La Junta de Fiscales Supremos ha designado a Martha Elizabeth Maisch Molina como representante titular del Ministerio Público ante el Jurado Nacional de Elecciones (JNE). Ella toma el lugar de Delia Espinoza, quien ha retornado a sus funciones dentro de la Junta de Fiscales Supremos.
Maisch Molina vuelve al pleno del JNE, ella fue designada en 2021. Ahora le toca desempeñar un papel clave en la supervisión de los procesos electorales en Perú, le toca garantizar la legalidad y transparencia como fiscal suprema provisional. Si bien no es una fiscal suprema titular, sí es provisional y ante la falta de quorum la figura sería posible. En la ley orgánica se precisa que pueden integrar miembros de junta actuales o anteriores mediante votación
El último miércoles 20 de diciembre, el presidente del Jurado Nacional de Elecciones, Jorge Salas Arenas, solicitó a la Fiscalía de la Nación que designe a su representante en la institución, debido a que algunos procesos electorales estaban a punto de ser celebrados y era imperativa la presencia de un representante. Ante esta solicitud, se han suscitado diferentes dudas respecto a qué fiscal supremo sería quien asuma este cargo ante dicho organismo autónomo.
Como se sabe, quien estaba inicialmente destacado como representante del Ministerio Público ante la JNE era la fiscal suprema Delia Espinoza; no obstante, la magistrada fue recientemente reasignada en la Fiscalía Suprema Especializada en Delitos Cometidos por Funcionarios Públicos, despacho al que recientemente se han designado a dos fiscales adjuntos.
El cambio de Delia Espinoza al Ministerio Público surge luego de que la misma fiscal solicitara su reasignación en un proceso por el que, incluso, tuvo que acudir ante el Poder Judicial, mediante una demanda de amparo; ello ante a negativa de la suspendida fiscal de la Nación, Patricia Benavides a reasignarla en la Junta de Fiscales Supremos con la excusa de la existencia de un acuerdo que resolvía mantenerla como destacada ante el JNE.
¿Quién podría representar a la Fiscalía de la Nación ante el JNE?
Según lo dispuesto por la ley orgánica del Jurado Nacional de Elecciones, uno de los miembros de dicha entidad debe provenir de la Junta de Fiscales de Supremos; ya sea mediante “votación secreta por dicha Junta; o entre los Fiscales Supremos jubilados o en actividad”; este fue el proceso por el que inicialmente se eligió a Delia Espinoza, a quien, al estar en actividad, se le concedió una licencia.
No obstante, en la Junta de Fiscales Supremos actualmente existen tres magistrados, de los seis que deberían estar designados. Estos son los fiscales Pablo Sánchez, Juan Carlos Villena (actual fiscal de la Nación interino); y la misma Delia Espinoza, recientemente designada en un despacho dentro del Ministerio Público. La junta también se encuentra integrada por Patricia Benavides, sin embargo, al estar en calidad de suspendida por la JNJ, no puede ejercer cargo alguno.
Ante este panorama, en el que el número de integrantes de la Junta de Fiscales de Supremos se ve aminorado, la opción más clara para ser destacada ante la institución electoral sería el fiscal supremo Pablo Sánchez; quien, con 67 años, cumple aún con los requisitos para ser designado. No obstante, se sabe que, debido al estado de este magistrado, no existen mayores posibilidades de que pueda cumplir las labores ante el JNE.
La salida en la reforma de la nueva ley del Ministerio Público
Como se sabe, existe hasta la fecha solo un fiscal provisional de los dos que fueron nombrados por la fiscal Patricia Benavides, este sería Franklin Tomy López, quien podría entrar en calidad de Fiscal Supremo Provisional Transitorio; no obstante, estos no pueden ejercer la labor de fiscales supremos a cabalidad, puesto que su intervención solo serviría para que la junta obtenga quórum; y no es titular.
Advirtiendo este entrampamiento, el mismo fiscal de la Nación, Juan Carlos Villena ha aclarado que este problema buscaría ser subsanado mediante el planteamiento de una nueva ley orgánica del Ministerio Público, en la que se plantea eliminar la figura de fiscales supremos provisionales; a fin de que solo se puedan designar magistrados titulares con los que las labores de la Junta de Fiscales sean cumplidas a cabalidad.
El problema con esta salida, es la presión que se cierne cada vez más sobre la Junta de Fiscales Supremos por parte de la JNE. En la entrevista del último miércoles, Salas Arenas advirtió que se avecinan procesos electorales importantes a cumplir desde las primeras fechas del próximo año; las cuales podrían verse afectadas de no contar con un representante de la fiscalía. La reforma es un proyecto contrarreloj.