Despilfarro en Cenepred: 4.5 Millones derrochados en alquiler y renovación de vivienda privada con fondos públicos

La residencial de San Isidro, propiedad de Jin Tian, es el centro de un escándalo que pone al Cenepred en la mira. Irregularidades y silencio cómplice marcan el derroche de recursos

En el edificio del Cenpred, un escándalo financiero amenaza con minar la confianza pública. Más de 4.5 millones dilapidados en el alquiler y renovación de una vivienda privada, revela una historia de malversación de fondos públicos.

En el edificio del Centro Nacional de Estimación, Prevención y Reducción de Riesgos de Desastres (Cenepred), un escándalo financiero amenaza con socavar la confianza de la ciudadanía en una institución encargada de salvaguardar la seguridad del país ante posibles desastres. El centro, responsable de coordinar, facilitar y supervisar la formulación e implementación de la Política Nacional y el Plan Nacional de Gestión del Riesgo de Desastres, ve ahora su reputación mancillada por el derroche de más de 4.5 millones de soles en el alquiler y renovación de una vivienda privada.

Una residencial de San Isidro, donde Jin Tian, el propietario de la vivienda en cuestión, se mantiene en un inexplicable silencio ante las preguntas incisivas. La negativa a abordar el tema lo llevó a recurrir a las autoridades locales, llamando al serenazgo del distrito cuando las cámaras del programa intentaron obtener respuestas.

No se encuentra del todo apta

La residencial de San Isidro, propiedad de Jin Tian, es el epicentro de un escándalo que pone al Cenpred en la mira. Irregularidades y silencio cómplice marcan el derroche de recursos. (Captura)

El informe de Contra Corriente pone al descubierto una trama de malversación de fondos públicos. Más allá de la mera gestión de un inmueble, se revela que miles de soles del pueblo fueron destinados a la remodelación de la vivienda privada. Irregularidades documentadas en el informe de Control Específico de la Contraloría señalan deficiencias en el contrato de alquiler, y lo que es más alarmante, los costosos arreglos de la propiedad superaron con creces el monto total del arriendo.

La actual gestión del Cenepred y el propio dueño de la propiedad se desentienden de cualquier responsabilidad en relación con el dinero público dilapidado en este proyecto. Mientras tanto, la incredulidad crece entre los ciudadanos que ven cómo los recursos destinados a la gestión del riesgo de desastres son utilizados de manera cuestionable.

El ingeniero Miguel Yamasaki, jefe de Cenepred, manifestó su desconocimiento sobre este asunto, afirmando: “Nosotros desconocíamos de este trabajo, esto lo venía haciendo la Contraloría, nosotros no sabíamos, y teníamos que seguir funcionando, o sea, ¿a dónde íbamos?”.

José Antonio Trelles, especialista en contrataciones del Estado, no dudó en calificar las irregularidades como “enormes”. La institución, que ha desembolsado millones de soles durante años, se ve obligada a utilizar hasta los baños como almacenes. Ocupando la vivienda desde el 2014, la inversión de 2 millones de soles en remodelación plantea preguntas sobre la necesidad de tales gastos. Antes de que Jin Tian se convirtiera en el propietario, la casa pertenecía a sus padres, quienes, curiosamente, no han dado explicaciones sobre la transacción.

Bono de renovación

La institución, encargada de coordinar políticas nacionales y planes de gestión del riesgo, se ve implicada en el derroche de más de 4.5 millones de soles en la remodelación y alquiler de una vivienda privada. (Captura)

El contrato, según revela la investigación, presenta serias deficiencias. La vivienda no cumple con los requisitos mínimos para albergar una entidad pública, ya que es, en esencia, una casa. Entre los años 2014 y 2017, el contrato ascendió a la suma de 1 millón 516 mil 200 soles. No obstante, lejos de optimizar los recursos, el Cenepred decidió mejorar y remodelar la vivienda, incurriendo en un gasto de 2 millones 519 mil 354.26 soles, superando así el costo total del arrendamiento.

El escenario empeora con la aceptación por parte del Cenepred de un aumento del 20% en la renta. A pesar de los millones gastados, la casa sigue siendo propiedad de un particular afortunado. Pasillos abarrotados de cajas y escritorios, escaleras utilizadas como almacén: este es el panorama de la institución encargada de velar por la seguridad del país.

José Luis Navarro, un extrabajador de Cenepred, reveló que “era un comité de selección y se dio la buena pro para estar en la casa”. A pesar de los cuestionamientos y las deficiencias evidentes en el contrato, los arrendamientos han continuado hasta la actualidad. El contrato, ampliado solo por este año, se presenta como un ejemplo más de la falta de transparencia que permea la gestión de recursos en esta institución.

El jefe de Cenepred, al ser abordado con preguntas sobre el tema, declaró: “Nosotros nos esteramos en noviembre del año pasado, a nosotros nos corresponde las acciones administrativas, pero no las acciones civiles”.