Para muchas personas, diciembre es un mes para realizar un balance de cómo les fue en el año y reflexionar sobre cuáles serán sus metas para los siguientes 12 meses. La psicóloga Antonella Galli, de la Clínica Ricardo Palma, explica que trazarse propósitos realistas para el año venidero es una costumbre muy positiva, ya que es una motivación para hacer algo importante por uno mismo.
Los propósitos de Año Nuevo son compromisos personales que las personas se plantean al inicio de cada año con la intención de mejorar algún aspecto de su vida o adoptar hábitos más saludables. Suelen incluir metas relacionadas con la salud, la educación, las finanzas personales o las relaciones interpersonales. Estos propósitos actúan como una forma de motivación y autoreflexión, para fijar objetivos que conduzcan a un bienestar general o logro de metas específicas.
Aunque esto no es algo sencillo. No basta con tener buenas intenciones, hay que trabajar duro. “Se necesita constancia y compromiso para hacer cambios positivos en la vida”, refiere la especialista tras indicar que tampoco debemos desanimarnos si las cosas no salen como lo planeamos o no se alcanzan todas las metas trazadas.
“En la vida vamos afrontando obstáculos y a veces es necesario detenerse para luego retomar aquellos propósitos que nos hemos planteado. Si no lo conseguimos, es totalmente válido ponerse nuevas metas, redefinir estrategias y volver a empezar. Hay que ser persistentes”, señala.
Cinco pasos a seguir
Antes de trazarse objetivos es fundamental tomar en cuenta todos los aspectos relevantes de la vida. De esta manera, podrá plantearse propósitos que mejorarán su salud física, mental y emocional.
- Familia. Qué le gustaría mejorar: la comunicación, incrementar el tiempo que pasan juntos, superar algunas limitaciones (espacios dentro del hogar), fortalecer la relación con la familia política, etc.
- Trabajo. Analice cómo mejorar en el aspecto profesional: ser más organizado, identificar fortalezas, superar limitaciones, definir hasta dónde quiere llegar en su empleo, quiere ascender y asumir más responsabilidades o desea cambiar de rubro, etc.
- Plano personal. Replantee su desarrollo personal: qué quiere desarrollar en cuanto a sus actitudes con los demás, con la vida, analice cómo está su salud mental, cómo se siente, ha cambiado para bien o para mal, qué aspectos necesito mejorar y modificar. Busca fortalecer su espiritualidad, autoestima, practicar técnicas de meditación y/o relajación. El desarrollo personal también tiene que ver con el cuidado de la salud, alimentación sana, visitar al psicólogo si necesito reforzar algunas áreas, mejorar el aspecto físico, etc.
- Desarrollo de vínculos. Reflexione sobre cómo le está yendo con su pareja, necesita mejorar la comunicación, los detalles, tomar vacaciones juntos, compartir alguna actividad. Si es soltera o soltero, puede replantearse los vínculos con las amistades, optar por tener una mascota o una compañía.
- Desarrollo de talentos individuales. Piense en qué cosa es buena o bueno, qué habilidades tiene: ¿escribe, pinta, canta, baila, hace manualidades?, retome esos talentos que ya no practica o realice nuevas actividades que le permitan descubrir nuevas aptitudes. Quizá un deporte, cycling, maratones, etc. Con ello, irá conociendo a personas vinculadas a estos talentos.