En Perú, la violencia sexual contra las niñas y adolescentes constituye una de las problemáticas más graves y preocupantes. Así lo confirman diversas organizaciones que defienden los derechos de esta población, como el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef). Sin embargo, el reporte más reciente del Ministerio de la Mujer y Poblaciones Vulnerables (MIMP) evidencia un panorama desolador: 9 de cada 10 menores víctimas de abuso sexual son parte de la población femenina.
Según el Programa Nacional para la Prevención y Erradicación de la Violencia contra las Mujeres e Integrantes del Grupo Familiar (Aurora), esto pone atención a la necesidad urgente de implementar medidas y políticas más efectivas para proteger a la población infantil femenina.
Niñas y adolescentes, principales víctimas de violencia sexual
En Perú, los Centros de Emergencia Mujer (CEM) han registrado una alarmante cifra de más de 45 mil casos de violencia sexual contra a víctimas menores de edad, con un rango comprendido entre 0 y 17 años, durante los últimos tres años. Y, solo en el 2023, se contabilizaron 20 mil 377.
Esto fue corroborado por Unicef, que reveló que, entre los años 2017 y 2022, los Centros de Emergencia Mujer (CEM) han brindado atención a 74 mil 413 casos de violencia sexual dirigida a la población infantil y adolescente. Sin embargo, en estos hechos —que comprenden un abanico de delitos como violaciones, tocamientos indebidos, acoso sexual y explotación pornográfica— han tenido una mayoría abrumadora de víctimas femeninas, que constituyeron al 92% de los casos.
De esta manera, el organismo internacional insta a fortalecer las políticas públicas, los programas educativos y los sistemas de justicia para garantizar la integridad y la seguridad de las menores, y para favorecer un entorno seguro y propicio para su desarrollo.
2.851 niñas y adolescentes fueron reportadas como desaparecidas
De acuerdo a un informe de la Defensoría del Pueblo, entre enero y noviembre de este año, se han registrado 4.833 notas de alerta de mujeres desaparecidas. De estas, el 41% correspondieron a mujeres adultas y el 59%, a niñas y adolescentes. La entidad precisó que las regiones con los más altos índices son Lima (1.798), La Libertad (257), Cusco (233), Arequipa (232), Junín (221) y Piura (216).
Dichos estudios acentúan la problemática del abuso sexual en menores, así como sus efectos devastadores en las víctimas y sus comunidades. La visibilización de estas cifras es un paso crítico para la toma de conciencia social y la movilización de recursos hacia la lucha contra esta forma de violencia de género.
Canales de ayuda
Si conoces o eres víctima de situaciones de violencia y abandono familiar, puedes comunicarte de forma gratuita Línea 1810 (Línea de Ayuda a Niñas, Niños y Adolescentes), que funciona las 24 horas del día y es atendida por profesionales en derecho, psicología y trabajo social. Cualquier usuario u operador que conozca el caso de un menor de edad que se encuentre en riesgo o desprotección familiar también debe alertarlo.
Además, puedes contactar con la Línea 100, que atiende casos de violencia contra la mujer e integrantes del núcleo familiar, puedes comunicarte de forma gratuita a la Línea 100, la cual “brinda información, orientación, consejería y soporte emocional en quechua, aimara y castellano para las personas afectadas”. Hazlo desde un teléfono fijo o un celular, y recuerda que atiende las 24 horas y los siete días de la semana.
También puedes acudir a uno de los Centros Emergencia Mujer (CEM), que se especializan en ofrecer “atención integral y multidisciplinaria” para sobrevivientes. Cuenta, además, con asesoría legal, contención emocional y apoyo social a nivel nacional. Atiende de lunes a viernes, en el horario de 8.00 a.m. a 4.15 p.m. y de forma permanente si están dentro de dependencias policiales. Para más información, comunícate al (01) 419 7260.