La administración de Dina Boluarte expresó este martes una “condena enérgica” contra la ola de violencia sin precedentes desatada en el Ecuador, declarado por el presidente Daniel Noboa bajo conflicto armado interno.
En un comunicado oficial difundido por la Cancillería, el Gobierno respaldó también las acciones del mandatario para preservar “la institucionalidad y estabilidad democráticas” y deseó “un pronto restablecimiento de la paz y seguridad en dicho país”, donde se ha registrado la toma de un canal de televisión, estallidos de automóviles en distintas ciudades, ataques con explosivos, secuestro de policías y retención de agentes de las penitenciarías en las propias cárceles.
“El Perú expresa su solidaridad con las víctimas de dichos actos de violencia”, agregó el texto, difundido en medio de una reunión de emergencia convocada por Boluarte, a la que asistió el titular de Relaciones Exteriores, Javier González Olaechea.
El canciller acudió a la cita junto con el premier Alberto Otárola y los ministros Víctor Torres (Interior), Eduardo Arana (Justicia) y Jorge Chávez (Defensa), en medio de pedidos al Ejecutivo de movilizar tropas a Tumbes y evaluar el cierre de fronteras.
Noboa, con quien la gobernante se comunicó en noviembre pasado, ordenó a las Fuerzas Armadas ejecutar acciones para neutralizar estas “organizaciones terroristas y actores no estatales beligerantes”, ante la toma del canal TC de Televisión (Guayaquil) por un grupo de hombres fuertemente armados.
Los delincuentes irrumpieron en el set en plena trasmisión en vivo, sometieron al personal y luego se escucharon disparos y gritos, hasta que llegó la Policía. Las fuerzas policiales de élite lograron liberar a los rehenes, que están sanos y salvos, salvo dos empleados que sufrieron heridas leves y fueron atendidos en un centro hospitalario.
Junto con Boluarte, otro líder de la región sudamericana que expresó su rechazo a la violencia ejercida por grupos criminales fue el colombiano Gustavo Petro, quien hizo “votos para que se estabilice la situación de seguridad y orden público” en Ecuador, con miras “a restaurar el espíritu de armonía” en “el marco de los principios del Estado de Derecho”.
Panorama en Ecuador
Noboa ya había declarado el estado de excepción en todo el país por sesenta días, con toque de queda durante la noche y madrugada, pero la medida no evitó que el caos se apoderara en varias ciudades y provincias del país.
Los incidentes comenzaron poco después de que las autoridades desplegaran operativos en una cárcel de Guayaquil en busca de José Adolfo Macías, alias ‘Fito’, líder de ‘Los Choneros’, considerada unas de las bandas criminales más peligrosas del país por sus presuntos nexos con carteles mexicanos, y que aparentemente se fugó el fin de semana.
Sobre ‘Fito’ se abrieron juicios por delincuencia organizada, tenencia de armas, asesinato, asociación ilícita y delitos contra la propiedad con sentencias, que sus abogados han logrado eliminar. Al momento tiene dos sentencias por asesinato y ha cumplido once años de prisión.
El secretario de Comunicación de la Presidencia, Roberto Izurieta, cree que escapó pocas horas antes de que se iniciaran los operativos el domingo. De hecho, la Policía peruana intensificó las medidas de seguridad para evitar un eventual ingreso por Tumbes.
En medio del estado de excepción, también se fugó Fabricio Colón Pico, capturado la semana pasada luego de que la fiscal general, Diana Salazar, denunciara un presunto plan para atentar contra su vida. Las autoridades le atribuyen participación en el grupo criminal ‘Los Lobos’, vinculado con el cartel Jalisco Nueva Generación de México.
Durante los motines en las seis cárceles del país, los presos han retenido a funcionarios de prisiones, sin que por el momento las autoridades hayan informado de cuántos están secuestrados ni de su situación.