Ministra de Cultura tras ser echada de Puno: “Gritos eran de carácter político”

Leslie Urteaga se pronunció sobre su accidentada visita a la región sureña, cuyos ciudadanos exigieron justicia por los fallecidos en las protestas antigubernamentales

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Puneños echaron con insultos a ministra de Cultura, Leslie Urteaga (Latina Noticias)

La ministra de Cultura, Leslie Urteaga, reaccionó este domingo a su accidentada visita a Puno, donde un grupo de ciudadanos la echó entre insultos mientras reclamaba justicia por los fallecidos en las protestas antigubernamentales. Durante la tradicional Entrada de Kapus, los manifestantes vociferaron consignas como “Gobierno asesino”, “Vete de Puno”, “¿qué cosa quieres acá?”, aunque en todo momento ella hizo caso omiso.

“Hemos estado en la mesa de honor con otras autoridades locales, participando del evento protocolar. Al momento de retirarme se han manifestado algunos gritos que, lejos de ser exigencias de carácter social, eran más bien de carácter político”, declaró la funcionaria en diálogo con Canal N.

“Habrán considerado esa una forma de reaccionar; sin embargo, el Ministerio de Cultura es parte también de esta celebración, como parte del comité de salvaguarda. Y creo que también como peruana, como ministra, era parte de la respuesta que teníamos que dar a la invitación de la prefecta”, añadió.

La titular del portafolio indicó que, pese a las muestras de rechazo al Ejecutivo, continuará con sus visitas a otras regiones. “Creo que nos falta tiempo, a veces, a los ministros para visitar todos los espacios que quisiéramos. Este tema de mortificaciones o agresiones verbales no nos va a detener [para] seguir trabajando”, anticipó.

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Fotografía de archivo en la que se registró a la ministra de Cultura de Perú, Leslie Urteaga (c), durante una conferencia de prensa, en Lima (Perú). EFE/Paolo Aguilar

Puno, donde se vivió la jornada más sangrienta de las protestas de hace un año —ya que ahí murieron 18 personas en enfrentamientos con las fuerzas del orden—, vive por estos días la celebración de la Virgen de la Candelaria, su fiesta más representativa a la que la presidenta Dina Boluarte no fue invitada.

“Señora Boluarte y Alberto Otárola [presidente del Consejo de Ministros] dejen en paz a Puno. Nosotros estamos aún con el dolor por la muerte de nuestros familiares. Sus presencias pueden generar un caos. No queremos más derramamiento de sangre. Pedimos que se abstengan de participar”, invocó días atrás el presidente de la Asociación de Mártires y Víctimas en la Protesta Juliaca-Puno, Raúl Samillán.

El premier confirmaría más tarde que la mandataria no iría a la festividad, aunque envió a una comitiva de la plancha ministerial. “[Ella] va a viajar a todo el país, no tiene ninguna restricción de hacerlo, pero nunca dijimos que iba a ir a la fiesta de la Candelaria o que se había puesto en concreto una fecha para este viaje. Creo que [la fiesta] va a ser exitosa y vamos avanzando a la reconciliación nacional”, dijo a la prensa.

En la víspera, los danzantes de la festividad realizaron una coreografía que formaba la frase “Puno sí es el Perú” —Boluarte dijo lo contrario el año pasado—, que fue expuesta durante un baile realizado por la asociación cultural Uywa Chuwas de la comunidad campesina Jatucachi-Pichacani en la Universidad Nacional del Altiplano (UNA).

El premier Alberto Otárola habló sobre la agresión contra la presidenta Dina Boluarte en Ayacucho. Video: Canal N

Rechazo en Ayacucho

El mes pasado, la mandataria participó en la colocación de la primera piedra del asfaltado de una carretera en tres distritos ayacuchanos, cuando se dirigió a la población para lanzar caramelos. En ese momento, Ruth Bárcena, viuda de un asesinado en protestas, burló las medidas de seguridad y se acercó a encararla. En seguida, Ilaria Aimé, madre de un adolescente que recibió un disparo, jaló del cabello a la presidenta.

Aunque el Gobierno anunció que las tenía “debidamente identificadas”, hasta ahora no ha hecho mención a sus identidades ni ha asociado la agresión con las muertes en protestas, un caso por el que la jefa de Estado ha sido denunciada.

El exministro del Interior, Mariano González, consideró una “provocación” que Boluarte haya arribado a la región sureña. “Condeno tajantemente la agresión por parte de las señoras en Ayacucho, pero es claro el desencanto y el dolor. Es entendible la indignación”, dijo.

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