El suboficial de la Policía Nacional del Perú (PNP) Joe Erik Torres Lovón ha sido sentenciado a 18 meses de prisión preventiva por el delito contra la vida de Rosalino Flores. El Poder Judicial dictó la medida este 5 de diciembre contra el efectivo policial, acusado de asesinar al estudiante de gastronomía, quien falleció tras recibir impactos de más de 30 perdigones en el contexto de las protestas en Cusco contra el actual régimen de la presidenta Dina Boluarte.
La decisión del juez Leodan Cristóbal Ayala, del Sexto Juzgado de Investigación Preparatoria de la Corte Superior Nacional, responde a la solicitud de la Fiscalía, que tras las investigaciones preliminares encontró elementos que vinculan al suboficial con los hechos. Torres Lovón enfrenta cargos por el asesinato del joven, cuya muerte se produjo en medio de manifestaciones de diciembre 2022 a enero de 2023.
La detención preventiva busca garantizar la presencia de Torres Lovón en el proceso judicial y evitar riesgos de fuga o de obstrucción a la justicia. Sin embargo, el policía estaría no habido, pues el juez Cristóbal Ayala ha dictado búsqueda y orden de captura.
Durante el proceso judicial, el suboficial Torres Lovón presentó dos constancias laborales, que fueron desestimadas por el juez Ayala debido a su idéntico formato y contenido; se pretendían usar para demostrar su arraigo laboral. Según la fiscalía, el policía investigado abandonó sus labores el 14 de noviembre de 2023, por lo que sí habría peligro de fuga al no estar trabajando.
El juez Ayala subrayó en su dictamen que “ningún miembro del personal de la Policía Nacional debe acatar ninguna orden enviada violatoria de los derechos humanos de las personas”, destacando la responsabilidad que tienen los efectivos de seguridad en el cumplimiento de los derechos fundamentales
Transcurrido un año desde las manifestaciones sociales en las que resultaron víctimas 49 ciudadanos, incluyendo menores de edad, por parte de las fuerzas policiales y militares, la justicia ha emitido la primera orden de prisión preventiva contra uno de los acusados de ser autor directo de los crímenes.
Rosario Flores recibió 36 impactos de perdigón por la espalda
El estudiante Rosalino, de 22 años, falleció en marzo de 2023 después de haber sufrido graves heridas por 36 disparos de perdigones en la espalda, los cuales le perforaron órganos vitales. El joven había resultado herido al apoyar las manifestaciones en Cusco el pasado 11 de enero, donde la violencia policial culminó con 17 lesionados por perdigones, un herido por un proyectil no identificado y una víctima mortal a causa de un disparo en el tórax.
Al momento del incidente, ya se registraban 40 muertes a nivel nacional relacionadas con los enfrentamientos entre civiles y elementos de seguridad estatales. Rosalino protestaba en contra del uso excesivo de la fuerza por parte de las autoridades. Él joven fue trasladado al Hospital Arzobispo Loayza, donde se llevaron a cabo procedimientos para la extracción de los perdigones, sin embargo, su estado de salud se deterioró hasta su deceso