El capitán Giacomo Morote, jefe del Departamento de Oceanografía de la Marina de Guerra del Perú, refutó este miércoles al alcalde del Callao, Pedro Spadaro, por vincular los oleajes anómalos en la provincia portuaria con el terremoto que golpeó esta semana la prefectura de Ishikawa (Japón) y obligó a activar una alerta por tsunami en gran parte del archipiélago.
El burgomaestre negó que la fluctuación del mar tenga relación con el fenómeno El Niño Costero y la atribuyó, sin sustento, al sismo de magnitud 7,6 que dejó al menos 73 muertos, mientras se intensifican las tareas de rescate para encontrar a supervivientes bajo los escombros.
El malecón y varias de las calles de La Punta fueron inundadas por el mar durante la madrugada, sin que se reporten daños personales, aunque sí en la infraestructura del malecón, que fue cubierto por numerosas piedras arrastradas por la corriente marina.
La playa de Chucuito, así como el malecón y la plaza Grau, en el centro histórico del Callao, también se vieron afectados por la subida de la corriente, que durante toda la mañana siguió golpeando la franja litoral y causó daños en bancas, ornamentos y el césped de la zona.
En diálogo con Latina, Morote rechazó “categóricamente” que el fenómeno “sea producto o tenga influencia” del terremoto en la localidad nipona y aclaró que se debe, en rigor, a las tormentas que se presentan en California (Estados Unidos).
“Ese es el agente generador. Ese tren de olas viaja desde el hemisferio norte hasta nuestras costas y está generando estos oleajes [...] También es importante mencionar que este tipo de oleajes, provenientes del norte, tienen un impacto mayor porque toda la costa peruana está protegida para los oleajes regularmente conocidos, que son del sur”, señaló.
“La Punta es un distrito expuesto. Por eso vemos una clara diferencia entre lo que pasa aquí y lo que está pasando en las playas de la Costa Verde, donde no hay afectación [por este evento]. Este es un oleaje que está afectando a toda la zona norte y centro del país, desde Zorritos y prácticamente hasta Pisco”, matizó.
Según un pronóstico de la Dirección de Hidrografía y Navegación de la Marina, la intermitencia de oleajes —entre moderados y fuertes— se extenderá hasta el próximo viernes y luego empezará un decaimiento. “Se espera que el domingo se restablezcan las condiciones en todo el litoral”, confió el capitán.
De momento, 34 puertos y terminales de embarque marítimo permanecen cerrados en el litoral norte y centro del país, mientras que está vigente una alerta para que veraneantes y deportistas no ingresen al mar, una medida que estará bajo el criterio de las autoridades municipales.
La administración de Spadaro ha implementado medidas como la instalación de cintas y vallas, además de la vigilancia constante para prevenir el acceso a las zonas afectadas por las aguas. El burgomaestre también especificó que el malecón de Chucuito quedará cerrado cerca de un mes para la ejecución de trabajos de reconstrucción.
“Las obras que vamos a realizar serán de entre 30 y 20 días, así que por lo menos durante ese tiempo va a estar cerrado. Luego seguiremos evaluando [...] La Marina también ha decretado el cierre de los puertos y de las playas, así que vamos a dar cumplimiento a esta orden”, dijo.
Lluvias
El 2024 ha empezado también con una alerta del Centro de Operaciones de Emergencia Nacional (COEN) de Defensa Civil sobre lluvias intensas en 16 de los 25 departamentos, sin excluir a Lima, donde reside un tercio de la población total.
Igualmente, hay probabilidad de granizo en las jurisdicciones por encima de los 2.800 metros sobre el nivel del mar y nieve de forma aislada en zonas por encima de los 4.000 metros sobre el nivel del mar de la sierra centro y sur.