La historia completa de Olaya Park, el polémico parque acuático de Agua Dulce que enfrenta a los pescadores artesanales

Una nueva polémica ha llegado a la ciudad. Lo hizo en forma de estructura inflable: el Olaya Park, que anuncia ser el parque acuático más grande del Perú. A raíz de esta atracción se ha generado una enorme disputa: gremios pesqueros, empresarios, la Municipalidad Distrital de Chorrillos e incluso la Marina de Guerra del Perú se han visto involucrados.

Para entender el asunto es necesario reconocer qué es el Olaya Park. En sus redes sociales, la atracción se anuncia como un parque acuático que abarca un área de 3 mil metros cuadrados, y cuenta con una estructura de inflables y un muelle flotante. El inflable pretende ser situado en aguas chorrillanas, precisamente en la playa Agua Dulce, lugar que atrae a los inversionistas por su amplio potencial, pues miles de peruanos abarrotan el popular balneario cada fin de semana.

La iniciativa no ha generado ninguna simpatía en el sector pesquero. Los trabajadores del terminal pesquero de Chorrillos argumentan que la zona dispuesta para la colocación del parque acuático queda en un banco de reproducción, un banco natural de pesca. De ahí, los efectos negativos que una estructura gigante puede generar sobre el ecosistema marino ha sido la principal preocupación del sector.

Ante tal situación, la Asociación de Pescadores Artesanales José Silverio Olaya Balandra de la Caleta de Chorrillos realizó un plantón en Agua Dulce a modo de respuesta. Cabe recordar que, pese a su cancelación y poca comunicación de la empresa, la inauguración del parque fue anunciada por todo lo alto para el pasado 20 de enero. No sucedió.

Las cámaras de Epicentro TV registraron la llegada de personal de fiscalización a la playa chorrillana, donde intentaron retirar a los pescadores, quienes resistieron bajo una bandera que lucía “la playa no se vende ni se regala, nuestros puestos de trabajo se defienden, el pejerrey peligra”.

El parque acuático es parte de la cadena de hoteles VPX, propiedad del equipo logístico especializado en los sectores hotelero y turístico, VPX Holding. El grupo inversor cuenta con diferentes proyectos como un hotel en Asia, otro en Cieneguilla y un restobar en Paracas.

El 20 de octubre del 2023, la Dirección General de Capitanías y Guardacostas (Dicapi), órgano de la Marina de Guerra del Perú, publicó la Resolución Directoral 639-23. El documento responde a Lenin Bladimir Rimarachín Díaz, gerente general de la empresa VPX Sports S.A.C., quien solicitó la reserva de un espacio acuático. El pedido de reserva de Rimarachín tiene como razón: la reserva del espacio acuático para la instalación del proyecto VPX Sports, conformado por un parque acuático y un muelle flotante.

Tras revisar que el área solicitada “no se superpone con áreas acuáticas con derecho de uso, áreas reservadas para la Defensa Nacional ni con áreas consideradas para el Desarrollo Portuario” determinó dar la obtención de reserva de uso de área acuática.

La obtención de la reserva dura un año (desde el 20 de octubre del 2023) y limita todo proyecto dentro del área establecida. Eso sí, la aprobación no fue para el uso del terreno sino para la reserva del uso del terreno, por lo que no tiene permiso para iniciar con la construcción del proyecto.

La confusión respecto al debate y la ausencia de comunicados por parte del Olaya Park respecto a su fallida inauguración provocó respuesta de la Marina de Guerra del Perú, que aclaró dos puntos específicos:

1. La reserva de área acuática para la obra de uso recreativo VPX Sports, conformada por un parque acuático y un muelle flotante, es de 20 mil 81 metros cuadrados (20.081,073 m2).

2. VPX Sports S.A.C. no tiene permiso para construir en el área reservada, pues la Autoridad Marítima no le ha otorgado esa facultad.

Finalmente, Olaya Parks sacó un comunicado respondiendo a ciertas cuestiones que habían quedado inciertas. Sin embargo, respecto a la inauguración tan anunciada y que nunca se dio se limitó a decir que requiere de ciertas licencias pendientes.

En el comunicado, la empresa acusa a los pescadores de la Asociación de Pescadores Artesanales José Silverio Olaya Balandra de la Caleta de Chorrillos de “malinformar a la opinión pública”.

En sus precisiones, aclara que el parque tiene 3 mil metros cuadrados. Esto ya lo había anunciado en sus plataformas oficiales. No obstante, no considera que el área reservada no es de 3 mil metros cuadrados sino de más de 20 mil.

Asimismo, indica que, al no ser contaminante, el parque no supone un peligro para el ecosistema marino. Los pescadores, por supuesto, discrepan.

Por último, indicó que la asociación pesquera antes mencionada ”usurpa” el muelle artesanal de Chorrillos, pues carece de validez para su administración “desde agosto del 2016, cuando dicha cesión administrativa le fue retirada”.