Hace unos años, Piero Arenas no imaginaba el cambio radical que tendría su vida. De ser una persona que se movía fuera de los reflectores, llegó a ser una de las caras nuevas de uno de los programas más vistos de la televisión peruana. Desde que pasó el casting nacional, en el 2022, supo ganarse el cariño de sus compañeros y del implacable público, tanto es así que el último martes 23 de enero fue presentado una vez como integrante del espacio de América TV.
No pudo cumplir sus sueños a causa de un problema de salud, fue miembro de seguridad y hoy integra uno de los programas más visto de la televisión peruana. El paso de Piero Arenas a la pantalla chica. El chico reality se confiesa a Infobae Perú.
¿Imaginaste que te volverían a llamar?
No, pero realmente lo esperaba. Estoy muy agradecido por ello. Daré todo de mí para demostrar que no se equivocaron. Gracias también al público.
¿Cómo viviste la temporada del 2023 de Esto es Guerra? Eras uno de los rostros nuevos del programa.
Fue un año con sentimientos encontrados. Llegaba en las noches a casa con bronca, con ganas hasta de llorar, porque quería ser cada vez mejor. Estaba feliz por la oportunidad, pero también muy pendiente de mejorar. El trabajo, el sacrificio, la disciplina, el empeño, las ganas y la confianza fueron fundamentales para mi desempeño. Las cosas me fueron muy bien. Estoy muy agradecido, no ganamos, pero con mi equipo lo hicimos muy bien.
¿Cuánto ha cambiado tu vida una vez que entraste en Esto es Guerra?
La verdad que Esto es Guerra dio un giro de 360 grados en mi vida. Yo, antes de venir para Lima, trabajaba de seguridad en un instituto de la región de Lambayeque. Después de un mes, mi jefe de abastecimiento me pidió que lo apoye con Excel y AutoCAD, él sabía que yo sabía esos programas. Luego me pidió hacerle un inventario, después de ello me propusieron pasar a ser asistente de almacén.
¿Cómo así ingresaste a ser miembro de seguridad?
Mira, yo juego fútbol desde que tengo ocho años. Incluso, vine a jugar a Lima a los 12 para un equipo de Magdalena del Mar. Luego regresé a Chiclayo a jugar y debuté en primera división a los 16 años, en el Club Deportivo San Salvador. En el primer año que debuté, salí campeón. Me esforcé mucho para sacar adelante el equipo. A la par, decidí postular a Fuerza Aérea de Perú, ahí me detectaron un problema en la columna, por eso no pude ingresar. Ahí es donde me relajé, me decepcioné, tampoco vi igual el fútbol, me dediqué solo a trabajar. Es por eso que postulé como miembro de seguridad.
¿Y en qué momento decidiste entrar a Esto es Guerra?
Trabajando en este lugar, conocí a algunas personas que me dijeron que iban a hacer un casting nacional para Esto es Guerra, me animaron a entrar. Yo era muy tímido, pero lo hice. Había demasiada gente, no creí que iba a entrar. Cuando entré y me paré en el escenario de Lima, sentí que era lo mío, dije, ‘este es mi mundo’.
¿Y qué te dijeron en tu casa, tus amigos del barrio?
Todos estaban emocionados. En mi casa siempre me incentivaron a seguir adelante. Cuando llegué a Chiclayo, porque yo soy de Chiclayo, los niños que siempre me han visto jugar me recibieron con alegría, con sus pelotas para que se las firmara, me pedían fotitos. Mi mamá recontra feliz, mi familia. Fue muy lindo ese momento, pero lo tomo de una forma tranquila, porque sé de dónde vengo.
¿De dónde vienes?
De Pomalca, un distrito de Chiclayo. Siempre hemos sido unas personas muy, muy humildes. Yo no me imaginaba estar en televisión, hoy en día lo que tengo lo trato de repartir siempre con mi familia y con mis amigos. Cada cosa que me ha dado mi madre ha sido gracias a su gran esfuerzo, lo recuerdo y siento que tengo mucho que devolverle como hijo.
Iniciaste Esto es Guerra y se te involucró con Ducelia Echevarría, tuviste una relación ella. ¿Sigue el contacto?
No, no tengo contacto con ella, tengo contacto cero. Estoy tranquilo, enfocado en lo que es mi trabajo, en mi vida personal, en mi vida profesional. Ese tema quedó ahí y no lo hablo mucho en realidad.
¿Y ahora estás soltero?
Sí. (¿Admiradoras?) Sí, tengo unos mensajitos por ahí de las chicas que me quieren muchísimo. Ese es un tema que todavía me sonroja, las admiradoras. Cuando salgo con mi mamita, hay chicas que se acercan y empiezan a gritar, me suelo poner rojo, no me acostumbro.
¿Imagino que ahora tienes más cuidado con tu vida privada?
Sí. Mira, cuando me vine a vivir a Lima trabajé mucho para poder traer a mi mamá. Me saqué el ancho hasta que pudo venir. Yo le doy tiempo a ella, al trabajo y a mis estudios. Cuido mucho mi imagen, elijo a dónde salir y en qué momento, porque hoy en día estoy en la televisión y debo tener cuidado. No puedo salir en escándalos, quiero tener un perfil limpio para que las marcas me llamen y me valoren. A eso estoy apuntando. Y la verdad que el cuidar mi imagen no solo me beneficia a mí, sino también a mi familia.
Si no hubieras ingresado a Esto es Guerra, ¿seguirías trabajando en el instituto?
Sí, pero siempre trato de sacar lo bueno de todo. Es probable que hubiera seguido ahí, pero también estudiando, porque ahí encontré mi rubro, lo que me gustaba, que es administración. Empecé a estudiar esa carrera y ahora estoy en tercer ciclo, lo dejé porque entré al programa y quería meterme de lleno, pero ya lo voy a retomar. Mi deseo es culminar la carrera.
¿Qué piensas sobre las críticas hacia los chicos realitys?
He leído bastante en redes que los criticas porque supuestamente solo arman vasitos, es más, hasta yo también pensaba eso, pero una vez que entras al programa y comienzas a vivirlo, es increíble. Es mucho sacrificio, mucha disciplina, es levantarse temprano, es alimentarse bien, que es fundamental para el deportista, porque esas competencias no son nada fáciles. Tú pones a una persona que te critican de esa manera y no te va a rendir. Te hacen preguntas en una de las competencias y también tienes que estudiar. Sin embargo, cada quien tiene su forma de pensar, se respeta.
¿Y es cierto que no hay amigos en televisión?
Bueno, la verdad, yo soy muy amoroso, me encanta dar abrazos. No tengo problemas en pedir consejos y Patricio Parodi, Facundo González, Alejandra Baigorria, Said Palao nunca han dudado en dármelos. Son chicos que les gusta emprender y eso me hace admirarlos. Realmente me ayudan mucho, Patricio me da tips para manejar mis redes y lo valoro. Facundo ha ido a mi casa, mi familia lo quiere. Creo que el tema es saber elegir las amistades, yo he tenido esa experiencia. Yo solo estoy agradecido, porque ellos ya tienen una carrera ganada, y solo puedo aprender de ellos, además de ser buenas personas.
¿Cómo inicias este 2024?
Feliz, con muchas oportunidades que pienso aprovechar. Me enfocaré en Esto es Guerra, además de continuar mis estudios como administrador de empresas y terminar mi curso de inglés. También tengo un sueño, retomar el fútbol, pero ya se verá. Todo con calma, debo cuidarme de mi columna, porque una lesión sería terrible.