En medio de la euforia que genera la última fecha de la primera etapa de la Liga Nacional de vóley femenino 2023/24, Fernanda Tomé -una de las mejores atacantes del campeonato- denunció un grave hecho que se sucedió durante el partido entre Universidad San Martín y Deportivo Alianza. La brasileña sufrió el robo de sus pertenencias en su propio camerino.
Por medio de una extensa publicación en su Instagram oficial, la atacante brasileña dio a conocer que su reloj de la marca Hauwei Watch GT 3 fue sustraído en el Polideportivo de Villa El Salvador, mientras jugaba el duelo por la sexta jornada del torneo en el mes de diciembre.
“En primer lugar, es importante aclarar que voy a expresar mi opinión personal y que esta no tiene nada que ver con la institución a la cual represento. Como deportista profesional de voleibol, he tenido la oportunidad de vivir y jugar en varios países del mundo, sin embargo, nunca me había ocurrido un hecho como el que voy a narrar”, empezó diciendo.
“Luego de un partido disputado entre mi equipo y el representativo de Deportivo Alianza, pasé por una situación extremadamente desagradable al regresar al vestuario después de la culminación del partido. Fui víctima de un robo. Mientras revisaba mis pertenencias y buscaba mi reloj, descubrí que lo habían sustraído del interior de nuestro vestuario”, añadió.
Fernanda Tomé reveló que durante el desarrollo del encuentro, un miembro de la San Martín retornó a los camerinos y encontró en el interior a un personal médico y a una señorita de seguridad, lo cual generó suspicacias en ella, ya que consideró que no tienen el derecho de estar dentro.
“No tenían por qué estar en nuestro camerino, ya que él, si tenía que hacer algún proceso médico, debía hacerlo en el área medica, porque en el área asignada a mi equipo, nadie que no sea de nuestro equipo debe ingresar. No estoy acusando a estas dos personas, pero da la casualidad que justo que ingresan ellos se pierde mi reloj que estaba puesto en un asa de mi mochila cerca a la puerta”, apuntó.
De la misma manera, la brasileña aseguró que normalmente todas las jugadoras y comando técnico del conjunto ‘santo’ dejan sus posesiones en el vestuario asignado por la Federación Peruana de Vóley (FPV) y la organización de la Liga Nacional de Vóley “con la seguridad que resguardarán nuestras pertenencias, confiando en que existe seguridad dentro del coliseo a cargo de un jefe que comanda un equipo de trabajo que nos brindaba la tranquilidad del caso”.
Fernanda Tomé responsabilizó a la FPV
Ante esta situación, Fernanda Tomé compartió su tristeza e indignación. La voleibolista de la San Martín aseguró que anteriormente no se había perdido ninguna pertenencia en las primeras fechas del campeonato, por lo que existía la confianza de dejar los camerinos abiertos. No obstante, ahora la realidad ha sido distinta, por lo que tuvo que recurrir a las autoridades, sin poder tener el respaldo deseado.
“Luego de los sucedido, informé a la dirección del club que represento y se pusieron en contacto con la persona encargada de la organización deportiva, la señora Evelin Serna, quien expresó que investigaría. Habiendo transcurrido más de un mes del suceso, luego de consultársele, ella ha respondido ‘nadie sabe si lo ha traído o no al coliseo’. Es decir, me robaron en mi propio camerino y fuera de expresarse respecto a las investigaciones realizadas, la respuesta fue poner en tela de juicio mi credibilidad”, contó.
Anteriormente, Tomé jugó en países lejos de su natal como Tailandia, Israel e Indonesia, pero esta es su primera vez jugando en el Perú. La experiencia, por ahora, no está siendo bueno más allá de lo deportivo, tras el robo sufrido. Ahora, la brasileña solo espera que la FPV se haga cargo y pueda solucionar con prontitud este problema.
“Ante la falta de pronunciamiento de la Federación Peruana de Voleibol que organiza la LNSV (Liga), respecto a este incidente, es por ello que expreso esta situación al público, además de advertir a mis compañeras que no estamos seguras/os dentro del Polideportivo de Villa El Salvador. Cuando llegamos al polideportivo tenían puesto un aviso en la puerta de que la empresa no se hace responsable por nuestras pertenencias. No estamos seguros allá ¡Eso es un absurdo!”, sentenció.