Desde hace tres días, la ciudad de Arequipa se encuentra en medio de una preocupante situación: la falta de agua. Intensas lluvias en las zonas altas provocaron la entrada de lodo, lo que ha dejado a la ciudad sin suministro del líquido vital. Se estima que el 97% de los habitantes están siendo afectados por esta interrupción en el servicio, lo que viene generando una situación de desabastecimiento en los centros de abasto.
Ante la escasez de agua en los hogares, la población ha recurrido a comprar agua embotellada en los supermercados locales. Sin embargo, la demanda superó la oferta, lo que llevó a que los estantes se vacíen rápidamente. En los centros comerciales, se forman largas colas de personas que buscan adquirir este recurso vital, lo que generó un aumento en los precios y peleas entre los vecinos.
Medidas desesperadas
Algunas personas optaron por tomar medidas desesperadas, como sacar agua de una pileta en la avenida Dolores, en la Arequipa. Vecinos armados con baldes y tinas empezaron a extraer agua de esta fuente, evidenciando la gravedad de la situación y la urgencia de encontrar una solución.
Los distritos más afectados por el corte del servicio de agua son: Cerro Colorado, Cayma, Yanahuara, Cercado, Alto Selva Alegre, Miraflores, Mariano Melgar, Paucarpata, José Luis Bustamante y Rivero, Socabaya y Hunter. En estos lugares, la población se ve obligada a lidiar con la escasez y a buscar alternativas para abastecerse.
La única esperanza para muchos son los camiones cisterna de la empresa Sedapar, que están llegando a los distintos puntos de la ciudad para proporcionar agua potable a la población afectada. Sin embargo, la capacidad de respuesta de la empresa se ve rápidamente superada, lo que deja a muchos sin acceso al vital recurso.
Sedapar asegura que al mediodía se restablecerá el servicio
A través de un primer comunicado, la empresa informó que están realizando labores de limpieza en sus unidades de tratamiento para poder reanudar la producción de agua potable. Sin embargo, no se especificó una fecha ni un horario para la reposición del servicio, lo que genera más incertidumbre y preocupación entre los arequipeños.
“En estos momentos se viene realizando labores de limpieza en nuestra captación y unidades de tratamiento; una vez terminadas estas labores se reanudará la producción de agua potable, con la finalidad de poder recuperar el nivel de nuestro reservorio de cabecera R-2. Esperando que baje el nivel de turbiedad en nuestra fuente”, se lee en el oficio.
En el último mensaje de Sedapar, realizado hoy a las 7:00 p.m., confirma que las maniobras que vienen realizando permiten proyectar la reposición del servicio de agua a la población a través de sus dos plantas de producción. Según la entidad el 8 de febrero al mediodía se restablecerá el servicio.
Sin embargo, en un tono dubitativo, se añade que “los tiempos y la reposición del servicio están sujetos a que se mantengan las condiciones climatológicas, así como las operaciones que vienen realizando la Empresa de Generación Eléctrica de Arequipa (EGASA)”.
En medio de esta crisis, la empresa encargada de abastecer a la ciudad de Arequipa está priorizando el servicio de agua a los centros médicos, asegurando su funcionamiento adecuado. A pesar de las afirmaciones de Sedapar, la población muestra escepticismo, reportando la falta de agua en sus hogares y la ausencia de distribución por parte de las cisternas, lo que genera desconfianza en las declaraciones de la empresa.
Autoridades se suman a la ayuda
Ante la escasez de cisternas, el Municipio Provincial de Arequipa habilitó algunas unidades. En un comunicado, informaron que enviarán cisternas de agua no potable, destinadas para la limpieza y servicios higiénicos de la población afectada. Además, el municipio provincial anunció que la atención en la comuna durante el miércoles 7 y jueves 8 de febrero será únicamente hasta la 1 de la tarde.
La Unidad de Servicios Especiales (USE) de Arequipa desplegó decenas de efectivos con el vehículo tanqueta conocido como Pinocho. Este equipo llegó al parque Santa Teresa de Calcuta, proporcionando agua potable a áreas afectadas que aún no reciben este insumo vital. La acción busca mitigar los efectos de la escasez y garantizar el acceso a un recurso fundamental para la población arequipeña.