Enfrentando desde temprano las dificultades económicas de su familia, fue en las astutas tácticas de supervivencia de su madre donde halló la chispa de inspiración necesaria para forjar su futuro.

Lejos de conformarse con su situación inicial, Alejandro logró trascender las barreras que lo rodeaban, remodelando profundamente el escenario empresarial peruano al transitar de la venta mayorista de cebollas a encabezar una revolución en un sector completamente diverso.

A continuación, presentamos la historia de Alejandro, un visionario que, enfrentando un entorno de adversidades económicas en la conocida Ciudad Blanca, emprendió una búsqueda por el éxito empresarial que lo llevaría a dejar una huella indeleble.

Criado en un entorno de clase media baja en Arequipa, la infancia del fundador de Cineplanet estuvo marcada por retos económicos sustanciales. Estas condiciones, lejos de limitar su horizonte, sembraron en él un profundo espíritu de resiliencia. La necesidad de contribuir al bienestar familiar y la observación constante de los esfuerzos de su madre para generar ingresos extras, juegan un papel crucial en su desarrollo personal y profesional.

Esta influencia temprana inculcó en el futuro empresario una innata curiosidad por el mundo de los negocios y la convicción de que, con determinación, es posible transformar las adversidades en trampolines hacia el éxito.

La inclinación de Alejandro hacia el ámbito empresarial lo impulsó a matricularse en la carrera de Economía en la Universidad del Pacífico. Durante su período universitario, identificó una oportunidad de negocio al observar la preferencia de sus compañeros por la moda extranjera.

Según informa la plataforma Infomercado, este primer intento en el comercio de indumentaria resultó exitoso para Alejandro, permitiéndole asegurar una fuente de ingresos mientras continuaba con sus estudios. Este logro marcó el comienzo de su travesía en el mundo del emprendimiento.

Más adelante, enriquecido por la experiencia previa, se aventuró junto a un amigo en el comercio de cebollas. A diferencia de su primera incursión empresarial, este nuevo desafío presentó dificultades adicionales.

Entre ellas, destacaron las visitas en horas de la madrugada al mercado mayorista, las negociaciones con transportistas, y la creación de una red de contactos fiable.

Alejandro concluyó sus estudios con honores y, tras acumular experiencia en diversos emprendimientos, algunos exitosos y otros con desafíos, tuvo la oportunidad de adentrarse en el mundo empresarial corporativo colaborando directamente con Julio Velarde, presidente del Banco Central de Reserva del Perú. Esta etapa le proporcionó valiosos conocimientos que fortalecieron su deseo de emprender su propia empresa. Motivado por un fuerte interés en la inversión privada y la adquisición de empresas, descubierto tras asistir a cursos en Nueva York, Alejandro fundó Nexus Group, la firma de capital más grande de Perú. Esta compañía surge con la misión de adquirir, transformar y vender empresas, aprovechando su espíritu emprendedor y su pasión por el sector.

Nexus Group se distinguió por aplicar un enfoque estratégico y revitalizar empresas enfrentadas a obstáculos. Bajo el liderazgo de Alejandro, el equipo de Nexus Group realizó un análisis exhaustivo para identificar el potencial y las áreas de mejora en cada empresa, estableciendo planes efectivos para su desarrollo y transformación. Según información de Infomercado, esta metodología permitió a Nexus Group destacarse en el ámbito de la inversión privada.

De acuerdo con datos de Infomercado, tras su vuelta a Perú, Alejandro identificó una oportunidad única: el creciente deseo de los peruanos por experimentar el cine en entornos modernos y cómodos. Este hallazgo lo llevó a aplicar su experticia en reconversión empresarial en un sector hasta entonces inexplorado.

Así nació Cineplanet, un emprendimiento que introducía una propuesta innovadora en el ámbito del cine peruano. La cadena se distinguió por sus instalaciones contemporáneas, tecnología de punta y salas de cine diseñadas para ofrecer la máxima comodidad, marcando un antes y un después en la experiencia cinematográfica en el país. Gracias a su rápida popularidad, Cineplanet logró ampliar su presencia con más sedes a lo largo de Perú, consolidando su éxito en el mercado nacional.